La líder de los liberales, Carmen Picazo, alude a la «mínima incidencia» de los contagios e insiste en que no hay evidencia científica que justifique esta restricción
Carmen Picazo ha reclamado a la Junta que eleve al Gobierno de España la petición de poner fin a la obligatoriedad de llevar mascarilla en el transporte y en establecimientos como ópticas o farmacias. En el pleno de las Cortes celebrado este jueves, la líder de Ciudadanos en Castilla-La Mancha se ha referido a la evolución positiva de la pandemia, con «un impacto ya muy reducido« y ha argumentado que «no hay evidencia científica que acredite la necesidad de cubrirnos«. En este sentido ha reivindicado que «las restricciones de libertades deben estar perfectamente justificadas y desde luego éste no es el caso«. PSOE y PP se han alineado y ninguno de los dos ha apoyado la iniciativa.
En opinión de la dirigente centrista, «los gobiernos deben ser garantes de la libertad, no tutores de la vida de la gente«. Así, ha valorado la responsabilidad de la inmensa mayoría de los ciudadanos y ha expresado el «hartazgo« por el hecho de que el ejecutivo socialista «nos trate a todos los españoles como a menores de edad«. Además, ha advertido que España va camino de ser el último país de Europa en quitar la obligatoriedad de las mascarillas. Ya han tomado esta decisión Francia, Reino Unido, Italia, Bélgica, Luxemburgo, Países Bajos, Noruega, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Eslovaquia, Irlanda, Portugal, Lituania, Polonia, República Checa, Rumanía y Croacia.
«¿Por qué en una pequeña óptica sí y en un estadio con 80.000 personas no?»
Picazo ha reprochado al Gobierno haber priorizado sus «intereses particulares« en cada momento de la pandemia, causando «confusión« en la ciudadanía. Así, ha denunciado que la normativa es, en algunos aspectos, «incomprensible«, cuestionando «por qué en una farmacia con tres o cuatro personas hay que llevar mascarilla y en un supermercado con cien personas no, por qué en una pequeña óptica sí y en un estadio con 80.000 personas no, o por qué en un autobús medio vacío sí y en una discoteca llena no«. La diputada naranja ha recalcado que «por mucho que le guste al Gobierno decidir sobre nuestras vidas por decreto, quien restringe derechos es quien debe dar los argumentos para ello«.
