Por Julio García Gómez es experto y docente de habilidades de comunicación, lenguaje verbal,
El auge de la comunicación presencial con mascarilla y distancia de seguridad y online, exige el desarrollo de habilidades, competencias y recursos en los docentes y en la sociedad en general.
Es necesaria la formación del profesorado en técnicas de comunicación ante la situación de docencia presencial, online o mixta, en según qué grado de la educación reglada, etapas escolares, grados, másteres, cursos y seminarios
Técnicas y habilidades de docencia online: mensajes, lenguaje verbal, no verbal, gestual
De aplicación en el ámbito social, familiar, profesional, de los negocios y comercial
El experto y docente en habilidades de comunicación, Julio García Gómez, director de comunicación del Grupo Casaverde, ha difundido un manual rápido de técnicas de comunicación orientado a docentes en cualquier ámbito de la formación reglada universitaria, de los diferentes ciclos de la educación en colegios e institutos en todas las etapas, así como para profesores de preparación de oposiciones, Administración del Estado y otras instituciones.
En el ámbito presencial, con el uso de la mascarilla y la distancia de seguridad, es necesario, más que nunca, practicar la respiración diafragmática para oxigenar bien y que los mensajes se proyecten en los alumnos en el aula, y a la vez del alumno al profesor y entre los propios compañeros de clase. En el escenario online habrá que practicar esto, pero además hay que fijar el foco en otras cuestiones que potencien la formación a distancia.
El manual, que a continuación se desarrolla, pretende ser una guía rápida, urgente y práctica para dominar las técnicas de comunicación en esta situación especial que vivimos en nuestra sociedad donde las circunstancias sanitarias marcan unas normas para evitar el contacto físico, guardando la distancia de seguridad, y por ello se está desarrollando la educación a distancia que mantendrá su auge en el futuro haciéndose compatible con la presencial.
Puntos fuertes a potenciar en el docente. Estilo directo y cercano.
1.- El dominio de la materia que se imparte, exige que sean comprensibles los aspectos teóricos que se desarrollen.
2.- El manejo adecuado de la voz y la imagen nos dará juego para una comunicación versátil en el contacto presencial y online directo con los alumnos.
3.- Es necesario practicar un estilo de comunicación directo y cercano, lo que facilita la comunicación interpersonal y en las plataformas de la red.
4.- Hay que plantear, desarrollar, extractar y desmenuzar bien los contenidos, que se deben repetir en los mensajes para fijar conceptos en el auditorio/alumnado.
5.- Debemos utilizar un lenguaje coloquial reforzado por las palabras y términos técnicos que sean necesarios en cada materia. Formación amena.
Puntos débiles a mejorar
La voz y los mensajes
1.- Evitar monotonía en la voz. Es necesario que se amplíe la gama de registros para que la voz no sea tan “regular”. Es necesario elevar el tono en determinadas palabras que se deban remarcar en la exposición de las clases para llamar la atención de los alumnos.
2.- Destacar conceptos: Al igual que hacemos con las nociones que presentamos en clase, o en los textos que marcamos y destacamos con un rotulador fluorescente, la voz debe hacer ese juego de remarcar, de entonar y de elevar el tono en alguna palabra o frase para evitar la monotonía y llamar la atención de los alumnos.
3.- A veces hacemos frases demasiado largas. Hay que procurar hacer frases cortas con sentido, punto y seguido. De esta manera es más comprensible y fácil de asimilar el mensaje.
4.- Dar titulares que fijen la atención del alumnado. Es decir, al final de un párrafo o capítulo del temario a seguir, hacer a modo de un resumen en una sola frase que compendie lo más importante de todo lo tratado. Se debe resumir el párrafo para fijar conceptos e ideas. Frase/titular con lo más destacado a modo de titular periodístico. El titular no debe ser muy largo, debe tener unas 7 u 8 palabras como máximo. Sería algo así como un “subrayado” verbal del texto. Y en la medida de lo posible “persuadir” al alumno con puntos claves del tema de que se trate y despertar su interés por descubrir nuevos “mundos”.
5.- Fallos de respiración. A veces, nos quedamos sin aire porque no respiramos adecuadamente, y esto hace que haya una falta de aire al final de las frases y se pierda el final de las mismas. Normalmente se comienza en tono alto y vamos decreciendo el ritmo hasta apagarse la frase, porque no hay una buena ventilación. Si procuramos, con ejercicios que practiquemos, respirar con el diafragma, conseguiremos no perder la fuerza de las frases y dar un tono más contundente y firme a la voz.
La imagen que proyectamos
La cámara del ordenador es el ojo del alumno. En las clases online, donde todo el foco está en la pantalla, en la imagen del profesor en el texto que se expone, es preciso fijar una serie de detalles que en la medida de lo posible refuercen la comunicación entre el profesor y el alumno para dar el sentido de “clase” en persona en aula. Es más, al estar concentrada la mirada del alumno en la pantalla, si manejamos bien nuestra imagen, obtendremos más “complicidad” con el alumno.
Se observa a veces en la pantalla del ordenador, en la videoconferencia, que algunos docentes dirigen la mirada hacia abajo o al texto constantemente. Sería interesante que de vez en cuando miraran directamente al “espectador”, es decir a la cámara, para de esta manera implicar más a los alumnos. Al igual que en las clases presenciales, en que repartimos nuestra mirada entre ellos, aquí en online, es necesario que miremos a cámara de vez en cuando para que no quede tan fría la clase. Es lo que llamamos “seducir” al espectador, en términos de televisión. Y no deja de ser una emisión de televisión la clase que desarrollamos. La cámara de nuestro ordenador es el ojo del alumno.
Cuando miremos a cámara para dar una frase o idea, abramos bien los ojos, centrémonos delante de la cámara, elevando un poco el rostro por encima del objetivo de la cámara del ordenador unos centímetros. Procuremos que el lugar donde desarrollemos la sesión esté bien iluminado, que no haya contraluz de una ventana, y si es necesario reforzar con una lámpara portátil, hagámoslo. Nuestra imagen es importante para el alumnado, es necesario que se nos vea bien.
La interactividad profesor/alumno. El profesor como dinamizador del equipo
Soy partidario de que, en la medida de lo posible, haya interactividad entre el profesor y los alumnos. Es necesario que se propicien las preguntas durante la intervención o al final del tema. Cuesta a veces arrancar preguntas al alumnado, pero es fundamental que el profesor, con habilidad y destreza, pregunte al alumno e incite su capacidad de aprendizaje a través de la pregunta. De forma directa se puede preguntar a los alumnos sobre alguno de los conceptos. Si se conocen los nombres, se puede “nombrar” a alguno
de ellos para que aporten su visión de lo tratado y establecer una conversación amena con ellos. Sería interesante realizar una breve charla/coloquio al finalizar algún capítulo o fragmento de la clase del día.
Hay que tener en cuenta que el papel del profesor en este tipo de sesiones debe ser, además de docente, de dinamizador del equipo para que de esta manera los conceptos se fijen más en el alumnado.
El lenguaje no verbal/gestual. Las manos, la cabeza. Naturalidad ante la cámara.
El espacio al que nos enfrentamos en las clases online está muy limitado a una pantalla, la del ordenador, la tablet o el teléfono móvil, en un primer plano, ya que, si el profesor se aleja un poco de la cámara, para obtener un plano más abierto donde se puedan ver las manos, se pierde el sonido. Por tanto, vamos a limitarnos al primer plano, pero vamos a sacar rendimiento a los gestos y al movimiento de las manos en algún caso.
Ya que las manos quedan normalmente por debajo del plano del ordenador, si queremos reforzar un concepto o idea, podemos elevarlas y de esa manera nos ayudarán a dar más énfasis a una palabra o una frase. Las manos nos ayudan a remarcar el lenguaje verbal. En cuanto a la cabeza, debe permanecer erguida y evitar balanceos. Todo esto debe ser realizado con toda naturalidad y sin forzar nada.
Plan de acción de mejora. Consejos prácticos
Con todos estos elementos expuestos podemos trabajar por nuestra cuenta. Aconsejo grabar pequeñas simulaciones de clase delante de la cámara, visionar después, observar puntos fuertes y débiles y fijar un sencillo “plan de mejora” donde nos marquemos objetivos a corto plazo, que nos animen a seguir avanzando y mejorando. Practicar, practicar, practicar.
Propongo como plan de trabajo genérico, realizar unos ejercicios con la voz en tonos alto, medio y bajo en voz alta con una frase corta, para romper la monotonía del sonido que emitimos.
En cuanto a la imagen, recomiendo hacer alguna simulación delante del ordenador con la cámara conectada o en el teléfono móvil, si es más cómodo, para que pueda observarse bien: la mirada, los gestos en la cara, las manos. Elija un tema cualquiera a desarrollar y póngase delante del ordenador a explicar. Anote en un folio qué observa en pantalla, qué fallos o qué aciertos aprecia, a modo de autoevaluación.
Recomiendo que se puedan hacer algunos ejercicios para condensar la información, en los que se tome como ejemplo unas cuantas líneas del temario, cuatro o cinco, y se intente resumir esas líneas en una sola frase a modo de titular, y luego se grabe el audio.
Como pequeños trucos o recomendaciones técnicas, apuntamos colocar el ordenador o la tablet algo más elevado en la mesa, para que el plano nos coja un poco desde arriba y así se ofrezca una mejor perspectiva del rostro del profesor al alumno. Es decir, sería elevar el ordenador portátil o la pantalla en la parte de atrás con un par de libros, por ejemplo.
Hay que elegir un lugar de la casa que no sea ruidoso; se deben evitar los cristales de ventana cerca porque rechazan el sonido, mientras que las telas o cortinas lo amortiguan y ofrecen mejor acústica. Para el audio, puede venir bien, además del uso del micrófono del propio ordenador, utilizar un pequeño micrófono externo de pinza, para obtener una mayor calidad de sonido direccional. Y si es posible, colocarse auriculares para evitar retroalimentación y eco.
Estas pautas sencillas podrán servir al docente y a los alumnos para realizar con eficacia su comunicación presencial y online, y obtener buenos resultados de las clases que se desarrollen. La formación a distancia debe poner en marcha herramientas que sean de utilidad para el profesor y el alumno. Por ello, este manual podrá ser de utilidad también para el alumnado en sus intervenciones privadas o en grupo en las clases, ya que cuestiones como la voz, la imagen, la forma de presentarnos delante de la cámara, sirven para cualquier actividad comunicativa, no solo en la docencia sino en el ámbito profesional, los negocios, y en el ámbito personal y familiar.
Julio García Gómez es experto y docente de habilidades de comunicación, lenguaje verbal, no verbal, técnicas de manejo de la voz con la respiración, hablar en público con eficacia, la imagen delante de la cámara, vencer el miedo a hablar delante de la gente y técnicas de negociación. Imparte docencia en diversas universidades y centros, colabora en programas de televisión y desarrolla la comunicación institucional en la Fundación Casaverde y el Grupo Casaverde de hospitales y clínicas de rehabilitación funcional.
