Una vez más el PP, representado por Bernardo Ortega, secretario general del partido en Villarrobledo (Albacete), ha vuelto a denunciar la actitud de discriminación con los vecinos que tiene el actual equipo de gobierno socialista en el poder.
Ha dado a conocer “una nueva tropelía del alcalde socialista de Villarrobledo, con ese carácter dictatorial y sectario, al que ya nos tiene acostumbrados en los plenos municipales desde que tomase posesión hace un año, con los peores resultados de la historia del PSOE y sin haber ganado las elecciones”.
Ha recordado cómo el alcalde socialista “se daba golpes de pecho diciendo que gracias a él los vecinos y asociaciones de Villarrobledo iban a tener voz en los Plenos municipales, pero parece ser que solo quiere que participen aquellos que quieran decir algo en contra del PP”.
Bernardo Ortega ha relatado los hechos acontecidos, “empezando en una comisión extraordinaria, en la que la oposición no puede hacer ruegos y preguntas. En esa comisión comenta la presidenta que había entrado una solicitud de la Asociación de vecinos del Barrio Don Quijote y Nueva Villa, y la presidenta, Cristina Torres, dice que su grupo no está de acuerdo en su participación en el siguiente Pleno municipal, porque parecería un agravio comparativo con otras asociaciones que en otros momentos habían solicitado la comparecencia”; Ortega ha informado que la asociación a la que no se dejó comparecer, era porque no habían recogido las firmas y declinaron participar.
El concejal popular ha considerado como mezquina la excusa que dio la presidenta de la comisión, y añade que IU y SPV votaron a favor de la comparecencia junto con el PP, pero no se les deja participar a pesar de los votos a favor. Y esta es la transparencia que utiliza el alcalde socialista y el respeto a los vecinos de Villarrobledo.
En el Pleno que no participaron estos vecinos por expreso deseo del equipo de gobierno socialista, sí participó, sin estar presente y sin haber reunido las correspondientes firmas, la mujer del concejal socialista Juan Luis Íñiguez, el cual leyó una carta de la misma, en la cual solo malmetía contra el PP y contra la concejal popular Amalia Gutiérrez; carta que ya había sido remitida a un medio de comunicación afín al PSOE. Todo esto deja claro que hay vecinos de primera y vecinos de segunda, lo mismo que hay trabajadores de primera y trabajadores de segunda, según la tendencia política.
Ha explicado Bernardo Ortega las razones por las que la Asociación de vecinos del Barrio de Don Quijote y Nueva Villa querían participar en el Pleno, y no eran otras que “dar cuenta de las molestias sufridas por los vecinos, así como las quejas por la mala organización de la concentración motera Rocinante; hobby del alcalde socialista, y cuyas pérdidas van a rondar en torno a 50.000 €, que tendremos que pagar entre todos, y los ciudadanos de Villarrobledo no estamos dispuestos a pagar su fiestas”.
Ha terminado leyendo el escrito que iban a presentar esos vecinos con las quejas y la mala gestión que ha demostrado ser la concentración motera, que no les dejaron presentar en el Pleno municipal, y que sí se han ocupado de enviar por las redes sociales para que el vecindario sepa lo que ha pasado con ese evento.
Ha añadido que “los firmantes de ese escrito han rechazado firmemente la realización de más eventos de ese tipo junto a sus viviendas. Los mismos vecinos se pusieron en contacto con RTVCM, la televisión regional, para denunciar los hechos, y dice un vecino sorprendido, que lo primero que le preguntaron es qué partido político gobernaba en Villarrobledo; al decir que era el PSOE, ya no interesó el problema, dejando claro también el carácter sectario del gobierno regional, viéndose reflejado en la televisión regional”.