Los niños con discapacidades físicas o cognitivas son como otros niños en cuanto a que les encanta jugar, aunque sus enfoques ante la diversión resultan significativamente diferentes. Encontrar los regalos adecuados para los niños que presentan alguna discapacidad puede tomar un tiempo, pero sin lugar a dudas terminaremos acertando. Para ello, al elegir los juguetes para estos niños, no debemos hacer otra cosa que pensar en lo que quieren, lo que piden o lo que necesitan. Pero ante la duda que puede desconcertarnos les aconsejo siempre que no duden en preguntar a los expertos ya que siempre vamos a intentar orientarles de la mejor forma posible y por supuesto, nadie conoce mejor las necesidades y los gustos de un niño que sus padres, pero en el caso de niños con autismo va más allá porque estos juguetes serán, casi con total seguridad, sus herramientas de trabajo.
Igualmente, es importante tener en cuenta que no todos los niños desarrollan sus capacidades de la misma forma, especialmente cuando existen alteraciones como el trastorno del espectro autista (TEA) o el déficit de atención e hiperactividad (TDAH). Por ejemplo, los niños con TEA muestran durante su actividad lúdica las deficiencias comunicativas y sociales que acompañan a su trastorno particular. También se denota en el juego sus patrones de conductas repetitivas o restrictivas. Para que exista un juego funcional y simbólico, el niño debe tener capacidad de imitación y entender las representaciones de objetos y situaciones reales y las claves sociales implícitas, pero no siempre es así.
Pero al hablar de escoger el juguete adecuado os invito a reflexionar qué es lo que pretendemos conseguir con ese juguete, es decir: “¿pretendemos que el niño se divierta con él y que pase un rato entretenido con el mismo o por el contrario queremos potenciar algunas habilidades utilizando el juguete/juego como recurso?”. Y aunque básicamente la finalidad nos da la pista, lo ideal es combinar ambos tipos de juego, pero prestando atención a la edad, el lenguaje y capacidad intelectual del niño.
A pesar de que cada caso en estos niños tienes sus distintas peculiaridades, considero que generalmente los juegos orientados a roles o de aspecto social no suelen ser del agrado de estos niños, pero podemos fomentar que los toleren a través de actividades más sencillas que, además, impliquen mímica o gestos, si además logramos combinar estas actividades con juguetes que permitan movimientos circulares, melodías, texturas u olores, seguramente habremos conseguido opciones de juego muy interesantes, dado que en general estos niños son especialmente sensoriales. . Esto se consigue con juegos donde entiendan los conceptos de causa y efecto, o aquellos que les proporcionan distintos estímulos.
En este sentido, Para trabajar las emociones podemos apoyarnos en tarjetas, peluches o juegos como el ‘¿Quién es quién?’ con personajes que muestren diferentes emocionales faciales. Pero también tenemos otras opciones para trabajar este aspecto como podrían ser un rompecabezas en 3D para representar diferentes estados anímicos o este juego de cápsulas con caritas emocionales.
Para la estimulación visual sirven juguetes como caleidoscopios, juegos con burbujas, molinetes o juegos que tengan borlas. De otro modo, la estimulación propioceptiva se consigue con juegos como hamacas, combas, aros o columpios. También los toboganes o balancines proporcionan a los niños con TEA estimulación del sistema vestibular.
Por otro lado, para la estimulación táctil resultan perfectos juegos como la arcilla de moldeado o la pintura de dedos. La pasta para moldear, al igual que los juegos con burbujas, se elabora con material perfumado y aportan además sensaciones olfativas. Es importante tener en cuenta que los juguetes se enfrentan a menudo a más de un sentido. Los bloques de construcción, entre otros juegos, pueden apelar a los sentidos visuales, auditivos y táctiles. También recomiendo que estén atentos a los volúmenes, texturas, sabores, etc. ya que los niños con TEA pueden ser hipersensibles o hiposensibles, lo que implica que puede molestarles desde un volumen alto de un camión o un instrumento musical hasta la textura suave del cuero de un balón de fútbol o la viscosidad del socorrido “Blandiblu”. Si deciden regalarle algo que haga ruido, comprueben también que tiene diferentes niveles y que se puede apagar. En cambió si el regalo es algo práctico como puede ser la ropa hay que estar seguros de cómo le gusta: normal, muy ajustada, muy amplia, de algodón, de algún color concreto, etc.
En el caso de niños más mayores, pueden llegar a destacar en aspectos visoespaciales y visoconstructivos, por lo que la especialista aconseja apostar por actividades como puzles o legos, los vasos apilables o un rompecabezas promueven sus habilidades motrices finas. Los niños se benefician de las actividades que son naturalmente favorables para el desarrollo de nuevas técnicas. La regla que te asegura el éxito con el entrenamiento de la motricidad consiste en que los regalos para niños autistas resulten objetos muy motivadores.
En cuanto al desarrollo de sus habilidades sociales, los juegos de mesa son ideales como regalos para niños autistas. La naturaleza de estos juegos hace que sean conducentes a la comunicación e interacción mutua. El niño debe hacer referencia a otros jugadores y seguir adecuadamente las reglas con el fin de ganar una partida. Cuando el niño es consciente de la relación entre causa y efecto, establece un puente a la comunicación y la reciprocidad social. Además, este tipo de juegos fomentan la memoria visual, memorización y aprenden a clasificar objetos de naturaleza similar.
Si hablamos de tecnologías se puede elegir entre la amplia variedad de videojuegos que el mercado ofrece, siempre en función del nivel madurativo del niño, sus gustos e intereses y, como he hablado, la competencia que se quiere reforzar. Es importante señalar que aquellos niños con autismo que presentan un daño cerebral suelen interpretar mejor las señales visuales que las verbales, por lo que se ven beneficiados del uso de los dispositivos tecnológicos, que les permiten recibir un feedback visual y auditivo inmediato sobre su respuesta en el juego.
El éxito en el juego es un gran motivador, y los niños que tienen la oportunidad de participar en actividades que trabajan con sus puntos fuertes son más propensos a disfrutar de la tarea.
Recordad que si tenéis alguna duda al respecto podéis poneros en contacto conmigo en el Gabinete Psicopedagógico que se encuentra en Toledo en el que tenemos servicio de atención temprana en el que trabajamos con niños con diferentes necesidades cognitivas para poder mejorar su día a día, o bien, al correo psicopedagogiainfantiltoledo@gmail.com.
Eva Sonseca,
licenciada en Psicopedagogía y Directora pedagógica del Equipo Multidisciplinar ‘Talento-Inclúyete’