Sigúenza Vive la Opera

Para celebrarlo, se va a proyectar en El Pósito, a las 19 horas, el concierto en directo desde el Waldbühne  de Berlín, protagonizado por Anna Netrebko, Plácido Domingo y Rolando Villazón el 7 de julio de 2006.

En este mes de febrero se cumple el tercer aniversario ‘Vive la Opera en Sigüenza’. Concretamente fue el 26 de febrero de 2016 cuando Zoila Paradela, promotora de una idea que cuenta con el respaldo del Ayuntamiento, elegía todo un clásico, ‘Rigoletto’ de Giuseppe Verdi, para su proyección en El Pósito como primera velada operística de la iniciativa.

Desde entonces, y con periodicidad mensual, a excepción de verano, se viene proyectando en El Pósito una ópera o zarzuela, todas ellas comentadas por Zoila Paradela, de forma previa, públicamente, y durante o al final de la proyección, puesto que en el entreacto o a su término, y por cortesía de la Asociación de Empresarios de Sigüenza (AES) se sirve una copa de cava, momentos en los que Zoila aporta algunos datos más para enmarcar la proyección a quienes los solicitan.

Desde aquel 26 de febrero de 2016, se han proyectado en El Pósito, con este mismo formato, hasta 28 óperas y zarzuelas, que han contado con un número creciente de espectadores. En este contexto llegaba, en agosto pasado, el I Festival de Ópera de Sigüenza que supuso un éxito de público, con lleno en todos sus conciertos, y que contó incluso con la presencia de una de las grandes divas españolas del género, como Teresa Berganza. “Agradecemos el trabajo de Zoila Paradela, y su labor encomiable que contribuye, sin duda, a la divulgación de la cultura en la ciudad”, afirma Sonsoles Arcones, concejala de Cultura de Sigüenza.

Para celebrar el cumpleaños de ‘Vive La Opera en Sigüenza’, Paradela ha elegido un concierto con una gran selección de temas, en lugar de una ópera completa. “Recordaremos un magnífico concierto celebrado en Berlín en 2006, con los mejores intérpretes de aquel momento. La pareja mediática en el mundillo operístico entonces la formaban Rolando Villazón y Anna Netrebko, pues no sólo cantaban muy bien, sino que tenían una sintonía en escena que traspasaba el escenario. Muchos opinaban que había «algo» entre los dos.  Plácido Domingo no necesita presentación. Estaba estupendo y, en la actualidad, sigue impresionando al mundo con nuevos papeles operísticos estrenados con gran éxito. Lo mejor del concierto es el ambiente mágico que se fue creando a medida que avanzaba la velada. El público, nada menos que 20.000 espectadores, disfrutó mucho, algo que se percibe en la grabación”, anticipa la aficionada.

Las tres voces cuentan con acompañamiento de la Orquesta de la Deutschen Oper Berlin, dirigida musicalmente por Marco Armiliato. La grabación se realizó el 7 de julio de 2006.

La primera proyección de 2019 (El Pósito, 12 de enero, 20 horas, entrada libre) incluye la ópera de Puccini Gianni Schicchi y tres grandes temas interpretados por la gran diva de la ópera.

‘Vive la Ópera en Sigüenza’ comienza el año con la proyección de la ópera en un acto Gianni Schicchi de Giacomo Puccini, sobre un libreto de Giovacchino Forzano, inspirado en el ‘Paraíso’ de la Divina Comedia, de Dante, y con un homenaje a la gran Montserrat Caballé.

La aficionada musical Zoila Paradela, con el patrocinio del Ayuntamiento de Sigüenza y la colaboración de la Asociación de Empresarios, ha elegido para iniciar las proyecciones de 2019 esta ópera breve, con el fin de homenajear también a la gran diva de la ópera, recientemente fallecida, eligiendo para ello tres temas emblemáticos. La cita es en El Pósito, el próximo sábado, 12 de enero, a las 20 horas, con entrada libre.

Gianni Schicchi fue estrenada en el Metropolitan de Nueva York en 1918, como última parte de Il tritico. La versión que se va a proyectar el próximo sábado, día 12 de enero, a las 20 horas correspondie a la Orquesta Filarmónica de Londres, con dirección musical de Vladimir Jurowski, en el Festival Glyndebourne (2004). Los papeles protagonistas corresponden a  Alessandro Corbelli, Felicity Palmer, Marie Mclaughlin, Massimo Giordano y Sally Matthews.

La trama, ambientada en Florencia en 1299, se desarrolla en torno a la muerte del rico Buoso Donati. Los parientes buscan con ahínco el testamento del tacaño Buoso, hasta que su joven nieto Rinuccio lo encuentra y, antes de entregárselo a los parientes, consigue el consentimiento de su desagradable tía Zita para casarse con Lauretta, hija del campesino Gianni Schicchi. Al leer el testamento, sin embargo, los parientes se dan cuenta de que Buoso ha dejado todas sus pertenencias a los monjes de Signa como expiación de sus pecados. Ante la desesperación de la familia, que ve evaporarse la fortuna del tío, el astuto Schicchi, a ruegos de su hija, elabora un plan perfecto: se disfraza de Buoso, ocupa su lugar en el lecho mortuorio y hace llamar al notario para redactar un nuevo testamento. Los familiares, mientras éste llega, intentan sobornar a Schicchi para quedarse cada uno con la mejor parte de la herencia; Gianni dice que sí a todos pero, a la hora de la verdad, se adjudica la mayor parte de los bienes y obliga a la gruñona Zita a pagarle un buen pellizco al notario, por si acaso. Los familiares intentan recriminarle su acción, pero él los amenaza, recordándoles cómicamente la pena en que incurrirían por el delito cometido, que en la Florencia de finales de siglo XIII consistía en cortar una mano al culpable. Schicchi se justifica al final: su hábil estratagema ha permitido a Rinuccio casarse con Lauretta ¿De qué mejor manera podían acabar los dineros de Buoso?

La cita es en el Auditorio de El Pósito de Sigüenza, a las 19 horas, con entrada libre. Habrá charla coloquio antes y después de la proyección.

Este próximo sábado, día 26 de mayo, la iniciativa Vive la Opera en Sigüenza (Guadalajara) va a proyectar la ópera en un acto Salomé. Se trata de una obra de Richard Strauss, con libreto basado en la traducción alemana de Hedwig Lachmann de la obra de Oscar Wilde, realizado casi al pie de la letra por el compositor. Se estrenó en el Teatro de la Corte de Dresde, el 9 de diciembre de 1905. A España llegó cinco años más tarde, al Gran Teatro del Liceo, de Barcelona, 29 de enero de 1910.

La aficionada musical Zoila Paradela, con el patrocinio del Ayuntamiento de Sigüenza y la colaboración de la Asociación de Empresarios, proyectará una versión sublime de este clásico de la lírica que será ampliamente comentada previa y posteriormente en una distendida tertulia dirigida por Paradela. La versión que se va a proyectar corresponde a una grabación realizada el 11 de octubre de 2008 en el Teatro Metropolitan de Nueva York bajo la dirección musical de Patrick Summers. Los personajes principales están interpretados por Karita Mattila (Salomé), por Juha Uusitalo (Jokanaan) y por Kim Begley (Herodes).

Salomé, princesa de Judea, está fascinada por las insistentes prédicas del profeta Jokanaan contra Herodes y su esposa Herodias, que le han supuesto haber sido encerrado en un pozo del palacio sin que el reyezuelo, atenazado por la superstición y el miedo, se atreva a matarlo. Herodes ha prohibido que nadie lo vea, pero Salomé pide al capitán de la guardia Narraboth, que está enamorado de ella, que le deje ver a Jokanaan. Él acaba por aceptar pero, cuando ve la fascinación que el profeta ejerce sobre Salomé, se suicida. Por su parte, Jokanaan ni tan siquiera quiere verla, pero sus palabras y su cuerpo atraen fatalmente a la princesa. El lascivo Herodes quiere ver bailar a su hijastra Salomé, pero su madre, Herodias, trata de impedirlo. Cuando el rey jura a Salomé que le dará lo que le pida, ella acepta, baila y reclama la cabeza de Jokanaan. Herodes se resiste, porque tiene funestos presentimientos si mata al profeta, pero Salomé se muestra inflexible: quiere su cabeza. Herodias coge el anillo del rey y con él ordena la muerte de Jokanaan. Después de una larga pausa, el verdugo presenta la cabeza a Salomé, que sostiene un largo monólogo con ella y en el cual, segura de su belleza, llega a afirmar: “Si me hubieses visto me habrías amado”. Herodes no puede soportar la visión de un espectáculo así y ordena a sus soldados que aplasten a Salomé con sus escudos.

Con Salomé, Richard Strauss inició la serie de óperas que alcanzarían fama universal y le darían el grado de operista de primera línea en el siglo XX, iniciando ese recorrido de la mano del expresionismo aliado con el decadentismo de Oscar Wilde. Su obra, cruda y, desde el punto de la llamada “moral victoriana”, inaceptablemente lasciva, encontró dificultades para difundirse en los primeros tiempos, y sólo la indudable categoría musical de su creación venció los obstáculos derivados de la reacción pacata del emperador Guillermo II en Alemania, y la pudibundez británica y norteamericana que produjeron rechazos parciales a raíz de su presentación en Nueva York (1907) y en Londres (1910).

Curiosamente en España no hubo reacciones de este tipo, posiblemente porque el texto alemán no resultaba comprensible, y los estrenos en Barcelona (enero de 1910) y Madrid (Teatro Real, febrero 1910) no desataron más que algunos comentarios irónicos de la prensa satírica del momento.

El contenido decadentista de la obra es evidente, pero las producciones minimizaron desde el principio los aspectos más expresionistas del drama, como la muerte de Salomé, aplastada literalmente como una enorme cucaracha bajo los escudos de los soldados, algo que el público no percibe en producciones que no subrayan este aspecto de un modo explícito.

La partitura es una de las más brillantes de Strauss, que se revela como un genial orquestador. A pesar de la popularidad de la Danza de los siete velos, quizá los mejores momentos de la obra se encuentran en el impactante monólogo de Salomé, en las intervenciones de Jokanaan y, en general, en todo el desarrollo de la acción que cuenta con un texto que ya es, de por sí, una verdadera obra maestra.

Tendrá lugar este próximo sábado, día 3 de febrero, en el auditorio de El Pósito, a partir de las 19 horas de la tarde. Como siempre, en el intermedio, los asistentes podrán disfrutar de una copa de cava, por cortesía de la Asociación de Empresarios de Sigüenza.

Este próximo sábado, día 03 de febrero, en el Auditorio de El Pósito siete de la tarde, la iniciativa Vive la Ópera en Sigüenza (Guadalajara) cumplirá dos años con la proyección de la ópera en cuatro actos de Giuseppe Verdi, Lady McBeth.  La entrada es gratuita. En el entreacto, como en cada proyección, habrá copa de champán para todos los asistentes.

La aficionada musical Zoila Paradela, con el patrocinio del Ayuntamiento de Sigüenza y la colaboración de la Asociación de Empresarios, proyectará una versión sublime de este clásico de la lírica que será ampliamente comentada previa y posteriormente en una distendida tertulia dirigida por Paradela.

Con libreto de Francesco Maria Piave, Lady McBeth está basada en la tragedia de Shakespeare. Se estrenó en el Teatro della Pergola de Florencia, el 14 de marzo de 1847. Reformada después por Verdi para el Théâtre Lyrique de París, donde se estrenó una segunda versión el 19 de abril de 1865. Ésta es la versión que suele representarse hoy en día. El estreno en España tenía lugar en el Teatro del Circo, Madrid, 20 de febrero de 1848. La grabación que se va a proyectar en Sigüenza se realizó el 11 de octubre de 2014 en el Metropolitan de Nueva York, con Zeljko Lucic como MacBeth y Anna Netrebko como Lady MacBech.

La acción transcurre en Escocia. Banco (bajo) y Macbeth (barítono), generales del Rey Duncan, escuchan las profecías de unas brujas, que declaran que el primero será padre de reyes y el segundo será nombrado Señor de Caudor y, después, rey. Un mensajero trae la noticia de que el rey Duncan lo ha nombrado, en efecto, señor de Caudor. Lady Macbeth recibe la carta en la que su marido le explica las predicciones de las brujas y, cuando un criado anuncia que el rey va a pasar la noche en el castillo, empuja a su esposo a cometer el regicidio, dejando pruebas falsas que acusen al hijo del rey. Tras el asesinato todos quedan horrorizados y el hijo del rey huye temiendo las sospechas que lo acusan.

Macbeth, por lo tanto, logra ser rey, pero la predicción de que los hijos de Banco serán reyes lo tiene preocupado y, por este motivo, envía a unos sicarios a matar a Banco y a su hijo. El primero muere, pero el hijo consigue huir. Durante un banquete que se celebra en el castillo, Macbeth es informado de la muerte de Banco, y se le aparece su espectro. Todos los presentes quedan desconcertados ante la actitud demente de su nuevo rey y el banquete debe interrumpirse, pese a los esfuerzos de Lady Macbeth por dar una apariencia de normalidad a la situación. Los cortesanos intuyen que algo tiene que ocultar la real pareja.

Macbeth vuelve a interrogar a las brujas, que le hacen tres nuevas predicciones: que se proteja de Macduff, que ningún nacido de mujer podrá matarlo y que será invencible hasta que el bosque de Birman avance hacia él; y le confirman que los descendientes de Banco serán reyes. Cuando se lo cuenta a Lady Macbeth, deciden incendiar el castillo de Macduff y encontrar al hijo de Banco y eliminarlo. Los enemigos de Macbeth se refugian en la frontera inglesa con Escocia. Malcom, el hijo del rey Duncan, a la cabeza de un ejército se dispone a combatir al tirano. Ordena a los soldados que se camuflen con ramas del bosque de Birman para avanzar hacia el castillo. Lady Macbeth ha enfermado y aparece sonámbula frotándose las manos para lavar la sangre que cree tener en ellas. Luego muere. Al ver al bosque de Birman avanzar hacia el castillo, Macbeth se apresta a la batalla y muere a manos de Macduff. La victoria es para Malcolm, que es proclamado rey.

El aria y la cabaletta de Lady Macbeth, “Vieni t’affretta”, es el primer momento de impacto de esta ópera. Curiosamente, Verdi quería que este personaje fuese interpretado por una cantante con la voz desagradable, iniciando así la destrucción definitiva del concepto hasta entonces vigente del bel canto. Banco, el bajo, tiene un aria muy significativa, “Come dal ciel precipita”. Macduff, el tenor, es un personaje secundario, aunque tiene un aria muy bella “Ah la paterna mano”. Lady Macbeth canta su escena del sonambulismo, que entronca con la larga tradición de arias de locura de la ópera italiana, y Macbeth se distingue en el aria “Pietà. Rispetto, amore”. Una vez más, Verdi atribuyó el papel protagonista a una voz de barítono, porque en esa época los tenores todavía no habían desarrollado un tipo de canto que permitiese ejecutar papeles violentos e intensos como el que se requería para este personaje.

Verdi revisó Macbeth en 1865 y añadió algunas piezas, como el aria de Lady Macbeth “La luce langue”, del segundo acto, y amplió los coros y las escenas finales de la obra, además de otros retoques.

La cita tendrá lugar en el Auditorio de El Pósito, este sábado, día 1 de abril, a partir de las 20 horas de la tarde.

Siguiendo con la programación de ‘Vive la Ópera’ en Sigüenza (Guadalajara), la iniciativa ofrece este sábado una ópera magnífica de un compositor que aún no había sido programado. Se trata de ‘Norma’, sin duda la ópera más famosa de Vincenzo Bellini.

‘Norma’ es la octava ópera de las diez únicas que compuso Bellini en su corta vida, pues falleció cuando tan sólo contaba treinta y tres años de edad, dejando un espacio que en poco tiempo ocupó un joven Verdi, que empezaba su carrera.

El estreno tuvo lugar en el Teatro de la Scala de Milán en la noche de San Esteban del año 1831. La ópera gustó y se ha venido representando habitualmente desde entonces, pasando a formar parte del repertorio operístico mundial.

Los momentos musicales más destacados recaen en la protagonista. Para interpretar a Norma correctamente la cantante ha de poseer fuerza y agilidad para atacar la coloratura que exige la partitura. La inconmensurable Maria Callas dotó de gran dramatismo al personaje y fue una de las grandes intérpretes de este duro y ansiado papel, al igual que Joan Sutherland, conocida en el mundo de la ópera como “la estupenda” y de Montserrat Caballé, que dejó una grabación antológica desde el Teatro de Orange.

Otra gran soprano (o mezzosoprano) que da réplica a Norma es el personaje de Adalgisa. Los dúos que interpretan ambas cantantes son de lo más refinado y delicado, aunque entrañan una enorme dificultad. El dúo del segundo acto es uno de esos raros momentos en que una excelente interpretación puede crear un silencio absoluto en el teatro, mientras las dos voces van desgranando la fabulosa melodía belliniana.

El tercer personaje en discordia es el joven Pollione que interpreta un tenor. En época del estreno de la ópera era costumbre que las notas altas se cantaran “en falsete”, aunque los cantantes actuales las atacan con toda la voz, lo que constituye un gran esfuerzo para el intérprete.

La versión escogida en esta ocasión es bastante reciente. Data de febrero de 2015 y se grabó en el Gran Teatro del Liceo de Barcelona. En el reparto encontramos una Norma excepcional en la persona de Sondra Radvanovsky, bien secundada por la Adalgisa de Ekaterina Gubanova y el personaje masculino, que aborda un tenor de gran fama en estos momentos, Gregory Kunde.

La grabación recoge uno de esos momentos que a veces se dan en el teatro de la Ópera, cuando los cantantes están bien y el entusiasmo del público los arropa. Una gran función que no debe perderse ningún aficionado y que debe conocer todo aquel que nunca ha visto una Ópera.

La cita tendrá lugar en el Auditorio de El Pósito, este sábado, día 1 de abril, a partir de las 20 horas de la tarde.

Como en cada una de las anteriores ocasiones, será la aficionada a la lírica Zoila Paradela quien prologue y epilogue la proyección para contextualizar tanto la propia obra como la versión que van a visualizar los seguntinos. Además, en el entreacto, los asistentes que lo deseen brindarán con una copita de cava, por cortesía de la Asociación de Empresarios de Sigüenza. La iniciativa cuenta con la colaboración y patrocinio del Ayuntamiento de Sigüenza.