Vicente Dávila López
Recientemente hemos participado en reuniones con organizaciones y colectivos que representan a poblaciones y regiones consideradas “del ámbito rural”, y en concreto nos hemos acercado a la problemática del denominado “pequeño comercio”, y la primera impresión es de un cierto abandono y conformismo, con el típico “poco se puede hacer”,.. pero no es verdad.
Ahora es el comienzo efectivo de los programas del sexenio 2014 – 2020, en concreto programas EDUSI (“Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible”), y LEADER (“Estrategias de desarrollo local para el entorno rural”), y por tanto en estos momentos estamos en un punto crítico, pues se decide y diseña que se va a hacer en el próximo quinquenio, el futuro del pequeño comercio en pueblos y pequeñas ciudades.
Los grupos de trabajo que colaboran en el diseño de planes de actuación, como es el caso de la Asociación para el desarrollo del Campo de Calatrava son conscientes de que el desarrollo y mantenimiento del pequeño comercio de núcleos urbanos reducidos tiene problemas, que redundará en el resto de los programas, puesto que:
- La oferta comercial condiciona la calidad de vida de los ciudadanos, al ser un factor esencial para cubrir las necesidades de consumo y ocio.
- Es un instrumento dinamizador y vertebrador del espacio urbano.
- Contribuye a dar personalidad, imagen y vitalidad a la ciudad, pudiendo convertirse en un elemento atractivo a la misma.
- Es por tanto una actividad que genera riqueza, aporta bienestar, y calidad de vida a la ciudadanía.
Contamos con los mejores mimbres, pero no vale sólo con tener los mimbres, hay que hacer los canastos, y los canastos se hacen con esfuerzo y colaboración, y en las asociaciones como la Asociación para el desarrollo del Campo de Calatrava, cuyo intención de avanzar en el camino de la cooperación entre los municipios de su ámbito territorial, buscando la sinergia entre todos para potenciar la acción, hay que avanzar con programas transversales que afecten/beneficien a todos, evitando personalismos, superando individualismos y posiciones inmovilistas y apostando por acciones conjuntas con amplitud de miras, sin competición, con cooperación; tenemos esa oportunidad,… ahora.
En ésta línea, y como se expuso en la última reunión dela Mesa de Trabajo “El Comercio Especializado y de Proximidad”, el esfuerzo pasa por trabajar desarrollando diferentes actividades en el ámbito territorial, con una organización que permita:
- Que todos y cada uno participen, con alguna o algunas acciones relacionadas con el perfil del municipio o con el perfil de sus comercios o negocios.
- Que las acciones que se realicen en cada municipio lo sean para los comerciantes de todos los municipios integrados en la asociación, y que puedan participar libremente.
- Que todos los municipios y sus asociaciones y agrupaciones empresariales apoyen y promociones todas y cada una de las actividades, se desarrollen por uno u otro ayuntamiento.
- Como los bomberos, procurar “no pisarse la manguera” estableciendo en la asociación un calendario compartido donde todas las actividades propuestas tengan cabida, y fechas que no interfieran en otras.
- Trabajar en actividades que reporten un beneficio al grupo como el sistemas de certificación de calidad compartidos (donde los ayuntamientos más avanzados harán de “tractores” de los más pequeños o con menos capacidades), promociones en ferias y eventos con la identidad de la asociación, compartiendo organización y presupuestos,…
No se ha planteado una lista exhaustiva, sólo un acercamiento a lo que se ha trabajado en los grupos y que puede ser interesante para el comercio y el desarrollo de la actividad comercial, todo ello requiere de concienciación para que realmente tengamos conciencia de que si no es de manera agrupada, perderemos el sexenio y el comercio local languidecerá, o peor, ira desapareciendo.
Fdo.
Vicente Dávila López