Dirigida por el valenciano Pascual Suñer, sus cuarenta integrantes interpretaron anoche un concierto excepcional que llega siempre en el momento más dulce de la Banda, una vez que terminan los ensayos del año. En el recital, hicieron un recorrido por músicas de película, pasodobles y zarzuelas, que terminó, naturalmente, con el himno de Pastrana.
En la Plaza del Deán, a la vera de la sede donde los pastraneros aprenden música desde hace casi treinta años, concretamente 29, y donde habitualmente se llevan a cabo las audiciones en las que la Villa Ducal admira los progresos de los alumnos, en el Convento de San Francisco, anoche tenía lugar el Concierto de Verano de la Banda de Música de Pastrana (Guadalajara), que dirige, con tanto talento musical como personal, Pascual Suñer.
Según explicaba ayer el valenciano poco antes de coger la batuta, julio es el momento del año en el que la formación que dirige está en su momento más dulce, puesto que los estudiantes han terminado sus exámenes, y tienen más tiempo para dedicarle a la música, y, además de haber culminado el año de ensayos, la banda ha hecho un esfuerzo extraordinario en el Festival Ducal, lo que siempre hace que sus cuarenta integrantes vayan un paso más allá en sus actuaciones y deleiten a sus paisanos con una excelente actuación, como ocurrió anoche.
El concierto lo presentó Leticia Roldán. La trompetista recordó que la actuación es uno de los actos previos que aparece en el programa de las ya próximas fiestas que Pastrana celebra en honor a la Virgen de la Asunción. Todos los presentes, que llenaban el patio de la Plaza del Deán, pudieron seguirlo con los programas de mano que se repartieron a la entrada del concierto.
Pasadas las diez de la noche, con una magnífica temperatura en La Alcarria pastranera y una preciosa noche estrellada como telón de fondo, Suñer daba comienzo al concierto, como no, con un pasodoble, ‘Opera Flamenca’, de Luis Araque Sánchez. A continuación, y como hace siempre en este recital, la Banda desplegó un repertorio amplio, en el que llevan trabajando todo el año. Incluyó músicas de película, zarzuela, poemas sinfónicos, y para cerrarlo, naturalmente, el himno de Pastrana, un pasodoble compuesto por José Escobar Flores en el año 1990. Con su simpatía habitual, Suñer invitó a los presentes a cantarlo junto a la banda: “Viva Pastrana, pueblo de historia/De hombres valientes y bellas mozas/A ti cantamos, dulce panal/Flor de La Alcarria, pueblo inmortal/ Viva Pastrana, honor y gloria/ Arte y belleza, tiene tu historia/ Todos te aclaman, noble y leal/ Eres de Alcarria, grandeza y paz”.
De entre la selección de piezas incluidas, Suñer reconocía anoche que “la que más nos ha costado sacar ha sido el poema lírico ‘Una noche en Granada’, que lleva dos solos de trombón, con muchísimas notas para la madera…”. Sonó admirablemente. Antes de dar paso a los bises que despidieron el concierto, el director recordó que la Banda es una formación de Pastrana, abierta musicalmente a quien quiera formar parte de ella, independientemente de su edad, y dio las gracias a sus músicos, al Ayuntamiento de Pastrana por su apoyo, y a la Villa Ducal, “por seguirnos siempre”. Presentes en el concierto estuvieron el alcalde de Pastrana, Ignacio Ranera, y el subdelegado del Gobierno en Guadalajara, Juan Pablo Sánchez, entre otras personalidades.
