El presidente, Benjamín Prieto, y el director de la RACAL, Miguel Jiménez Monteserín, han rubricado este lunes un convenio con el fin de editar una serie de publicaciones de la Academia, contribuyendo, de esta manera, a fomentar la actividad cultural de la provincia y poniendo en valor sus contribuciones a nuestra historia
Diputación Provincial de Cuenca ha estrechado más aún, si cabe, sus lazos de unión y colaboración con la Real Academia Conquense de Artes y Letras (Racal) consciente de su importante labor de investigación y difusión cultural en relación a la provincia.
Y lo ha materializado en un convenio de colaboración, rubricado este lunes por Benjamín Prieto, presidente de la Diputación de Cuenca, y Miguel Jiménez Monteserín, director de la RACAL, por el que la institución provincial editará diversas publicaciones de la Academia, que vengan a enriquecer un mejor conocimiento de la historia y la cultura conquense.
Prieto ha remarcado la relevancia de este acuerdo, que se suma, por cierto, a la colaboración económica ya existente, puesto que contribuye a fomentar la actividad cultural de la provincia, poniendo, además, en valor sus aportaciones a nuestra historia. Y es que es de la opinión de que toda colaboración con este colectivo es poca, ya que “el trabajo constante de estos académicos permite un mejor conocimiento de nuestro pasado y presente, además de poner en valor nuestro patrimonio y nuestros recursos”.
Por tal motivo, la Diputación ha apostado por poner su granito de arena para que estos conocimientos y aportaciones no queden en el olvido y puedan preservarse para generaciones futuras en sus correspondientes publicaciones. Es por ello que Prieto ha manifestado su deseo de que este convenio sea fructífero, porque, a su juicio, “será fructífero para la sociedad conquense, en general”.
El director de LA RACAL, por su parte, no ha dudado en mostrar su satisfacción por la rúbrica de este convenio, a la vez que ha querido agradecer el firme y constante apoyo de la Diputación, materializada año tras año y que viene permitiendo que la Academia pueda desarrollar su labor sin contratiempos. Trabajo que, a partir de ahora, según ha remarcado, tiene garantizada su difusión con este acuerdo, “siendo todo un aval para esa tarea de ser ‘voceros’ de una actividad cultural, que pretende ser seria y rigurosa”.