Castilla La Mancha es la comunidad donde los niños empiezan a pedir antes dispositivos con pantallas como regalo de Navidad, antes de cumplir los 7 años
Los niños castellanomanchegos pasan más de tres horas al día delante de una pantalla, siendo los españoles que más tiempo invierten con este tipo de dispositivos
Una vez empieza la cuenta atrás para la Navidad los más pequeños de la casa empiezan a redactar la lista de regalos, en las que a lo largo de los últimos años se distingue un claro preferido las pantallas.
Sin embargo, existen diferencias entre las edades a las que acceden a ellas dependiendo de cada comunidad autónoma y la actitud de los padres en las distintas zonas de España frente a esta realidad digital. Multi ópticas ha elaborado el estudio ‘Las pantallas y los niños en Navidad’ del que se extrae que los niños en Castilla La Mancha es la comunidad donde los niños empiezan a pedir antes dispositivos con pantallas como regalo de Navidad, antes de cumplir los 7 años, casi un año antes que la media española que ronda los 7 años y medio.
Asimismo los padres en castellanomanchegos tienen que hacer frente a la realidad de que sus hijos son los que más tiempo pasan delante de los dispositivos con pantalla, superando las tres horas y sobrepasando la media española, que no llega a este lapso de tiempo.
La realidad digital en la que vivimos inmersos ha fomentado que los niños busquen hacerse con tecnología cada vez antes y que aprovechen las festividades para pedírsela a sus padres como regalo navideño, como es el caso de los castellanomanchegos, quienes, por detrás de los asturianos, son los que más han incluido entre sus peticiones de regalos para estas fiestas un dispositivo con pantalla (53%).
Sin embargo, aunque los niños expresen su deseo de obtener una pantalla a una determinada edad, la realidad en Castilla La Mancha es que hasta casi alcanzados los 8 años los niños no obtienen este tipo de dispositivos, aunque sus padres consideren que la edad más conveniente sería casi a los 11.
En esta línea, a nivel nacional, un 54% de los menores ya ha obtenido algún obsequio navideño con pantalla a los 6 años, un 61% a los 8 años, un 77% a los 10 y ya alcanzados los 12 un 93%.
El protagonismo de los dispositivos con pantalla en las listas de regalos navideños lleva aparejado que una parte del presupuesto destinado a estas festividades se reserve a su compra. Dado que, según aseguran los encuestados en Castilla La Mancha, un 51% comprará un dispositivo con pantalla a sus hijos como regalo de Navidad, la inversión en este caso ascenderá, de media, a los 118 euros, por encima de la media española.
Pero, ¿de dónde sacan, en concreto, los niños castellanomanchegos la idea de los regalos que luego piden en estas festividades? Pues, según sus padres, en primer lugar, de sus amigos (74%), de lo que oyen y ven en la televisión (56%) y del colegio (50%).
Padres consternados
La realidad de que los niños crecen y se desarrollan en un ambiente puramente digital y de que casi todos los aspectos de su vida están relacionados con las pantallas se hace aún más evidente en la época navideña, en la que, puestos a exponer todos sus mayores deseos, muchos eligen los dispositivos con pantallas como anhelado compañero de juegos. Este hecho ha acentuado la preocupación del 94% de los padres castellanomanchegos, siendo ésta la tercera comunidad autónoma donde existe una mayor consternación, respecto al tiempo que pasan sus hijos delante de una pantalla.
En este sentido el 94% de los padres encuestados en Catilla La Mancha se ha mostrado partidario de limitar de alguna manera el uso de los menores de los dispositivos con pantallas. Como forma de supervisión, de este porcentaje, un 98% lo limitaría haciendo que lo usen menos horas, un 86% que los usen para acceder a ciertos contenidos y un 66% cree que solo los deberían utilizar cuando ellos están presentes.
De las más de tres horas de media que los niños castellanomanchegos están delante de una pantalla, los padres encuestados consideran que debería reducirse a la mitad en los días laborables y no llegar a las tres horas los fines de semana, pasando a considerar otras alternativas de ocio relacionadas con estar jugando o al aire libre.
Asimismo, y siendo evidente que el uso de la tecnología por parte de sus hijos inquieta a los padres, un 65% de los encuestados castellanomanchegos admite que a ellos mismos les gustaría utilizar menos el móvil.
De este modo, este estudio busca visibilizar la relación que hemos entablado con las nuevas tecnologías y nuestra forma de consumirlas. “Fieles a nuestro compromiso con la salud ocular, desde Multi ópticas queremos seguir impulsando la campaña de Screen Pollution porque tenemos plena conciencia de la responsabilidad que tenemos como compañía especializada en el cuidado de la salud visual”, declara Carlos Crespo, Director General de Multiópticas. “Creemos que con los datos que revela este estudio podemos jugar un papel relevante a la hora de señalar una problemática, de incentivar la prevención y el uso responsable de las pantallas, sobre todo entre los más pequeños”, concluye.
Problemas de visión
El nivel de luminosidad de las pantallas, la distancia a la que consumimos los contenidos audiovisuales o la ergonomía visual a la hora de estar frente a un dispositivo con pantalla son factores que pueden causar alteraciones oculares.
Nueve de cada diez padres en Castilla La Mancha (95%) que ha participado en el estudio consideran que sus hijos podrían llegar a tener problemas de visión si siguen invirtiendo tanto tiempo con ellos y el 57% piensa que las últimas noticias sobre la necesidad de hacer un uso responsable de las pantallas pueden influir en la decisión de compra de los regalos navideños de sus hijos.
“El hecho de que, cada vez más, los menores trabajen más la vista estando expuestos a la influencia de las pantallas y pasen menos tiempo al aire libre está favoreciendo la aparición de afecciones oculares”, apunta el Doctor Manuel Díaz Llopis, Catedrático de Oftalmología de la Universidad de Valencia. “Asimismo es fundamental concienciar a los padres de la importancia de las revisiones visuales, sobre todo, teniendo en cuenta de que hablamos de la salud visual de un niño, de incentivar las actividades al aire libre y de controlar los tiempos de exposición a la tecnología en su tiempo de ocio”, afirma.
Estas recomendaciones van en línea con las creencias de los castellanomanchegos, los cuales son los que más concienciados están (95%) de que los niños deberían hacerse revisiones oftalmológicas cada vez más a menudo por el uso que hacen de los móviles y pantallas y con la creencia del 92% de los encuestados de que necesitaremos llevar gafas o lentillas con más frecuencia también por el aumento de nuestro consumo de la tecnología.
Ficha técnica del estudio de opinión
Empresa: Sondea
Muestra: 2.023 individuos
Edad de la muestra: Padres y madres de entre 25 y 60 años con hijos entre 4 y 18 años.
Tipo de entrevista y error muestral: Auto-administrada a través del correo electrónico. N= 2.023 (Error muestral máximo al 95% de confianza: +/- 2,2% para P y Q=50%).
Campo: noviembre 2019