Un atronador minuto de silencio, aplausos y el sonido de las sirenas que le acompañaron a lo largo de su vida. Así ha trascurrido el sentido homenaje que la Agrupación Municipal de Voluntarios de Protección Civil junto con otros cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, Bomberos, y sanitarios han rendido a quien fuera el jefe de la agrupación durante los últimos 21 años, José Luis Espadero, que ayer falleció a consecuencia de un paro cardiaco.
Su mujer, Maite, y sus dos hijos, Nerea y Miguel, han recibido de manos del Concejal de Seguridad, David Serrano, el uniforme de la agrupación de José Luis, y otros recuerdos, como una camisa con los nombres de sus compañeros de trabajo en el Hospital General de Ciudad Real. Visiblemente emocionada Maite, ha agradecido el sentido homenaje reconociendo que “allá donde esté él tiene que estar muy orgulloso de todos vosotros”.
Su hija, Nerea, afirmaba que “mi padre está dentro de vosotros; vuestro dolor es nuestro dolor y, por suerte, lo podremos recordar siempre”. El concejal de Seguridad se disculpaba por la sencillez del acto debido a las restricciones por la COVID-19, y se comprometía a dedicar a Espadero el homenaje “que se merece, en el Día de la Protección Civil, que él ayudó a impulsar y consolidó”
Tras el minuto de silencio en su memoria, seguido por un gran aplauso de reconocimiento de todos los presentes, las sirenas de las ambulancias y coches de policía y bomberos fueron las que sonaron en dirección al cielo por el “padre” de esta Agrupación de Voluntarios de Protección Civil. Tras el homenaje, una caravana de estos vehículos de emergencia se encargó de acompañar a la familia hasta su domicilio.
David Serrano, valoraba la intensa relación que ha mantenido con Espadero en estos seis años como Concejal de Seguridad. “Ha sido un mazazo muy grande. La Agrupación queda huérfana porque son muchos años. Raro es el voluntario que no haya entrado siendo él el jefe de la Agrupación. Aunque muchos le decían el “padre”. Era un padre para todos los voluntarios y voluntarias. Es un mazazo muy duro, pero la agrupación, con su ejemplo, debe seguir adelante”.
