El alcalde porzuniego recuerda que no se ubicará en el término municipal de Porzuna, por lo que el Ayuntamiento no tenía constancia
El alcalde de Porzuna, Carlos Jesús Villajos, ha mantenido una reunión con la alcaldesa de El Robledo, Elena Tamurejo, para recibir de primera mano información sobre el punto en el que se encuentra el proyecto de las dos granjas de 2000 cerdos (o macrogranja de 4000) que pretende instalarse en el municipio vecino.
Ambos alcaldes han acordado solicitar una reunión con el jefe de servicio de la delegación provincial de Desarrollo Sostenible, Jesús Motos, para conocer cómo está el expediente, qué opinan los técnicos y qué documentación se le va a exigir al promotor desde la Junta de Comunidades para determinar si puede instalar esa macrogranja o no.
El alcalde de Porzuna, Carlos Jesús Villajos, ha señalado que “lo importante es recabar toda la información necesaria para poder hablar con conocimiento de causa, y en este sentido, estamos consultando e intercambiando impresiones con expertos en la materia, técnicos, responsables políticos y ganaderos, además de escuchar a vecinos que están tanto a favor como en contra de estos proyectos”.
Villajos, que ha estado acompañado por el concejal de Agricultura, Isidro Hervás, ha afirmado que “la postura del Ayuntamiento es la prudencia y la mesura; preferimos ser cautos en este tema y recopilar todos los datos para ver si este proyecto perjudicaría al río Bullaque o a los vecinos de Porzuna o de las pedanías”.
El alcalde ha recordado que “la macrogranja de la polémica se va a ubicar en el término municipal de El Robledo, por lo que en el Ayuntamiento de Porzuna no teníamos constancia alguna de este proyecto y desconocíamos dónde se iba a instalar”.
En este sentido, ha pedido al PSOE de Porzuna que “no saque las cosas de quicio” y no acuse al Ayuntamiento de “oscurantismo” puesto que, hasta el 6 de octubre “no se tenía constancia de este proyecto ni de que pudiese afectar a Porzuna o a las pedanías de ‘Las Tiñosillas’ y ‘Las Casas del Río’”. En el pleno celebrado el 7 de octubre, se habló de este tema. “Han pasado poco más de diez días, y como se apuntó en dicha sesión plenaria, el Ayuntamiento está recabando toda la información necesaria para poder actuar en consecuencia”, ha remarcado el alcalde.
Del mismo modo, Carlos Jesús Villajos ha indicado que “para nosotros lo más importante es garantizar la salud de nuestros vecinos y respetar lo que dicte la normativa y la Ley en cada caso, como no podía ser de otro modo” y ha añadido que “confiamos en lo que determinen los técnicos y organismos competentes, que son los que deben autorizar o no este proyecto y determinar si cumple todos los requisitos necesarios”.
Recogida de firmas
Respecto a la mesa informativa y a la recogida de firmas que un grupo de vecinos de Porzuna y de El Robledo llevó a cabo el pasado fin de semana, el alcalde ha aclarado que “nunca se ha prohibido a nadie manifestar su opinión, informar o realizar una recogida de firmas” pero ha apuntado que “hay que respetar los cauces habituales para evitar problemas porque en casos donde existen posturas opuestas, pueden producirse encontronazos y tanto la Policía Local como la Guardia Civil deben tener conocimiento de cualquier acción que se lleve a cabo”.
En este sentido, ha apuntado que ese grupo de vecinos se dirigió al Ayuntamiento pidiendo permiso para instalarse en las inmediaciones del recinto ferial, pero como el consistorio tenía cedidas esas instalaciones y sus alrededores a la Junta de Comunidades con motivo de los actos conmemorativos del Día Internacional de la Mujer Rural y era la Consejería de Igualdad quien se encargaba de la autorización de todo lo relacionado con ese evento, la Policía Local les comunicó por escrito que lo tenían que solicitar a dicha Administración, si bien emitió informe positivo de licencia de ocupación en la Plaza Mayor. Sin embargo, los vecinos se ubicaron sin autorización alguna y sin previo aviso en el Parque Municipal cortando el acceso con una pancarta grande, por lo que la Policía Local les pidió que se marchasen a la Plaza, puesto que no tenían autorización para instalarse allí.
En cualquier caso, “este Ayuntamiento y este equipo de gobierno no pondrán ningún obstáculo a ninguna persona o grupo de personas que quieran manifestarse pacíficamente y expresar su opinión, sea cual sea”, y añade que cualquier dependencia municipal o emplazamiento público estará a disposición de las personas que están en contra de la macrogranja o de quien tenga algo que decir en este sentido para exponer sus argumentos públicamente, siempre que se solicite en tiempo y forma.