La provincia de Toledo es la que más siniestros registró durante 2022, al tener lugar en sus carreteras 78 accidentes, seguida de Ciudad Real con 50 y Cuenca con 42. En la provincia de Guadalajara es donde se produjo un menor número de accidentes, con 30.
La salida de vía del vehículo sigue siendo la principal causa de los accidentes de tráfico graves ocurridos en la región, con más de un 30 por ciento del total.
El Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 1-1-2 de Castilla-La Mancha, organismo perteneciente a la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas, ha coordinado la ayuda de los grupos de intervención en emergencias en los 234 accidentes de tráfico graves que se contabilizaron durante el pasado año en la Comunidad Autónoma, en los que fallecieron un total de 84 personas en el lugar del suceso.
Estas cifras reflejan el incremento en el número de accidentes de tráfico graves ocurridos el pasado año, frente a 214 en 2021. Por tanto, en 2022 se produjeron 20 incidentes más.
Sin embargo, la mortalidad se ha reducido y el pasado ejercicio hubo cinco fallecidos menos que el año previo. En concreto, en 2022 fallecieron 84 personas a consecuencia de los accidentes de tráfico, mientras que en 2021 se alcanzaba la cifra de 89 víctimas mortales.
Durante 2022, desde el Servicio 1-1-2 se atendió una media mensual de 19 accidentes de tráfico graves. Un dato destacable es que una parte muy importante de estos incidentes, más de un 30 por ciento, se produjo por la salida de vía del vehículo, sin que interviniese ningún otro coche como causante del siniestro. Esto quiere decir que uno de cada tres accidentes de tráfico que se produjeron en la región el año pasado fue por una salida de vía.
Por provincias, Toledo fue donde hubo un mayor número de incidentes, contabilizando un total de 78 accidentes de tráfico graves, lo que representa algo más del 33 por ciento del total de toda la región.
Ciudad Real y Cuenca se sitúan a continuación con 50 y 42 incidentes, respectivamente. En las carreteras de la provincia de Albacete se contabilizaron 34 accidentes, mientras que la zona de Guadalajara, con 30, es donde hubo menos siniestros.
Época estival, más accidentes
Además, los meses de agosto y mayo fueron los que más accidentes contabilizaron, con 28 y 25 respectivamente.
De hecho, la época estival fue la temporada con un mayor número de accidentes de tráfico graves. Casi el 40 por ciento de los incidentes se acumulan en el periodo que va desde junio a septiembre. Así, en junio hubo 21 accidentes graves, 20 en julio, los ya señalados 28 en agosto y 23 en el mes de septiembre.
Por el contario, en los periodos de principio y final de año bajaba la siniestralidad en las carreteras de Castilla-La Mancha. De hecho, febrero y octubre, con 12 incidentes en ambos casos, son los meses con menor cifra del año.
Coordinación de recursos desde el 1-1-2
Los accidentes de tráfico son los incidentes, atendidos por el Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 1-1-2 de Castilla-La Mancha, en los que es necesaria la intervención de un mayor número de recursos.
Así, desde la Sala del 1-1-2 se movilizan y se coordina la labor que realizan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, normalmente efectivos de la Guardia Civil; y los servicios sanitarios, que despliegan la mayor parte de sus recursos como médicos de urgencias, ambulancias, UVI y los helicópteros medicalizados, fundamentales para el traslado urgente de heridos graves.
Los bomberos son también una parte importante en este tipo de siniestros, dado que, en ocasiones, las personas afectadas quedan atrapadas en el interior de los vehículos, siendo necesaria su excarcelación.
