El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha destacado, en el foro del Congreso Nacional de Medio Ambiente en Toledo, que las desaladoras construidas son “la fuente razonable y eficiente del recurso agua para el regadío en el Levante”, pidiendo su total funcionamiento al mismo tiempo que el agua que pasa por la región “nos ayude a generar desarrollo económico en Castilla-La Mancha”.
Martínez Arroyo ha manifestado también la importancia que tiene para el medio rural el medio ambiente, como una de las “potencialidades de futuro”, como “motor de desarrollo”, destacando la importancia de la educación medioambiental de los ciudadanos del futuro.
El Gobierno de Castilla-La Mancha, a través de Francisco Martínez Arroyo,consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, ha trasladado públicamente la necesidad de que se tenga en cuenta el caudal ecológico del río Tajo en este periodo de planificación hidrológica, algo que es “imprescindible”, al mismo tiempo que se priorice a la cuenca cedente frente a la cuenca receptora ante el trasvase de agua al Levante, tal y como indica la Ley tras la sentencia favorable del Tribunal Supremo.
El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural ha participado esta mañana en la apertura del XIV Congreso Nacional de Medio Ambiente, CONAMA, un congreso bianual que se desarrolla desde 1992, que este año se celebra en Toledo durante dos días y medio bajo el lema ‘Campo y Ciudad. Agenda Global’, en un acto en la Escuela de Administración Regional en la que han estado presentes la directora de CONAMA, Alicia Torrego y el presidente de la Fundación, Gonzalo Echagüe, así como el presidente de la Diputación de Toledo, Álvaro Gutiérrez; la alcaldesa de la capital regional, Milagros Tolón y el secretario de Estado de Medio Ambiente del Ministerio para la Transición Ecológica, Hugo Morán.
Martínez Arroyo, ha indicado, en una ciudad simbólica donde el río presenta a diario el mal estado medioambiental en el que se encuentra, que mientras se celebra en otras comunidades los 40 años del trasvase, desde Castilla-La Mancha no se va a parar de decir que “hemos sido la región más solidaria”, pero que los ciudadanos junto con el Gobierno están “defendiendo sus intereses” en materia hídrica, ya que “el agua es medio ambiente y es vida”.
Así ha dicho, que es bueno reiterar este compromiso desde la solidaridad, “desde la región más solidaria; la única desde la que el agua se va para generar riqueza en otro lado”.
Es por ello que ha reclamado que se pongan en pleno funcionamiento las desaladoras construidas con el dinero “de todos” en el Levante, que son “la fuente razonable y eficiente del recurso agua para el regadío” en esta zona de España, al mismo tiempo que ha reiterado la necesidad de que el agua que pasa por la región, “nos ayude a generar desarrollo económico en Castilla-La Mancha”.
En este foro, ha recordado la reciente presentación en Bruselas por el Gobierno regional del documento técnico realizado por la Consejería donde se pone de manifiesto la pérdida de biodiversidad en las riberas del Tajo porque los caudales ecológicos a su paso por Toledo o Talavera son “insuficientes”.
Y es que solo hay que tener una imágenes aéreas de río en la cual, ha recordado, se ve cómo el Jarama, el afluente del Tajo, “ya no parece afluente, sino el río principal”.
Así ha abogado por un compromiso en la depuración necesario de todas las partes implicadas, como el existente en la región, informando que hoy mismo el Consejo de Gobierno de la región ha aprobado 102,5 millones de euros para 238 depuradoras en Castilla-La Mancha.
Y es que se tiene que cerrar el círculo “virtuoso” del río con la depuración y la reutilización del agua, como cada día se demuestra en la región donde ya se utiliza en la agricultura, en una comunidad donde el 70 por ciento de la superficie regada localizada lo es por goteo, siendo el porcentaje más alto de todo nuestro país.
El medio ambiente como motor de desarrollo en el medio rural
Además, en este evento, Martínez Arroyo, ha trasmitido la importancia y la relación del medio ambiente con el desarrollo rural, destacando que es un “motor de desarrollo” y abogando por las fórmulas para garantizarlo.
En este sentido, ha destacado que uno de los mayores retos a los que se enfrenta la sociedad es el cambio climático y en esta lucha emprendida a nivel nacional y en particular desde Castilla-La Mancha hay que convencer a los más jóvenes, “los niños y niñas de hoy que serán los ciudadanos y consumidores del mañana”, para que sean conscientes de la importancia que tienen en sus vidas un cambio de modelo del lineal al circular, como se está haciendo actualmente a través de la educación ambiental.
Además, ha puesto de manifiesto en este sentido, Castilla-La Mancha ya ha dado los pasos para pasar de un modelo “insostenible” basado principalmente en energías fósiles o la energía nuclear, a un modelo contrapuesto, apoyado en energías renovables donde la región, en ya líder, generando más energías renovables que toda la energía eléctrica que necesitamos en la región, “siendo autosuficientes a través de energías como la fotovoltaica y eólica”.
Premios a la sostenibilidad de pequeños y medianos municipios
La sesión de apertura de este congreso ha servido, asimismo, para hacer entrega de los ‘Premios CONAMA a la Sostenibilidad de Pequeños y Medianos Municipios’, galardones que se entregan desde el año 2008 y con los que se distingue a los mejores proyectos ambientales llevados a cabo en municipios españoles de menos de 30.000 habitantes.
En esta edición, han recaído en los ayuntamientos de Illescas (Toledo), en el apartado de municipios entre 5.000 y 30.000 habitantes por la puesta en marcha de un polígono industrial construido con altos estándares de sostenibilidad, la plataforma central Iberum, premio entregado al alcalde de la localidad, José Manuel Tofiño, por parte del consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural; y Becerril de Campos (Palencia), en la categoría de menos de 5.000 habitantes por un proyecto centrado en el ecoturismo astronómico restaurando una iglesia románica en ruinas, entregado por Hugo Morán y recogido por su alcalde, Mario Granda. Además se han entregado de los accésits a los municipios de Soto del Real (Madrid) y Legarda (Navarra).
Para el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural estos premios son muestra del “compromiso” del municipalismo de todo el país, de municipios que están tirando del carro desde la administración más cerca al ciudadano ante el reto del cambio climático, “en el que todos estamos implicados”.
Así, se ha mostrado convencido de que “si sabemos lo que debemos hacer poniendo en primer lugar la prioridad del medio ambiente, conseguiremos ganar batalla cambio climático que hoy está en nuestros días”, ha finalizado.
