La salida procesional del Domingo de Resurrección ha puesto el punto final a la Semana Santa 2002, que estrenaba la nueva imagen del Resucitado, obra de Manuel Martín Nieto, que ha recorrido por primera vez las calles de Ciudad Real, después de tres años de espera.
Una Semana Santa, que en palabras de la alcaldesa de Ciudad Real, Eva María Masías, que ha estado acompañada de la primera teniente de alcalde, Pilar Zamora, y del portavoz del Grupo Municipal del Partido Popular, Francisco Cañizares, ha sido “la de la recuperación, del reencuentro, emotiva, extraordinaria por lo que hemos vivido, por lo que hemos vuelto a sentir, a compartir, la emoción, la tradición y la costumbre, en definitiva hemos vuelto a vivir”. Con gran emoción la primera edil reconocía “la satisfacción por poder vivir mi primera Semana Santa como alcaldesa, en la que he querido, personalmente, mostrar mi apoyo directo a todas las hermandades, cofradías y a todas las personas que directa o indirectamente trabajan durante todo el año para conseguir que esta fiesta sea ese reclamo cultural, social y turístico de primer orden y que está declarada de interés turístico nacional”. Añadía Masías que “un esfuerzo que se ha visto recompensado por los aplausos y esa gente que ha tenido la ciudad llena. He tenido la satisfacción de acompañar a muchos de los titulares de las hermandades, que han hecho su estación de penitencia, y el haberlo vivido en primera persona y tan de cerca hace que sepas que realizan un trabajo incesante por la ciudad”. Terminaba diciendo la alcaldesa que “esperábamos visitantes, pero se han superado nuestras mejores previsiones con una ocupación hotelera que ha llegado prácticamente al noventa y cinco por ciento, con gente que ha venido de Europa (Italia, Francia, Bélgica o Alemania) y mucho turista nacional de la zona del Levante, Madrid o Cataluña”.
Por otra parte, Yolanda Gómez, presidenta de la Asociación de Cofradías y Hermandades de la Semana Santa de Ciudad Real, hacía una valoración “muy positiva, porque todos teníamos ganas de volver a una cierta normalidad, como hemos visto en las calles y aunque siempre hay detalles que mejorar y pulir todas las hermandades hemos crecido mucho y se ha podido apreciar en los cortejos”.
La procesión de Jesús Resucitado y María Santísima de la Alegría ha discurrido con absoluta normalidad, en un día muy caluroso y soleado.
