El presidente de la Diputación de Cuenca se ha desplazado este sábado hasta la localidad serrana con el fin de inaugurar oficialmente la rehabilitación de esta fortaleza, en la que la institución provincial ha invertido en una primera fase un total de 190.000 euros
“Hablar de castillos en La Serranía Alta conquense era casi impensable hasta la actuación de Diputación en el castillo de Beteta”. De esta manera, se ha pronunciado el presidente de la Diputación de Cuenca, Benjamín Prieto, durante su estancia en la localidad serrana con el fin de inaugurar oficialmente la rehabilitación de esta fortaleza, en la que la institución provincial ha invertido en una primera fase un total de 190.000 euros. Actuación enmarcada dentro del Plan de Rehabilitación, Conservación y Protección del Patrimonio, que contempla 36 intervenciones con un presupuesto total de 5,4 millones de euros.
Prieto, que ha estado acompañado, entre otros, por Javier Parrilla, diputado de Fomento, y Abel Cava, alcalde de Beteta, ha recalcado la relevancia de esta actuación de consolidación y restauración, porque no solo ha impedido que este castillo se haya perdido de manera irremediable por el avanzado estado de deterioro de sus muros y estructura, sino que, además, ha permitido que Beteta cuente con un reclamo más para el visitante, incrementando, sin lugar a dudas, su atractivo turístico, marcado sobre todo por su gran riqueza natural y paisajística, que ahora se ve reforzada con este elemento fortificado.
Es por ello que no sea de extrañar que haya defendido esta apuesta de la Diputación por la recuperación del patrimonio como instrumento dinamizador de la economía local de nuestros pueblos en torno al sector turístico y a la que ha destinado en los últimos ocho años más de 20 millones de euros en más de ochenta actuaciones a lo largo y ancho de la provincia.
Pero este especial interés de la Diputación por el patrimonio de Beteta y su gran potencial turístico no se ha quedado solamente ahí. Y es que, tal y como ha recordado Prieto, hace poco más de una semana que rubricaba con la Universidad de Castilla-La Mancha un protocolo de colaboración, en el que se ha incluido un proyecto de investigación denominado Valorización y Promoción Turística del Patrimonio Cultural de Beteta, que cuenta con un presupuesto de 40.000 euros, financiados al 50 por ciento entre la Diputación y el Ayuntamiento de Beteta.
Una investigación centrada inicialmente en el castillo de Rochafría, con un estudio exhaustivo de esta fortaleza desde su origen celtíbero hasta su remodelación durante las guerras carlistas. Un proyecto que, a su juicio, está llamado a convertirse en la excusa perfecta para unir patrimonio arqueológico con patrimonio natural y cultural, que debe de convertirse en una oferta turística muy atractiva con la que se propicie el desarrollo de la economía local de esta bella zona de la provincia.
Es por ello que el presidente de la Diputación no ha querido pasar por alto el revés sufrido por el Ayuntamiento de Beteta de la mano de la Junta de Comunidades. Y es que, desde su punto de vista, no es de recibo que el Gobierno de García-Page haya denegado fondos comunitarios al Consistorio serrano desestimando el proyecto de continuación de la rehabilitación del castillo de Rochafría por un importe de 562.000 euros, con el que había concurrido a la convocatoria de expresiones de interés relativa a la promoción, mejora e incremento de los recursos turísticos por las entidades locales.
Y es que, tal y como ha remarcado, no se ha atendido esta demanda de ayuda, a pesar de que Beteta se encuentra ubicada en una de las zonas de la provincia más castigadas por la despoblación y, en consecuencia, enclave prioritario para este tipo de fondos comunitarios. Pero, en su opinión, está visto que al Ejecutivo de García-Page le mueven otros intereses que nada tienen que ver con el desarrollo de esta provincia; algo que queda más que demostrado con la gestión “sin cautela ni diligencia” que viene realizando de estos fondos del Programa Operativo FEDER Castilla-La Mancha 2014-2020.
Así las cosas, no es de extrañar que Prieto haya mostrado la voluntad de la Diputación por continuar apostando por el patrimonio de la provincia y, en concreto, colaborando con el Ayuntamiento de Beteta para proseguir con la recuperación de esta fortaleza, que jugó un destacado papel en las últimas guerras carlistas y, en consecuencia, en la historia de esta provincia y, como no, de este país. Castillo que, a su juicio, aún puede hacer mucho por Beteta y sus habitantes.