“Criticaban los chiringuitos, criticaban los sillones y de lo que se han preocupado en estos días, nada más empezar la legislatura, ha sido en asegurarse sus sillones y subirse los sueldos”, critica la responsable socialista.
Insta a Núñez Feijóo a comenzar aplicando la propuesta de García-Page exigiendo a las comunidades autónomas gobernadas por el PP que frenen el desmantelamiento de la sanidad pública y la competencia desleal en materia de impuestos.
La diputada del PSOE denuncia que es “realmente grave” la falta de respeto de los concejales de Vox en Albacete al permanecer sentados durante el minuto de silencio por las víctimas de la violencia machista.
La vicesecretaria del PSOE de Toledo y diputada nacional, Esther Padilla, ha criticado hoy que “Vox solo ha servido en 15 días para quitar derechos y subir sueldos” y, para ilustrarlo, ha denunciado que han llegado “incluso a multiplicar por 10” la cantidad percibida por el equipo de gobierno en algunos ayuntamientos donde han pactado con el PP.
“Criticaban los chiringuitos, criticaban los sillones y de lo que se han preocupado en estos días, nada más empezar la legislatura, ha sido en asegurarse sus sillones y subirse los sueldos”, ha denunciado la responsable socialista, que ha señalado que este ejemplo se refiere a Caudete (Albacete), pero ha ocurrido en todos los municipios donde han alcanzado un pacto de gobernabilidad.
Así, ha apuntado que, en otras localidades, donde Vox ha pactado con el PP, los salarios “se han duplicado o se han subido un 30 %”, lo que ha criticado, al tiempo que ha recordado que hemos oído “muchas veces” a Vox decir que “no creen en las autonomías y para no creer en las autonomías se están aprovechando de ellas”.
“Se aprovechan de ellas, pero siempre con el permiso del PP”, ha dicho la diputada socialista, pues ha recordado que “esto no lo podrían hacer si el PP no les hubiera abierto la puerta”.
En este sentido, ha afirmado que “no estaban obligados a abrírsela” porque podían haber aceptado su propia propuesta de dejar gobernar a la lista más votada, tal y como apuntó el PSOE, pero no quisieron.
“Les ofrecimos ese acuerdo, que inicialmente había planteado el propio PP y el señor Feijóo de dejar gobernar la lista más votada, lo tenían en su mano y, sin embargo, el PP no ha elegido a Vox como una obligación, sino que ha demostrado que es su preferencia”, ha reflexionado.
Pacto nacional de financiación sanitaria
Por otra parte, Padilla se ha referido a las palabras del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, sobre que comparte la propuesta del presidente regional, Emiliano García-Page, de poner en marcha un pacto nacional de financiación sanitaria.
La parlamentaria socialista ha manifestado su deseo de que Núñez Feijóo “cumpla su palabra como el líder de la oposición que será en la próxima legislatura”, si bien ha apuntado que ya puede comenzar a aplicar esta propuesta en las comunidades donde gobierna su partido.
“Si Feijóo coge el guante, que empiece ya. Que les diga a sus comunidades autónomas, donde gobierna, que paren de desmantelar la sanidad pública”, ha afirmado Padilla, al tiempo que le ha instado a pedir a estas regiones que frenen la competencia desleal en materia de impuestos que “lo que está provocando es evitar que haya recursos suficientes para financiar la sanidad pública”.
Así, ha resumido que “estamos deseando que también nos diga que recoge el guante y que, desde mañana, a las comunidades gobernadas por el PP, Feijóo las pone a raya para apostar de verdad por la sanidad pública”.
Minuto de silencio por las víctimas de la violencia machista
Por otra parte, Padilla ha denunciado que es “realmente grave” la falta de respeto de los concejales de Vox en Albacete al permanecer sentados durante el minuto de silencio por las víctimas de la violencia machista.
“Era un minuto de silencio por víctimas, por mujeres que han sido asesinadas a manos de sus parejas y los señores de Vox se quedaron sentados. Y esto es muy significativo”, ha subrayado y, con ello, también se ha referido a la retirada de banderas LGTB y ha dicho que supone, más allá de quitarlas, “advertirle a la ciudadanía que sus derechos los ponen en cuestión y que ya no van a estar tan protegidos como antes de que ellos entraran en los gobiernos”.
