Mariscal: “la ciudad de Cuenca, los conquenses, debían y han realizado el homenaje que correspondía a un artista como él, Hijo Predilecto por acuerdo plenario, a lo que hoy sumamos este bello rincón de una ciudad que fue su inspiración”.
Víctor de la Vega, pintor, muralista, ilustrador y grabador conquense, cuenta desde ayer con un mirador que lleva su nombre. Ubicado en la Ronda de Julián Romero, este bello enclave de la ciudad luce ya una placa de cerámica adornada con dos pinceles, en la que se puede leer: Mirador del pintor Víctor de la Vega ‘Artista del pincel que elevó la historia de Cuenca a los murales eternos’.
Tras unas palabras de reconocimiento de Miguel Romero, Cronista Oficial de Cuenca, en las que recordó además de su trayectoria profesional el que el Pleno lo nombrara por unanimidad Hijo Predilecto de Cuenca, tuvo lugar el descubrimiento de la placa, de la mano de Ángel Mariscal, alcalde de Cuenca, y uno de los hijos del pintor.
Precisamente los familiares quisieron agradecer al Ayuntamiento este “sentido homenaje”, la asistencia de todos los allí presentes, así como la elección del lugar porque “le hubiera gustado mucho” y tanto “mis padres como mi hermano estarían muy orgullosos de esta placa”, añadieron con palabras de emoción y entre los aplausos del público dos de sus hijos.
Mismo agradecimiento expresó el primer edil a todos los representantes institucionales, miembros de la RACAL de la que fue director, compañeros de Corporación Municipal, familiares y amigos, y al Cronista Oficial por “dar lectura a los acuerdos municipales nombrando Hijo Predilecto de la Ciudad de Cuenca y el nombramiento del Mirador a Víctor de la Vega, Artista que podríamos bautizar con el sobrenombre del “Pintor de Cámara de la Ciudad de Cuenca”.
Así, continuó, “la pérdida de Víctor de la Vega, nos dejó huérfanos de uno de los grandes maestros de la pintura que ha dado nuestra ciudad, artista y profesor de dilatada y reconocida trayectoria, cuya obras, retablos y murales, constituyen la Crónica Pictórica de nuestra Historia, nuestros Personajes, nuestros Paisajes y la figura por excelencia de San Julián”.
Según palabras de Mariscal, “la ciudad de Cuenca, los conquenses, debían y han realizado el homenaje que correspondía a un artista como él, Hijo Predilecto por acuerdo plenario, a lo que hoy sumamos este bello rincón de una ciudad que fue su inspiración”. Homenaje que sigue a los ya realizados con anterioridad por la institución local, como ese acuerdo plenario para nombrarle Hijo Predilecto, un reconocimiento en la Feria y Fiestas de San Julián, y el contar con parte de su mural, precisamente en la que él aparece autorretratado, para ilustrar la portada de la primera revista de Cuenca.
Finalmente, ha apuntado a que “este Equipo de Gobierno está muy comprometido en reconocer a la gente que es de aquí, a los artistas”. Por eso, ha manifestado,” el XXA en cierta medida supuso eso, este año estamos también con Torner, el próximo Tomás Mercedes y no ha ningún problema en al siguiente incidir en lo que ha supuesto Víctor de la Vega porque es más que merecida esta placa, esta plaza y este mirador”.
Sentidas palabras las que pronunció también Benjamín Prieto, presidente de la Diputación Provincial, quien destacó tanto lo buena persona que era Víctor de la Vega como la gran importancia de su legado artístico. En este sentido se refirió al mural que el pintor tiene en el Palacio Provincial porque, señaló, “nos dejó una gran lección de historia, una gran lección de arte, y que hoy, cualquier ciudadano que pasa por la Diputación ya sabe quién es Víctor de la Vega, pero también sabe mucho más de la historia de la provincia de Cuenca”.
Por su parte, la directora provincial de Educación, Cultura y Deporte, Yolanda Rozalén, enfatizó la faceta de Víctor de la Vega como docente y manifestó que, con este homenaje, “nuestros estudiantes cuando suban al Casco Antiguo pueden tener también un recuerdo muy especial y un interés en la conmemoración de esta placa”.
