Desde la Atención Primaria, hasta las especialidades, pruebas diagnósticas o urgencias, entre otros servicios que se encuentran colapsados por la falta de inversión desde hace años por parte de la JCCM
Izquierda Unida ha venido a denunciar que desde el gobierno de María Dolores de Cospedal (PP), hasta la actualidad con Emiliano García-Page (PSOE), la degradación del sistema público de salud en Castilla-La Mancha, y por ende en la provincia de Toledo, ha sido una constante que se ha visto comprobado con la paulatina reducción y adaptación de los medios técnicos y del personal, lo que ha venido a empeorar la calidad sanitaria asistencial en la actualidad.
Señalan en Izquierda Unida, que las situaciones de colapso que se están dando en diferentes aspectos sanitarios de la provincia, son el resultado de la adaptación en el tiempo de la conceptualización que tanto el PP como el PSOE han venido programando para Castilla-La Mancha. Una conceptualización que reduce la inversión y los medios disponibles, que en ningún caso beneficia a los pacientes y usuarios del servicio sanitario público; que como mucho, explican en Izquierda Unida, lo hace al sector privado de salud, que ve incrementado la demanda por parte de aquellos ciudadanos que pueden permitirse un seguro médico, o a través de derivaciones hacia la sanidad privada con la oferta que esta presta en sus centros a la Consejería de Sanidad.
“El factor de favor a la sanidad privada a costa de dinero público en nuestra región, es una constante y realidad; no solo porque se utiliza esta como muleta de las carencias que han provocado PP y PSOE en la pública para mejorar los ingresos empresariales de la primera, sino porque se asienta un eje principal en torno al negocio privado, frente al derecho básico de salud”, ha manifestado el Diputado Provincial de Unidas Izquierda Unida Podemos en la Diputación de Toledo, Mario García.
Unas declaraciones que según explicaba García, tienen su máximo exponente en la puesta en marcha del nuevo hospital de Toledo, el cual se construyó con inversión privada para ofrecer una serie de servicios mercantiles en torno a las diferentes demandas que la actividad hospitalaria pudiera generar.
Colapso y caos en la sanidad pública en la provincia de Toledo
Y es que, Izquierda Unida califica como infames la multitud de situaciones que se están originando en el servicio público de salud, por diferentes cuestiones. Unas situaciones que están escenificándose con mayor evidencia por las consecuencias de la pandemia.
Mario García: “Centros de salud y consultorios con falta de personal sanitario y administrativo, incapaces de dar servicio a toda la demanda de pacientes y usuarios, con los consecuentes perjuicios, no solo a estos, sino a médicos, enfermeros y demás trabajadores por la tremenda carga de trabajo y estrés. Citas médicas para especialidades que se alargan por meses, incluso por años. Pruebas diagnósticas que, si tienen fechas superiores a un año, es una buena noticia, porque cuando no; carecen de fecha porque las listas de citas están cerradas. Las urgencias del nuevo hospital que siguen con la misma tónica de saturación y de desorden por el modelo de gestión y de organización impuesto por la Consejería de Sanidad. Un despropósito y un abandono a la ciudadanía de la provincia de Toledo, inmerecido y vergonzoso”.
En conclusión, confirman en Izquierda Unida; el gobierno de Emiliano García-Page ha venido parcheando el desbarajuste que organizó María Dolores de Cospedal en la sanidad pública, continuando y asentando una prestación insuficiente y deteriorada que no ha sabido adaptarse a la nueva realidad social y poblacional, en especial en alguna comarca de la provincia de Toledo, como es el caso de La Sagra, que mejoría y cumpliría mucho mejor con la prestación sanitaria con la puesta en marcha de un hospital comarcal, el cual ofrecería servicio a más de 120.000 habitantes.
“De poco sirve el `mayor hospital de Europa´, si no se da cobertura inmediata de profesionales sanitarios a este, más que para que sirva de magnifico fondo de escenario de la triste realidad de la sanidad en nuestra provincia”, “Lo mismo pasa con la previsión y coordinación de la formación sanitaria médica, que debería ser revisada para prever las necesidades de la sanidad pública a medio y largo plazo, sin tener que recurrir al `salvavidas´ de la sanidad privada”, concluía Mario García.
