En la tarde de ayer, el Teatro Municipal Quijano acogía la presentación del magno pregón de Semana Santa que ha estado a cargo de Julián Sánchez, sacerdote salesiano y actual párroco de la iglesia de María Auxiliadora de los Salesianos de Puertollano y exdirector del Colegio Hermano Gárate de Ciudad Real.
Un evento organizado por la Asociación de Cofradías, presidida por Yolanda Gómez, y que ha contado con la presencia de la alcaldesa de Ciudad Real, Eva María Masías, una nutrida representación de la Corporación Municipal, la delegada de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en Ciudad Real, Carmen Teresa Olmedo, la vicepresidenta de la Diputación Provincial, María Jesús Villaverde, el consiliario de la Asociación de Cofradías, Rafael Melgar, diputados nacionales, regionales y destacados representantes del mundo político, social, religioso y militar.
Julián Sánchez fue invitado en el año 2020 a ser el pregonero de la Semana Santa, pero la pandemia ha obligado a que sea en 2022 cuando ha tenido el honor de proclamar y exaltar una Fiesta Declarada de Interés Turístico Nacional y con gran raigambre entre los ciudadanos. El acto solemne arrancaba con el ánimo de Sánchez Mora a los cofrades “son días de pasión y de gloria” y una oración, a cargo del consiliario, para pedir la paz en el mundo en momentos convulsos por culpa de la guerra iniciada por Rusia contra Ucrania.
La alcaldesa de Ciudad Real, mostraba su orgullo como primera edil y como concejala delegada directa de esta Fiesta Declarada de Interés Turístico Nacional. “Es una enorme satisfacción poder volver a anunciar la tradición, la cultura y el fervor de nuestras raíces de la mano de Julián”. Añadía Masías que “es un privilegio recuperar las inquietudes para volver a salir a la calle, con la misma ilusión y disfrutando de nuestra cultura, nuestra tradición y costumbres, así como del arte, que lo viviremos desde el fervor religioso y también aquellos que no tienen esas mismas creencias podrán ver en la calle el patrimonio de esa imaginería tan extraordinaria que tenemos”.
La presidenta de la Asociación de Cofradías, Yolanda Gómez, se mostraba igualmente ilusionada por “volver a disfrutar de las hermandades en la calle, que nos hagan volver a la normalidad anterior a la pandemia”. Por otra parte la delegada de la Junta de Comunidades incidía en el deseo de que “después de tres años se pueda volver a salir a la calle, para hacer esa demostración, no solamente de religiosidad, sino de recogimiento y de tradición”.
El encargado de presentar al pregonero ha sido el hermano Mayor de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Javier Sánchez-Abarca, que definía a Julián Sánchez como un amigo “un hombre de fe que ha puesto su vida al servicio de Dios y que siempre ha facilitado su ayuda y sus consejos a los demás”.
El pregonero ha hecho un recorrido prolífico y pormenorizado desde la visión de su fe de cada uno de los pasos de las hermandades y cofradías de la capital, a través de la pasión, la muerte y la resurrección de una Semana Santa “de cera derretida y rosas blancas con el frescor de abril, donde el aire se viste de luto con encajes de velos azabaches y se adorna con luceros de plata”. Mostraba su satisfacción Julián Sánchez, porque “con en este nombramiento inmerecido me habéis dado el honor más grande que podíais otorgarme, en esta tierra forjada de ideales, de nobleza e hidalguía, tierra de viñedos que chorrea vinos tintos de verdes cepas y aceite de olivos centenarios. Una Ciudad Real cofrade y de procesiones de la que los ciudadrealeños y ciudadrealeñas tienen que sentirse muy orgullosos”. A lo largo de todo el acto ha habido varias interpretaciones de marchas procesionales a cargo de la Banda de Música Agrupación Musical de Ciudad Real.
