Si no se cambia la forma de pensar acerca de Talavera no cambiarán las formas de actuar sobre la ciudad
FEDETO ya lo advirtió: Talavera de la Reina (Toledo) podría no obtener el programa EDUSI. Y es que, según la Federación Empresarial de la provincia de Toledo, la ciudad no tendría que concursar para la obtención de fondos europeos basados en el programa denominado Estrategias de Desarrollo Urbano, Sostenible e Integrado EDUSI).
Estos planes tienen por objeto la mejora de las condiciones sociales, económicas y ambientales de un área urbana, especialmente en ciudades donde se concentran problemas como el desempleo y la pobreza.
La pregunta que debemos hacernos es si la cuarta ciudad de más de 50.000 habitantes con más paro de España y de Europa, que ha perdido más del 15% de su tejido empresarial y más de 5.000 habitantes, en los últimos cinco años y cuya renta per cápita ha descendido tanto que la sitúa a 10.000€ de ciudades similares, tiene que presentarse a un concurso compitiendo con ciudades que no tienen ese tipo de lastres sociales y económicos.
FEDETO ha propuesto que Talavera de la Reina sea tratada bajo el principio de discriminación positiva y que bajo el presupuesto del apoyo de las cuatro administraciones públicas se haga posible que la ciudad no tenga que competir con el resto de ciudades, como si de un “concurso de redacción” de tratase, cuando es evidente que el resto de ciudades no tienen las mismas circunstancias adversas.
Pero se sigue, tercamente, queriendo aplicar a Talavera el principio jurídico de Concurrencia Competitiva basado en que todas las ciudades concurran en igualdad de condiciones, méritos y posibilidades.
Y el principio de discriminación positiva ha de decaer frente a otro principio, también jurídico, el de Discriminación Positiva, basado en el artículo 14 de la Constitución, del que se desprende que todos somos iguales ante la Ley, pero que el Tribunal Constitucional interpreta diciendo que eso significa que hay que <<tratar de forma igual a iguales y de modo desigual a los desiguales>>. Y Talavera, por sus graves circunstancias económicas y sociales ha de ser tratada de forma desigual al resto de ciudades del territorio español pues la crisis se ha cebado con ella hasta alcanzar hitos críticos de desempleo y desplome económico.
Nos preguntamos si es tan difícil entender esto por parte de quienes tienen que adoptar las necesarias soluciones que precisa Talavera.
Si las cuatro administraciones públicas con competencias sobre la ciudad, a saber, Ayuntamiento, Diputación, JCCM y Estado apoyaran un programa EDUSI específico para Talavera es muy probable que la Comisión Europea lo aprobase sin necesidad de que la ciudad tuviera que concursar con otras.
Porque este tipo de programas de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (EDUSI) se basan en hacer concursar diferentes documentos de distintas ciudades, en los que se especifican documentos, concretos y sistemáticos, que se elaboran por la ciudad para planificar y dirigir las actuaciones previstas a largo plazo. Define prioridades y debe integrar diferentes aspectos, entre otros: aspectos económicas, sociales, urbanísticas físicas, ambientales… Y todo ello, con el objeto de poder acceder a las convocatorias de financiación a través de Fondos Europeos, siempre que responda a los Objetivos Temáticos seleccionados del FEDER.
Dentro de esos objetivos temáticos a Talavera le interesarían los que tienen que ver con la promoción la inclusión social y la lucha contra la pobreza, por las circunstancias socio-económicas que hemos puesto de manifiesto anteriormente, y mejorar el acceso, el uso y la calidad de las tecnologías de la información y la comunicación, porque, como es sabido, ni sus polígonos tienen todavía fibra óptica.
No se comprende, entonces, que Talavera, habiendo identificado sus problemas y necesidades en estas materias, y habiendo definido entre todos, agentes sociales y ciudadanía en general, así como las propias administraciones públicas, los resultados que son necesarios alcanzar, participe en un concurso con otras ciudades y no resulte elegida.
Todos los que digan que quieren cambiar Talavera deben cambiar el modo de pensar acerca de Talavera, porque sólo cambiando su modo de pensar cambiarán su modo de actuar por Talavera. Y en relación al EDUSI la forma de pensar todavía no ha cambiado y eso que Talavera, hoy, no se pude permitir el lujo de concursar en igualdad de condiciones a otras ciudades y tiene derecho y legitimidad para tener un plan específico EDUSI hecho a medida. Sus circunstancias así lo exigen y lo demandan.