Participaron unas cien personas de todas las edades que recorrieron 3,5 kilómetros en unos veinte minutos, en un ambiente festivo y donde todos acabaron teñidos con las diferentes tonalidades que esparcieron por las calles de Fuentenovilla, en un gran espectáculo de color y de música.
La II “Carrera de Colores de Fuentenovilla” es una de las novedades que organiza el Ayuntamiento de Fuentenovilla 8guadalajara) para dinamizar el ocio de los numerosos vecinos que pasan la temporada veraniega en la villa alcarreña. En esta original carrera sin límite de tiempo, lo importante no es correr, sino pasarlo a lo grande. Aquí todos son bien recibidos, rápidos o lentos, mayores o pequeños, el único requisito es portar una camiseta de un blanco luminoso.
Poco antes de las ocho de la tarde del pasado sábado, 20 de julio, llegaron los participantes para recoger las camisetas, los dorsales y los polvos de colores proporcionados por la empresa Espectáculos Mota, que se encargó un año más de que todo funcionara a la perfección.
Alrededor de cien personas, de toda edad y condición, esperaban con alegría y bailando, el comienzo de esta divertida fiesta, acompañados por la música de la discoteca-móvil que pinchaba las canciones más exitosas de anteriores veranos.
Antes de la salida, se iniciaba una cuenta atrás que culminó con una gran explosión festiva, donde los fuentenovilleros esparcieron al aire los polvos de diferentes tonalidades que inundaron de color la plaza, eso sí, apoyados por el personal del espectáculo que con extintores descargaron sobre los presentes infinitas gamas y matices que redondearon el singular lanzamiento.
Todos los participantes acabaron manchando totalmente las inmaculadas camisetas blancas que había proporcionado la organización, transformándolas en aparentes obras de arte moderno. Posteriormente, completamente embadurnados de pies a cabeza con multitud de colores, se dirigieron al arco de salida y comenzaron la marcha de tres kilómetros y medio por las calles y campo del municipio.
Durante la carrera, que duró unos veinte minutos, los participantes recibieron nuevas lluvias de colores en diversos puntos del recorrido, además de las que se echaban unos a otros, en lo que parecía una competición por ver quien manchaba más su camiseta, donde el color original apenas ya se apreciaba. El trayecto resultó todo un espectáculo que contagió de buen humor a corredores y curiosos.
Al regreso de los participantes a la plaza, nueva salva de polvos de colores y nueva cuenta atrás para iniciar dos horas de discoteca móvil como fin de fiesta, que culminaron la jovial y entretenida tarde veraniega, donde los fuentenovilleros pasaron un rato agradable y deportivo, pleno de música y diversión. Fue todo un éxito de participación y público, en el que la organización ha contado con la empresa Espectáculos Motas.
