Está liderada por una enfermera experta que tiene como objetivo facilitar la lactancia materna y prevenir mediante formación, atención y seguimiento aquellos factores que puedan derivar en el abandono prematuro de la misma.
La Gerencia del Área Integrada de Guadalajara, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), ha puesto en funcionamiento la Unidad de Lactancia Materna con el objetivo de facilitar una lactancia exitosa y prevenir el abandono precoz de la misma.
La creación de esta nueva Unidad es una de las acciones que se contemplan dentro de la Guía de Buenas Prácticas de Lactancia Materna, que a su vez se enmarca en la implantación de guías de evidencia científica con las que aumentar la excelencia en cuidados y mejorar la calidad y seguridad de los cuidados que se proporcionan a los usuarios.
La Unidad de Lactancia está encabezada por una enfermera especialista en Obstetricia y Ginecología, Sonia Pomeda Paños, líder de la implantación de la Guía de Buenas Prácticas de Lactancia Materna en la GAI de Guadalajara.
El objetivo es la atención a la madre y/o lactante que presenten alguna dificultad y contribuir así a que se instaure una lactancia exitosa. Con ello se pretende reducir el abandono precoz de la lactancia motivado por problemas que se pueden solucionar a través de una mayor atención y seguimiento, tanto al inicio de la lactancia como en el transcurso de la misma.
La atención va dirigida a madres que necesitan asistencia individualizada para iniciar, mantener o mejorar el volumen de leche materna (especialmente las madres de recién nacidos pretérmino) durante su ingreso en la Unidad de Obstetricia. También para madres con bebés ingresados en Neonatología, en UCI pediátrica o en el servicio de pediatría, así como madres lactantes y sus recién nacidos que acuden a urgencias por un problema de lactancia agudo y que necesitan seguimiento posterior para su resolución.
Otra de las situaciones es el de madres que precisan asesoramiento para mantener la lactancia en situaciones de tratamientos o pruebas diagnósticas que contraindican temporalmente la lactancia materna, o en los casos de intervenciones quirúrgicas en la madre o en el lactante.
Se ha elaborado además un documento que recoge la justificación por la que se crea la unidad, sus objetivos, recursos materiales y humanos existentes, el procedimiento y el funcionamiento de la nueva Unidad de Lactancia, así como los problemas que pueden surgir durante la misma.
Este documento se basa en las prácticas basadas en la evidencia y tiene en cuenta la experiencia de otras unidades de este tipo que funcionan en hospitales y gerencias con amplia experiencia en esta materia en todo el territorio nacional.
Estas experiencias han demostrado su valor a la hora de aumentar los indicadores de inicio de la lactancia, la lactancia exclusiva hasta los seis meses y el mantenimiento de la lactancia a largo plazo. Ello, a su vez, ha supuesto la mejora de la salud de madres y niños y la reducción de problemas de salud y de costes sanitarios.
Tal y como destaca la directora de Enfermería del Área Integrada de Guadalajara, María Isabel Escámez, la implantación, entre otras, de la Guía de Buenas Prácticas de Lactancia Materna y la creación de una unidad especializada se enmarcan en el objetivo de lograr que la Gerencia de Area Integrada de Guadalajara obtenga la acreditación como Centro Comprometido con la Excelencia en Cuidados (BPSO).
Beneficios de la lactancia materna
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienza la lactancia materna en exclusiva durante los seis primeros meses de vida del bebé, y posteriormente la continuación de la lactancia hasta los dos años o más aunque iniciando la alimentación complementaria.
Entre los beneficios que aporta la lactancia al bebé destacan la protección frente a enfermedades infecciosas y la disminución de la mortalidad infantil. También disminuye el riesgo de obesidad infantil y adulta y evita el estreñimiento, reduce el llanto y favorece el vínculo entre el bebé y la mamá.
Las ventajas para las madres son de tipo emocional, con la reducción del estrés y una menor tasa de depresión posparto, y también de tipo fisiológico, al favorecer la contracción uterina y la disminución de las hemorragias y de la anemia, la protección frente a algunos tipos de cánceres y un menor riesgo cardiovascular y de diabetes.
