La Asociación Al-Kasar ha presentado el Cartel y programación de las fiestas de Moros y Cristianos, declaradas de Interés Regional y que se celebrarán del 24 al 26 de junio, después de dos años en los que no se han podido celebrar.
La alcaldesa, Rosa Melchor, asistía al acto de presentación de estas fiestas que ya son las fiestas de todo el pueblo, con el cartel que vuelve a ser del pintor Salva Samper.
Este año, el programa cuenta con muchas actividades, entre ellas, espectáculos muy vistosos de estas fiestas.
El encargado de la presentación de las actividades programadas para este año fue el presidente de la Asociación de Moros y Cristianos, José Luís Carneros, quien manifestaba que este año en el que “nos vamos a reencontrar, vamos a tener las fiestas que nos merecemos, llenas de vida y alegría después de dos años muy difíciles”.
Desde el pasado 1 de junio, en los colegios se están realizando talleres educativos en los que más de 600 niños están participando con la idea de que la fiesta de moros y cristianos vaya calando entre los escolares. Estos mismos serán protagonistas del desfile infantil que veremos el viernes 24.
El Mercado medieval en el parque Alces, el pregón en el Museo municipal a cargo de Sara Mota Quiralte, majestuosos desfiles, batalla de flechas, actuaciones musicales y mascletá; todo preparado para que el fin de semana del 24 al 26 de junio, esta fiesta, declarada de Interés Turístico Regional, nos haga disfrutar de su belleza, El Torreón está ya engalanado con las banderas que recuerdan la celebración de estas populares fiestas.
Con la invitación por parte del presidente a que toda la ciudad participe, la alcaldesa intervenía poniendo el acento en las peculiaridades que nos hacen diferentes. Hay cosas que no hace falta entenderlas, es suficiente con sentirlas, aseguraba la alcaldesa y así son las fiestas de Moros y Cristianos en Alcázar. La alcaldesa terminaba recordando que “ya no son las fiestas del barrio de Santa María”, donde nacieron, y agradecía como máxima representante de los alcazareños, el regalo que le hicieron a la ciudad.
