Con la ayuda de investigadores de la Universidad de Castilla-La Mancha y la Universidad Carlos III de Madrid, el gobierno local del Ayuntamiento pondrá en marcha un modelo de decisión pública que emplea el sorteo como eje vertebrador del proceso de asignación de fondos de los presupuestos participativos, dando así cumplimiento a uno de los compromisos del gobierno local para esta legislatura.
El modelo, basado en un sistema aleatorio, consiste en la elección de un número de vecinos que, en sesiones “plenarias” debidamente reglamentadas, diseñan y deciden sobre distintas propuestas cuya ejecución queda consignada al Gobierno local y que ya en el presupuesto para el año en curso, para el año 2018, quedó fijada en la partida presupuestaria correspondiente con un importe de 30.000 €.
El sorteo, concebido en la democracia clásica ateniense como la forma más adecuada de elegir a algunos cargos públicos, garantiza la igualdad de oportunidades de todos los vecinos y vecinas a la hora de participar en la gestión de los asuntos comunes. Se trata, según los investigadores de un modelo de democracia participativa que al utilizar el sorteo evita los tradicionales sesgos existentes en los diversos procedimientos de selección de cargos.
Los ciudadanos se incorporan a la decisión pública al seleccionar, con igualdad de oportunidades, a los vecinos que formarán parte del Pleno Vecinal, los cuales verán correspondidas sus tareas de Gobierno vecinal con vales de compra para el comercio de Herencia. Un órgano deliberativo que supera los problemas más importantes con que se encontraban los ayuntamientos a la hora de poner en marcha los presupuestos participativos, especialmente aquéllos relacionados con la representatividad y participación interna de los colectivos más implicados en el desarrollo de los mismos.
