El exoesqueleto ‘Atalante X’ abre un nuevo horizonte terapéutico y de investigación de lesiones medulares por causa oncológica en menores. Para el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, “esto demuestra que las uniones, las sinergias, el compartir mejoras en salud entre fundaciones, asociaciones, industria y Sanidad pública da resultados en salud”.
Esta nueva tecnología, que ya se usa en centros avanzados de Medicina Física y Rehabilitación de Europa, se puede adaptar a las capacidades del paciente y a su grado de recuperación neurológica.
La Fundación Aladina ha donado al Hospital Nacional de Parapléjicos, centro perteneciente al SESCAM, el exoesqueleto ‘Atalante X’, una innovadora ayuda técnica, que se suma a los dispositivos tecnológicos para la rehabilitación con que cuenta el hospital.
Gracias a su configuración basada en algoritmos de movimiento dinámico, este aparato servirá para mejorar la reeducación de la marcha de jóvenes y adolescentes ingresados en el centro posibilitando una forma de caminar menos robótica y más natural, a la vez que liberar sus manos.
La presentación del ‘Atalante X’, valorado en 133.000 euros, ha contado con la presencia del consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, quien tras agradecer en nombre del Gobierno de Castilla-La Mancha a la Fundación Aladina esta maravillosa iniciativa solidaria, ha destacado que “esto demuestra que las uniones, las sinergias, el compartir mejoras en salud entre fundaciones, asociaciones, industria y Sanidad pública da resultados en salud”.
El consejero ha recordado que recientemente “celebrábamos el Día de la Lesión Medular y decíamos que lo importante era aprender a vivir de esta otra manera y esto ha sido la mejor demostración. Gracias, Carlos, gracias a su familia y gracias a Paco Arango y a la Fundación Aladina. Nosotros ponemos el conocimiento, el talento y la mano de obra con los mejores profesionales”.
Carlos Tatay, piloto de motos, que ingresó en el Hospital Nacional de Parapléjicos en el mes de julio ha realizado una prueba con el nuevo exoesqueleto.
Por su parte, el presidente de la Fundación Aladina, Paco Arango, ha expresado su “satisfacción y alegría por poder contribuir a que un niño o adolescente pueda recuperar y recordar lo que es andar y correr en un sitio tan maravilloso”.
Asimismo, Arango ha recordado que la Fundación Aladina ya donó al centro especializado en lesión medular un sistema robótico pediátrico, llamado ‘Lokomat’, que se presentó el pasado mes de junio de 2022 y está muy satisfecho al conocer de primera mano los fantásticos resultados que está ofreciendo la utilización de este sistema para mejorar la rehabilitación y la calidad de vida de niños con lesión medular ingresados en el Hospital Nacional de Parapléjicos por casusa oncológica
El exoesqueleto ‘Atalante X’ permitirá rehabilitar e investigar la lesión medular oncológica
Con el exoesqueleto donado por la Fundación Aladina se abre un nuevo horizonte terapéutico y de investigación de los problemas motores de niños y adolescentes con lesionados medulares, ya que mejora su alineamiento corporal, la destreza motora, facilitando la integración de los usuarios en su entorno.
El exoesqueleto ‘Atalante X’, que se está usando en centros avanzados de Medicina Física y Rehabilitación de Europa, se puede adaptar a las capacidades del paciente y a su grado de recuperación neurológica. Esta adaptabilidad, hace posible una prescripción más precisa de la terapia física que debe acompañar al crecimiento tan importante en las etapas de adolescencia y de transición a la vida adulta.
Por otro lado, el entrenamiento con este dispositivo robótico, facilita al sistema nervioso central la experiencia de movimiento, en forma de estimulación controlada, lo que podría modular la plasticidad de las conexiones neuronales y por tanto la recuperación neurológica y funcional. Demostrar este aspecto tan importante es la base de la tesis doctoral que está desarrollando la doctora Carolina Redondo, integrante del equipo de terapia robótica.
En el hospital de día de la Unidad de Rehabilitación Pediátrica del Hospital Nacional de Parapléjicos se realizan una media de mil procesos a un total de más de trescientos pacientes pediátricos.
