Cerca de 600 corredores se dieron cita el pasado 4 de noviembre en esta prueba solidaria que permitirá apoyar la labor de esta Fundación dedicada a atender a niños autistas
La III Carrera solidaria Mizu a favor de Apanag, prueba en la que participaron cerca de 600 personas el pasado 4 de noviembre en Guadalajara, ha logrado recaudar 9.754 euros, que irán destinados íntegramente a apoyar a dicha Fundación, dedicada a la atención de niños y jóvenes con trastorno del espectro autista.
“Estamos muy contentos porque la ayuda que Mizu nos ha ofrecido ha sido maravillosa y gracias a ella hemos podido empezar con el patio del colegio, que era arena y piedras, y convertirlo en un área adaptada en el que puedan disfrutar los pequeños y que esperamos tener listo pronto”, ha señalado Noelia Molina, miembro de la junta directiva de APANAG, durante el acto de entrega del cheque con el importe final recaudado por parte de Irene Inés, gerente de Balneario Mizu.
“Desde Balneario Mizu estamos encantados en colaborar con asociaciones como Apanag que realizan una labor tan importante”, ha señalado Irene Inés, a quien Noelia califica de “gran madrina” de Apanag, y que afirma que “nuestra intención es poder impulsar más eventos solidarios para seguir apoyándoles en el futuro”.
Tanto Molina como Inés han dado las gracias a los cerca de 600 participantes, entre mayores y pequeños, que disfrutaron de este evento deportivo, lúdico y solidario que tuvo lugar el pasado mes de noviembre y que se ha convertido ya en una cita fija en el calendario deportivo de la capital alcarreña.
Actualmente, el centro de Apanag cuenta con un aula concertada de forma extraordinaria con 6 alumnos, de 6 a 9 años. Además, más de una docena de personas trabajan en Apanag, dos de ellas autistas que trabajan como inserción laboral realizando labores de conserjería e informática. “Es algo maravilloso porque podemos dar así oportunidad a los propios chicos con autismo”, destaca Noelia Molina.
“La idea de Apanag desde el origen es hacer un proyecto de vida para cualquier persona que tenga autismo, desde pequeño hasta mayor”, afirma Molina, quien señala que “nuestro fin ahora es poder concertar todo el colegio, conseguir abrir las cuatro aulas, que tienen una ratio máxima de 25 alumnos en cada una de ellas y, por otro lado, poder abrir el centro de día”.
Para ello, actualmente están en negociaciones con la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, con Educación y Bienestar Social. “Sabremos algo más del concierto a partir de Semana Santa, que es cuando nos informan de lo que se nos ha concedido y esperamos empezar el curso con más plazas, porque hay unos 18 padres esperando a que sus hijos entren”, ha agregado.
Molina señala que “el objetivo es que el centro de día cubra a 25 personas con autismo, todos ellos mayores de 18 años, ya que uno de los principales problemas de las personas autistas es cuando llegan a esa edad; mucho se quedan en casa, con lo que implica eso para una familia”.
Esta responsable de Apanag y madre de un niño con autismo recuerda que en la asociación son 90 los niños y que su objetivo es lograr la mayor integración e inclusión en los colegios. “Pero los niños que aquí vienen necesitan este colegio porque en el ordinario no pueden estar y el centro de educación especial existente en Guadalajara no da cobertura a todas las discapacidades”, a lo que se suma que “estos niños funcionan con una metodología muy concreta y trabajar con ella es muy positivo para ellos”.
Por último, los organizadores han recordado que este evento fue posible gracias al patrocinio de Hocensa y Jesthisa, a la que se suman cerca de 40 empresas e instituciones colaboradoras como el Ayuntamiento de Guadalajara y Diputación provincial.
