La reducción de los contagios y la generalización de las vacunas, sobre todo entre las personas mayores, ha permitido, con limitaciones, comenzar a retomar progresivamente la actividad del centro
La generalización de las vacunas entre los vecinos y vecinas de Argamasilla de Alba (Ciudad Real), sobre todo entre los mayores, que ha llevado a la reducción considerable de nuevos contagios por COVID, y tras una importante reforma, el Centro de Día de Mayores, con estrictas limitaciones, reabrió sus puertas el pasado 7 de junio para comenzar a prestar un servicio muy necesario para los mayores de la localidad, informaron el alcalde, Pedro Ángel Jiménez, y la concejala de Servicios Sociales, Tercera Edad y Empleo, Cristina Carretón.
Aún falta un tiempo para que el centro empiece a prestar todos los servicios que puede ofrecer, en la actualidad se están desempeñando las que dicta la Resolución 11 de mayo del 2021 de la Consejería de Sanidad y de la Consejería de Bienestar Social, “por la que se aprueban medidas para los centros, servicios y establecimientos de servicios sociales y sociosanitarios en el ámbito territorial de la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha” y el Decreto 55/2021 de 8 de mayo, sobre medidas de prevención y control necesarias para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por la COVID-19, “basadas preferentemente en tratamientos y rehabilitación de nuestros mayores”, señalaba la concejala.
En concreto, el centro comenzó su actividad con un taller de Alfabetización Digital Aplicada para contribuir al manejo y utilización por parte de los mayores de las tecnologías, que en muchos casos ha evitado el aislamiento social durante la pandemia. El curso, con una duración de 15 horas y 5 participantes (según aforo), se inició el día 7 de junio y finalizó el 11 del mismo mes.
En esta misma línea, el día 8 de junio se iniciaron las terapias de apoyo psicosocial o aula de respiro, donde se está trabajando con 15 usuarios, todos ellos con algún grado de dependencia o patología. En un principio las terapias se mantendrán durante todo el verano, siempre y cuando las personas usuarias y familiares sigan demandándolas.
En estas terapias, por un lado, se trabajan ejercicios de gerontogimnasia y por otro de estimulación cognitiva, memoria o psicomotricidad, dependiendo de las necesidades y características de los usuarios y usuarias.
Por otro lado, si la situación sanitaria sigue en la línea de mejora, poco a poco, indicaba Carretón, se irán flexibilizando las medidas de aforo y se ampliarán, progresivamente, las actividades que se venían realizando, así como otras nuevas que a raíz de la pandemia se crean necesarias desde las áreas de Servicios Sociales y Tercera Edad, “pues estamos a disposición de lo que necesiten nuestros mayores, trabajando diariamente con el único fin de buscar su bienestar”.
