Enrique Pedrero Valdepeñas

Por,Enrique Pedrero Muñoz

Asociación Madrileña Española de Pintores y Escultores, AMCA y AECA

Con 47 años, casi medio siglo de actividad artística, Daniel de Campos, nos presenta una interesante manifestación en el Museo Municipal de Valdepeñas (Ciudad Real) que recorre gran parte de su vida y que está presente desde el 27 de octubre hasta el 12 de diciembre del año en curso.

Desde sus comienzos en su juventud, su historiografía artística ha evolucionado y experimentado considerablemente, pudiendo afirmar, que su obra ha estado presente y recorrido gran parte de los que es nuestra historia del arte reciente, sobre todo de la segunda parte del siglo XX y parte del XXI en la que nos hallamos.

Su pintura, ha practicado diversos estadios, así en sus comienzos ya en 1973 comienza a destacar con su “Autorretrato” al óleo, realizado a los 21 años. En él, ya se deja entrever una pincelada suelta y contundente, camino de la mancha, ya que su estilo es muy personal e intransferible, como más tarde afirmaré.

Esta primera etapa entre 1970 y 1990, se dedica a la representación de desnudos, retratos de personajes de la vida diaria y del momento, también paisajes, representando un estilo muy personal, que podríamos describir como una figuración un tanto expresionista, donde el color coge fuerza y la pincelada es más gruesa, llegando muchas veces en los paisajes a la mancha propiamente dicha y a la abstracción, siempre con un interés exhaustivo por el color, concluyendo en algunas en una sinfonía de colores, donde éste no tiene más elementos que su representación propiamente dicha, es decir donde las formas son color.

Sin embargo, intercala con otras figuras más miméticas en su expresión, como son el cuadro “El pésame” o “El tiempo detenido” entre otras, no olvidando esa pincelada suelta que le define, como algo original en su estilo, presentando aquí ya obras realizadas por un maestro de la pintura. Incluso algunas veces entremezcla las tres formas suyas de hacer: la mimética, la expresionista y la abstracta, como en el óleo “Composición” o “Los desheredados”.

Recorremos una segunda época, que podríamos situar  entre 1990 y 2003 y encontramos que domina magistralmente todas las  técnicas, de ahí un estilo que estará presente en gran parte de su vida. Todo este  interés por la mancha y las formas, deriva en un cubismo muy personal, que tendrá su originalidad, reuniendo varias características. Por un lado está la geometría, de la que ya venía intercalando anteriormente y por otro el dominio del color en todas sus derivaciones, que se complementa con toda su luminosidad, incluyendo texturas, materia, entre otras y  que le servirá para adentrarse en terrenos expresivos de ricos empastes y excelentes cromatismos., imprimiéndole a la obra, peso, ritmo, dirección y movimiento. Porque lo más importante para Daniel de Campos, es la materia y la composición, que plasma con colorido intenso, pero a la vez con una paleta equilibrada y armónica.

Entre otras aptitudes que encontramos en Daniel y que nos ha demostrado en su dilatada vida artística, es como si quisiera huir de la figuración de la que domina magistralmente, aunque muchas veces la apariencia nos contradiga, ya que de vez en cuando se ha trasladado momentáneamente a ese estilo figurativo de signo realista que él conoce muy bien. Fruto de ello, es la gran obra realizada en este siglo y que le sitúa, como pintor de cuadros de historia, como es la “Batalla del Seis de Junio de 1808”, obra que sintetiza la defensa del pueblo de Valdepeñas en la contienda de la Guerra de la Independencia contra los franceses. Una obra de grandes dimensiones, al óleo sobre lienzo, que describe en un plano realista, con connotaciones muy personales, fruto de sus conocimientos pictóricos.

Por otro lado reconocemos el espíritu humanista de Daniel de Campos, que le ha marcado considerablemente, ello se deja entrever y ha sido plasmado en todas sus obras.

Analizando exhaustivamente su trayectoria, reconocemos que ha conocido diversos estilos y tendencias, comenzando en la figuración de tipo realista, de ahí pasaría a otra junto con un paisajismo expresionista, llegando  a veces a la abstracción,  para internarse profundamente en un cubismo muy personal del que le ha marcado gran parte de su vida. Actualmente divaga entre un expresionismo figurativo, que veces se hace más abstracto, junto a los paisajes, reconociendo en toda su representación actual que combina todo lo aprendido: técnicas, formas, materia, texturas, predominando el color y utilizando a veces los complementarios, con toda su intensidad. Así mismo no tiene complejos para adentrarse en cualquier tema: paisajes urbanos o campestres, bodegones, temas históricos, la idiosincrasia de personajes, desnudos, interiores con figuras, fantasías y un largo etc., siempre adaptando la temática a su forma de crear

Daniel de Campos de Campos, (Viso del Marqués 1952). Reside en Valdepeñas. Pintor.

En 1963 inicia sus estudios con las disciplinas de Humanidades y Filosofía y Letras en el Seminario Diocesano  de Ciudad Real. Entre 1968 y 1971 recibe también formación artística en la Escuela de Artes y Oficios de esa misma ciudad. Comienza a recibir desde muy joven varios galardones como el Primer Premio en el Certamen Juvenil de Arte, de Carácter Provincial celebrado también en la capital manchega, en  1970.

Desde 1972 y 1974, reside en la Ciudad Condal. Allí se relaciona con la movida catalana, incluso se hace cofundador del grupo artístico “Los Nuevos Gatos”. También recibe varios premios en diversas exposiciones.

En 1974 se traslada al Nuevo Continente para ejercer como docente en la UCA en Managua (Nicaragua) como profesor de Pintura y Grabado. También inmortaliza pintando a varios personajes ilustres.

De vuelta a España en 1976, ingresa en la Facultad de Bellas Artes de Bilbao.

Un año después hace su traslado a la Facultad de Bellas Artes de Madrid, dependiente de la Universidad Complutense de la misma ciudad y también viaja a París. Al finalizar sus estudios, se le concede el premio extraordinario, de Beca de Paisaje, para residir en 1980, en la Residencia para Paisajistas del Paular (Madrid), tras haber conseguido la Licenciatura en 1979, en el tiempo record de 4 años.

En 1981 aprueba la” Oposición de la Cátedra de Dibujo de Instituto”. Dos años más tarde en 1983 se traslada a Valdepeñas para impartir clases en el Instituto de Enseñanza Media “Bernardo de Balbuena” ejerciendo primero como profesor y luego como director. En esta época ejecuta varios cursos artísticos y está atento a cuantas exposiciones se dan en nuestro país, obteniendo numerosos premios.

Más tarde en 1987, se crean los Talleres de Artes Plásticas de Valdepeñas, bajo su dirección, otorgándole el Excmo. Ayuntamiento de Valdepeñas su nombre a la academia, la cual persiste en la actualidad.

Desde 1992 trabaja como Catedrático de Dibujo en Madrid y vive a caballo entre  la Capital de España y Valdepeñas.

Su punto culminante llega en 1996 después de obtener el Doctorado en Bellas Artes Cum Laude en cuatro años, en la Universidad Complutense de Madrid.

Posteriormente entre 2003 y 2004, se traslada nuevamente a Hispanoamérica para impartir clase en la Universidad Tadeo Lozano de Bogotá (Colombia), como profesor de Pintura y Grabado.

En el año 2005 vuelve a España y vuelve a regresar a Las Indias, esta vez a Chile permaneciendo allí hasta 2008, fecha que hace su traslado a Colombia, residiendo en Bogotá. En 2013 es condecorado por el Gobierno de Colombia en Bogotá, de esta forma consigue diversos galardones. El primero el de la “La Orden de Excelencia Académica Francisco José de Caldas” y el segundo “Personaje Cultural del Año” siendo este último la primera vez que se concedía dicho título.

Daniel de Campos ha colaborado con la Embajada de España, en distintos países de Sudamérica. Finalmente en el año 2014, hace su vuelta a España,  para quedarse definitivamente en la piel de toro, no sin viajar periódicamente a la zona.

Hallamos en su haber más de 200 exposiciones colectivas, una cuarentena de individuales, tanto unas como otras en España e Iberoamérica  y recibido casi una veintena de Premios, becas y galardones.

Enrique Pedrero Muñoz

Asociación Madrileña Española de Pintores y Escultores, AMCA y AECA