Este servicio público itinerante para el fomento de la lectura desarrollará su actividad en las localidades albaceteñas de Ayna, Alcadozo, Golosalvo, Fuensanta y El Robledo, y también en los núcleos poblacionales de Las Eras y La Felipa, conformando un total de 7 grupos de lectura de adultos y 3 infantiles.
El Servicio del Libro, Archivos y Bibliotecas de la Junta de Comunidades en Albacete ha trasladado que este proyecto ha logrado cread espacios saludables, con todas las garantías para fomentar el hábito de la lectura, “estimulando la atención, la memoria, la creatividad y la imaginación, al tiempo que se han favorecido las relaciones sociales entre los miembros en zonas especialmente rurales y castigadas por la despoblación”.
La Delegación provincial de Educación, Cultura y Deporte ha avanzado hoy que el próximo mes de mayo continuará el proyecto ‘Clubes de lectura en ruta’, alcanzando su sexta temporada, gracias al Bibliobús de Albacete.
Este servicio público itinerante para el fomento de la lectura desarrollará su actividad en las localidades albaceteñas de Ayna, Alcadozo, Golosalvo, Fuensanta y El Robledo, y también en los núcleos poblacionales de Las Eras y La Felipa, conformando un total de 7 grupos de lectura de adultos y 3 infantiles.
Desde el Servicio del Libro, Archivos y Bibliotecas de la Junta de Comunidades se ha trasladado que este proyecto de ‘Clubes de lectura en ruta’ ha logrado cread espacios saludables, con todas las garantías para fomentar el hábito de la lectura, “estimulando la atención, la memoria, la creatividad y la imaginación, al tiempo que se han favorecido las relaciones sociales entre los miembros en zonas especialmente rurales y castigadas por la despoblación”.
Las reuniones que tienen una periodicidad quincenal, tienen como eje principal, los comentarios y análisis del libro seleccionado, siempre se ven enriquecidas con alguna actividad paralela de carácter lúdico.
El número de participantes va creciendo cada año, dando buena cuenta de la importancia y necesidad que adquiere este tipo de acciones en lugares tan pequeños donde la oferta cultural es muy escasa.
En un momento en el que se ha contrastado que existe despoblación de las zonas rurales, es muy significativo, poner como ejemplo este proyecto, registrándose algún caso, donde en localidades con 80 habitantes, acudan a las reuniones del club de lectura un 10 por ciento de su población.
En el caso de los niños cobra especial importancia el objetivo de familiarizarlos con las lecturas e inculcarles el placer por los libros, ya que es algo que va a tener un papel fundamental en su desarrollo.
En el club se facilitan lecturas adaptadas a las diferentes edades, con la finalidad de intentar no sólo que lean, sino que lean bien, que sean críticos y creativos. El análisis colectivo del libro se realiza con carácter lúdico, se habla de lo que más ha gustado y de los aspectos más importantes y se realizan diversas actividades de animación relacionadas con el tema de la lectura.
“La cultura es una pieza clave para construir un mundo más justo y para fomentar el desarrollo de personas y comunidades, y debería de ser un derecho poder recibirla independientemente de dónde se viva”.
Los Clubes de lectura en ruta llevan años intentando remediar esa desigualdad, prestando servicio en lugares muy limitados por el aislamiento, la escasa población o la falta de infraestructuras. En definitiva, se trata de un proyecto que año a año ha ido ganando relevancia, y que se ha convertido en una actividad de gran valor en los municipios en los que se lleva a cabo.
Desde la Delegación provincial de Educación en Albacete se ha trasladado que “la lectura nos facilita la participación en la vida social, nos hace conscientes de nuestros derechos y nos da argumentos para protegerlos. La competencia lectora es la base para desarrollar las destrezas oral y escrita del individuo como medios imprescindibles para interactuar en la sociedad y desarrollar todo su potencial creativo e intelectual”.
