Aseguran que los castellano-manchegos tienen que pagar más por la luz, por la cesta de la compra, los combustibles y dentro de poco por el consumo de agua, por el gasto público desbocado de la Junta y los excesivos impuestos
Vuelven a pedir al Gobierno Regional que baje los impuestos a los castellano-manchegos y deje de ser cómplice de las políticas de Sánchez porque tienen en su mano medidas para bajar la presión fiscal a los ciudadanos
El diputado del Grupo Popular, Miguel Ángel Rodríguez, afirma que a las familias castellano-manchegos cada vez les cuesta más llegar a fin de mes y por ello ha pedido al Gobierno Regional que baje la presión fiscal y baje los impuestos a los ciudadanos.
Así se ha manifestado Rodríguez en el Pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha donde ha asegurado que el Gobierno Regional tiene en su mano medidas para bajar los impuestos en la región, “y no me vale que digan que la presión fiscal ha bajado, porque solo lo ha hecho sobre el papel, cuando hemos recibido los ingresos del Fondo de Garantía Estatal, pero la realidad va por otro lado”.
“ Y la realidad, ha detallado el parlamentario regional del PP, es que según un informe reciente del Instituto de Estudios Económicos, la presión fiscal de las empresas en España es un 31% superior a la media de Europa, y la realidad en Castilla-La Mancha es que a las familias cada vez les cuesta más llegar a fin de mes, y los castellano-manchegos tienen que hacer frente a subidas de la cesta de la compra, porque los productos se han encarecido fruto de la inflación mientras que los salarios no han subido en el mismo porcentaje. Si eso no es presión fiscal, desde luego es presión en los bolsillos”.
Miguel Ángel Rodríguez ha reiterado, además, que los castellano-manchegos tienen que pagar más por la luz, por el combustible, y dentro de poco tendrán también que pagar más por el agua del grifo que beben, y eso se lo deben al Gobierno socialista de la región y a sus políticas confiscatorias de un gasto público desbocado y a unos impuestos excesivos y casi confiscatorios.
Ha concluido su intervención pidiendo al Gobierno de Page que dejen de ser cómplices de Pedro Sánchez y su gobierno Frankenstein y pongan a los castellano-manchegos en el centro de sus políticas porque es la hora de bajar los impuestos en Castilla-La Mancha.