El Centro Regional de Cría de Perdiz Roja, preparada para producir entre 7.500 y 9.000 crías al año, dispone de cerca de 900 parejas reproductoras con las que se trabaja en tres naves dedicadas a la cría de esta especie.
El Gobierno de Castilla-La Mancha va a invertir un total de 318.000 euros para la recuperación de la perdiz roja esteparia hasta 2021, lo que va a posibilitar asimismo la recuperación de los hábitats propios de esta especie, ubicados, en su mayoría, dentro de zonas naturales especiales de protección de aves (ZEPA) en Castilla-La Mancha. Así lo ha adelantado el viceconsejero de Medio Ambiente del Gobierno de Castilla-La Mancha, Fernando Marchán, durante la visita que ha realizado esta semana al Centro de Cría y Producción de Perdiz Roja Autóctona de la región, situado en el municipio albaceteño de Chinchilla de Montearagón.
Marchán, acompañado de la delegada provincial de Desarrollo Sostenible, Llanos Valero, ha asegurado que “desde el Gobierno regional apoyamos la recuperación de la perdiz roja, una de nuestras especies cinegéticas más emblemáticas como forma de proteger nuestro medio natural y para que la sociedad castellano-manchega pueda conocer y disfrutar de nuestra gran diversidad de fauna autóctona”.
El Centro Regional de Cría de Perdiz Roja, preparada para producir entre 7.500 y 9.000 crías al año, dispone de cerca de 900 parejas reproductoras con las que se trabaja en tres naves dedicadas a la cría de esta especie.
La recuperación de la perdiz roja se basa en un proceso genético de hibridación con el que se pretende reemplazar la perdiz turca, predominante en los montes castellano-manchegos, por la raza pura de perdiz roja de Chinchilla. El objetivo es suministrar la perdiz a las diferentes granjas privadas de la región para favorecer el posterior retorno a su hábitat natural.