Se celebraba en la Iglesia Parroquial de Santiago Apóstol en la tarde noche de ayer jueves, 20 de mayo, y estuvo acompañado del párroco, sacerdotes, de los miembros de la Hermandad-Mayordomía, del alcalde y concejales de la Corporación Municipal.
Quintanar de la Orden (Toledo) celebra durante estos días los actos en honor a su patrona la Virgen de la Piedad, en la conocida como fiesta de la Subida que se celebra cada año por Pentecostés.
En esta ocasión, y debido a la pandemia tan sólo tendrán lugar los actos litúrgicos que han comenzado con el tradicional triduo y que continuarán el domingo con la Solemne Misa.
Precisamente el primer triduo, celebrado la tarde del jueves, 20 de mayo celebrado en la parroquia y no en la ermita de la Virgen como es tradicional por motivos de seguridad y espacio, era predicado por el arzobispo de Toledo, D. Francisco Cerro, que en todo momento se sintió arropado por los quintanareños y quintanareñas. El arzobispo tuvo muy presente durante su predicación a la Virgen de la Piedad tan querida por el pueblo de Quintanar y a las que tantas plegarias se dirigen más aún, en estos tiempos que corren.
El alcalde, Juan Carlos Navalón, que acudía a la recepción del arzobispo se mostraba encantado de poder recibir su visita en este primer triduo de “una de las fiestas con más tradición de nuestra localidad que tiene a nuestra patrona como protagonista”. Navalón, que lamentaba que un año más, y debido a la pandemia, no podrán celebrase actos tan populares como la verbena en las inmediaciones de la ermita de extramuros como la procesión el domingo de Pentecostés, esperaba que el próximo año si pueda lucirse la patrona.
No obstante, recalcaba que igual de importante son los actos litúrgicos que se están llevando a cabo “con todos los honores y dando respuesta a la inmensa devoción del pueblo de Quintanar por su patrona, la Virgen de la Piedad”.
Los triduos continuarán este viernes y el sábado y se cerrarán los actos con la Solemne Misa el domingo en el Templo Parroquial.
