Los ediles de la formación naranja recuerdan que es una práctica prohibida por la ‘Ordenanza reguladora de la venta, publicidad, distribución y consumo no responsable de bebidas alcohólicas’, que puede conllevar multas de entre 300 y 1.500 euros
Los ediles del grupo municipal Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de Cuenca han instado al Alcalde de la ciudad, Ángel Mariscal, a intensificar la inspección municipal con el fin de controlar la venta de alcohol en comercios a partir de las diez de la noche, una práctica prohibida por la ‘Ordenanza reguladora de la venta, publicidad, distribución y consumo no responsable de bebidas alcohólicas’.
María Jesús Amores, portavoz de la formación naranja, ha recordado que “son la Policía Municipal, los servicios técnicos municipales competentes (Inspección Sanitaria Municipal) y, en su caso, el personal delegado, quienes están facultados para investigar, inspeccionar y controlar todo tipo de locales e instalaciones a efectos de verificar el cumplimiento de las limitaciones y prohibiciones recogidas en la ordenanza”.
Además, Amores ha considerado que el actual equipo de Gobierno “está haciendo la vista gorda y eludiendo responsabilidades en este tema”, tal y como le han transmitido hosteleros de la capital, que tildan la práctica de estos 
comercios de “competencia desleal”.
Los ediles de Cs han subrayado que, vinculada a la venta de alcohol en horario nocturno, se da otra práctica como es la del consumo en la vía pública, “algo prohibido de forma generalizada en toda España y que puede generar problemas de orden público y suciedad”.
Por otro lado, la portavoz de Cs ha considerado necesario controlar la promoción del consumo con ofertas especiales o herramientas de ‘marketing’ como el 2×1, así como los concursos de bebidas alcohólicas y degustaciones gratuitas, “también prohibidos expresamente por la ordenanza municipal”.
Desde el grupo municipal Ciudadanos recuerdan que la normativa municipal considera infracciones graves tanto la promoción del consumo de bebidas alcohólicas como su venta en comercios a partir de las diez de la noche, castigándolas con multas de entre 300 y 1.500 euros
