Las tres pedanías trillanas celebraron actos religiosos, populares y lúdicos, en una festividad de gran arraigo y tradición
Tras duros meses de frío invierno y una primavera de mucho trabajo, San Antonio solía marcar el fin de las labores en el campo y el inicio del merecido descanso. Así solía ser la vida antiguamente en muchos pequeños pueblos alcarreños y es por ello que la festividad de San Antonio, cuya efeméride se celebra el 13 de junio, cuenta con un seguimiento y una tradición de enorme arraigo en Viana de Mondéjar, La Puerta y Azañón. Las tres pedanías trillanas vivieron una jornada de fiesta con motivo de esta festividad, que aúna actos religiosos, lúdicos y populares.
La primera en comenzar con los festejos fue Viana, donde la misa en honor al santo, que en su caso es también patrón del municipio, empezaba a las 12.00 horas y en medio de un intenso calor que también protagonizó, en parte, la posterior procesión y subasta de ramos. El aperitivo, cortesía del Ayuntamiento de Trillo, ayudó a refrescar a los vianeros para que continuaran con su jornada festiva, una celebración que gusta mucho en el municipio y que es seguida y esperada por sus vecinos, que se multiplican en este señalado día. Ya por la tarde, los niños pudieron divertirse con las actividades infantiles preparadas para ellos –un castillo hinchable, un rocódromo, un minigolf, etc.- y, un poco más tarde, se llevó a cabo el tradicional reparto de tostones y vino en el frontón. La jornada terminó con una cena en hermandad servida también en el frontón de la localidad y un grupo de música, Syberia, que dio por concluida la festividad.
Las altas temperaturas también acompañaron los festejos en Azañón, donde la misa por San Antonio daba inicio poco después, hacia las 13.30 horas. Pasadas las dos de la tarde, la imagen del santo salía en procesión por las calles del pueblo, acompañada por vecinos, fieles y por un grupo de músicos procedente de Sigüenza, los Dulzaineros de la Travesaña. La comitiva hizo parada en la plaza Mayor, donde se llevó a cabo la tradicional subasta de las andas de la imagen y los ramos. Terminada ésta, los ganadores de la misma tomaron sitio en sus palos para devolver a San Antonio al fresco de la iglesia parroquial de la pedanía trillana.
En su caso, la subasta de roscos suele realizarse por la tarde. El objetivo de la misma es obtener fondos para colaborar con el mantenimiento de la parroquia. En total, se subastaron más de una veintena de roscos que todos los vecinos compartieron posteriormente junto a un vino dulce que dio por terminados estos festejos de honda tradición en Azañón.
Por último, en La Puerta se celebra San Antonio con una misa que comenzó a las 18.00 horas. En el caso de esta pedanía trillana, la subasta de andas precede a la procesión, pues en ella se ponen en juego las andas para el traslado de la imagen durante la citada procesión. De este modo, se realizó nada más sacar al santo de la bonita parroquia de La Puerta. Una vez adjudicados los palos, comenzó la breve procesión, que transitó junto a un tramo del arroyo Solana, para volver sobre sus pasos nuevamente hasta la parroquia, en cuyas puertas volvió a celebrarse una subasta de andas con el objetivo de dilucidar qué fieles serían los encargados de introducir de nuevo a San Antonio hasta su lugar dentro de la iglesia.
Concluido el acto religioso, los vecinos de La Puerta se congregaron alrededor del centro social, donde se preparaba, como es tradición, una merienda-cena a la que estaban todos invitados. No faltó el equipo de Gobierno al completo, con Lorena Álvarez, alcaldesa, a la cabeza, acompañada por Beatriz González –alcadesa pedánea, además, de La Puerta- Miriam Batanero, Beatriz Muñoz y Marta Pérez, que estuvieron presentes también en las celebraciones religiosas de las tres pedanías, ofreciendo su apoyo y reconocimiento a esta festividad tan importante para Viana, Azañón y La Puerta. El reparto de tostones y la subasta del fondo de la iglesia, otra de las tradiciones de esta fecha –solía quedárselo el vecino que mayores necesidades tenía ese año y hoy ha quedado como algo simbólico-, también dieron por finalizadas, un año más, las celebraciones en La Puerta.
