Además de la mejora de los sistemas de ventilación del espacio, se ha adquirido nueva maquinaria como la procesadora de tejidos o un armario para el almacenamiento de las muestras en formol.
El Hospital Virgen de la Luz de Cuenca, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), ha culminado el proceso de adaptación de la Sala de Procesamiento de Muestras de biopsias y piezas quirúrgicas del Servicio de Anatomía Patológica con el fin de incrementar la seguridad de los profesionales que trabajan con material conservado en disoluciones como el formol.
Las medidas adoptadas por la Gerencia del Área Integrada de Cuenca tienen como fin reducir al mínimo los riesgos laborales y cumplir de forma exhaustiva las diferentes normativas relacionadas con la prevención de riesgos en relación a la manipulación de este tipo de productos, ya que la mayoría de las muestras que llegan al Servicio de Anatomía Patológica para su análisis, estudio y manipulación están conservadas en formol.
Las acciones desarrolladas comenzaron con la mejora de todos los sistemas de ventilación y drenaje de la Sala de Procesamiento de Muestras de este servicio, ya que el objetivo de estas obras era lograr una mejor depuración del aire, así como disminuir al mínimo posible los porcentajes de formol del aire en cada uno de los momentos de la manipulación de las muestras.
Asimismo, se ha sustituido parte del equipamiento de esta sala con el fin de incorporar nueva tecnología que permita reducir la exposición a este tipo de productos. Con esta finalidad se cuenta con una nueva impresora para la identificación de los casetes de plástico que contienen las muestras de la nueva procesadora de tejidos, aparatajes que ha supuesto una inversión superior a los 70.000 euros.
La nueva procesadora permite, por ejemplo, evitar la manipulación manual de las garrafas de formol para el trasvase del producto ya que éstas son introducidas directamente en la maquinaria.
Por último, se ha adquirido un armario de seguridad para el almacenamiento de las muestras que se envían en formol, cuyo coste ha superado los 10.000 euros, que permite disminuir de forma muy importante las concentraciones de esta disolución en el espacio de la sala de procesamiento de muestras del Servicio de Anatomía Patológica.
