El 11% de los afectados por esta patología crónica, en nuestro país, desarrolla EDM, una complicación ocular que distorsiona la visión.
La Federación Española de Diabetes quiere acabar con este vacío informativo mediante su campaña “Edema Macular Diabético”.
El 11% de los pacientes con diabetes en España desarrolla Edema Macular Diabético (EDM)[1], una complicación ocular que afecta a la visión y que aparece a consecuencia de una inflamación y acumulación de líquido en la parte central de la retina, o mácula. Un mal control metabólico, unido al sedentarismo y a la mala alimentación, contribuye a su desarrollo, aunque el principal desencadenante es el haber convivido mucho tiempo con la diabetes. La pérdida de facultades visuales, ya sea por EDM o por otra afección de los ojos, constituye la principal preocupación de los pacientes con diabetes, por encima de los problemas cardiacos y de las amputaciones. Concienciar sobre esta problemática es el objetivo de la campaña “¿Qué sabes sobre el Edema Macular Diabético?”, lanzada por la Federación Española de Diabetes (FEDE), con el apoyo de Abbvie y Roche.
Así, esta iniciativa tiene varios hitos. El primero ha sido el lanzamiento de una encuesta para conocer el grado de conocimiento de los pacientes con diabetes acerca de esta patología, así como los canales a través de los cuales se informan. De los resultados de esta encuesta se pudieron extraer algunas conclusiones interesantes. En este sentido, gran parte de los encuestados afirmó no haber recibido nunca información sobre el EMC. La mitad consideraron que España no cuenta con un sistema adecuado para el diagnóstico y la detección precoz de esta patología. En cuanto a los canales, un tercio afirmó que se informaban a través de Internet, y otro tercio destacó la labor de las revistas, artículos y talleres de las asociaciones de pacientes como un valioso recurso formativo.
El segundo hito fue un webinar, emitido bajo el título “¿Qué sabes sobre el Edema Macular Diabético”? Este encuentro online, organizado por FEDE, contó con la presencia de la oftalmóloga Patricia Udaondo, experta en la materia, quien repasó las principales causas y formas de prevención de la patología. Asimismo, quiso destacar los avances en las líneas de tratamiento, con el desarrollo de la tecnología de imágenes y los programas de screening. Recalcó que, solo en España, hay 4,8 millones de personas con pérdida de visión, un número que se prevé siga creciendo en los próximos años como consecuencia del aumento en la prevalencia de otras patologías, como la diabetes, y del envejecimiento de la población. Ante esta situación, afirmó, la prevención y la formación al paciente son más importantes que nunca. “A veces, ganar una línea de visión, aunque sea de un 5%, puede marcar la diferencia entre conducir, poder leer un periódico o poder desarrollar tareas laborales”, expresó.
La Federación Española de Diabetes (FEDE) trabaja, precisamente, para sensibilizar a la población sobre la existencia de complicaciones de la diabetes como el EDM. Juan Francisco Perán, presidente de FEDE, recalca que “aumentar la formación y sensibilización de los pacientes es algo imprescindible para mejorar sus condiciones de vida, así como reclamar a las administraciones una mayor inversión de recursos y una apuesta firme por la prevención”. Acciones como el lanzamiento del sondeo, realizado con el apoyo de las compañías Abbvie y Roche, tienen como objetivo involucrar a la comunidad para conocer su percepción acerca de su patología y del trato recibido por parte de los servicios públicos de salud.
Sobre FEDE
FEDE es la federación española de pacientes que cuenta con el mayor número de asociados en toda España. Es el órgano representativo del colectivo de personas con diabetes que, a día de hoy, padecen cerca de 6.000.000 de personas, para lo que cuenta con un total de 18 federaciones autonómicas y 123 asociaciones locales de personas con diabetes, distribuidas por todo el territorio nacional. Entre sus principales objetivos se encuentran defender los derechos de estas personas; contribuir al apoyo moral, físico y educativo del colectivo; fomentar y apoyar la educación diabetológica; promover la mejora de la asistencia sanitaria; prevenir, intervenir y detectar precozmente la diabetes, e impulsar y desarrollar el interés y el desarrollo de la investigación.