Las psicólogas María del Hoyo Fernández y Celia Avello Escribano y de la Cínica López Ibor dan las respuestas
La depresión es una de las enfermedades mentales más frecuentes en la sociedad actual, siendo la principal causa mundial de discapacidad. Según la Organización Mundial de la Salud, esta enfermedad afecta a 121 millones de personas a nivel mundial, de las cuales, curiosamente, menos de un 25% tienen acceso a tratamiento. También, advierte que una de cada cinco personas llegará a desarrollar un cuadro depresivo a lo largo de su vida. Pese a ser más prevalente en mujeres que en hombres, la depresión puede afectar a cualquier persona, independientemente de la edad y del nivel socioeconómico. Todo ello pone de relieve la necesidad de concienciar a la sociedad, acerca de la importancia del cuidado de la salud mental.
De manera ocasional, es normal que nos sintamos tristes en determinados momentos, pero dichas emociones, no suelen permanecer de manera constante en el tiempo. Sin embargo, cuando una persona padece un trastorno depresivo, el estado de ánimo bajo es de tal intensidad y perdura durante tanto tiempo que llega a interferir en la vida diaria de la persona, afectando al desempeño laboral, social y personal de las actividades cotidianas. Este estado de ánimo bajo no solo se caracteriza por sentimientos de tristeza, sino también por una falta de interés o de placer en actividades que, previamente, resultaban satisfactorias. Habitualmente, dicha sintomatología suele ir acompañada por alteraciones del sueño, del apetito, ansiedad, falta de energía, problemas de concentración y, en los casos más graves, pensamientos de muerte.
No suele haber una causa directa para explicar la depresión, sino que se entiende como el resultado de la interacción entre diferentes factores biológicos, psicológicos y sociales que afectan a la persona. Aquellos que pasan por circunstancias vitales adversas, presentan mayor probabilidad de sufrir esta enfermedad. Aun así, pequeños factores estresantes de la vida cotidiana, como por ejemplo problemas de pareja, problemas laborales o preocupaciones del día a día, también suponen factores de riesgo a tener en cuenta. Todo ello, sin olvidar cierta vulnerabilidad biológica a nivel familiar, ya que existe un riesgo dos o tres veces más elevado de padecer un trastorno depresivo entre los familiares de los pacientes con trastorno depresivo que en la población en general.
A nivel clínico, es una de las enfermedades con mayor posibilidad de tratamiento. Dependiendo de la gravedad de los síntomas y de las propias circunstancias de la persona, el tipo de tratamiento puede varias de unos a otros. De manera general, se pueden distinguir dos vías principales, una a nivel médico y otra a nivel psicológico.
A nivel médico, suele ser frecuente el uso de antidepresivos, los cuales actúan sobre los neurotransmisores (serotonina, noradrenalina, etc.), que se caracterizan por ser unas sustancias químicas que actúan a nivel cerebral ayudando en la regulación del estado de ánimo. A nivel psicológico, la psicoterapia ayuda a las personas, no sólo a entender y comprender de manera más clara su problema, sino que también, trabaja diferentes formas de pensar y actuar, que puedan ser eficaces para la persona. Ambas vías de tratamiento no siempre se llevan a cabo de manera independiente, sino que, en muchos casos, se pueden dar de manera complementaria.
Sobre la Clínica LÓPEZ IBOR:
La Clínica LÓPEZ IBOR (www.lopezibor.com) fue fundada en 1967 por el doctor Juan José López Ibor, considerado un referente de la psiquiatría en España en el siglo XX. Durante más de 50 años ha incorporado los mejores tratamientos y programas para el paciente, por lo que se caracterizan por ser un centro pionero en la implementación de tratamientos y tecnologías. En 2017, la Clínica fue adquirida por Grupo ORPEA (www.orpea.com),líder en salud mental en Europa y en cuidado de personas mayores y dependientes. Este grupo francés cuenta, a través de distintas filiales especializadas en salud mental, con más de 55 clínicas psiquiátricas en Francia, España, Alemania, Suiza e Italia.