La localidad de Quintanar de la Orden (Toledo) ha celebrado este fin de semana la fiesta de la “Subida” como se conoce popularmente a esta procesión de la patrona La Virgen de la Piedad que toma todo el protagonismo.
Tras tres años en un formato diferente que respetaba las tradiciones que configuran esta fiesta popular y tras diversos vaivenes con los nuevos estatutos los quintanareños no han acompañado esta edición masivamente a su patrona en la recuperación del formato anterior a estas tres ediciones anteriores, pero como en todo, la diversidad de opiniones sirve que para que a unos haya sido masiva la afluencia de público y para otros ha estado muy por debajo de años anteriores y descafeinada.
Así una vez más, los devotos fieles a su patrona la Virgen de la Piedad han acompañado en procesión hasta la ermita de la aparición lugar donde fue hallada hace ya más de 650 años. Se trata de la conocida como fiesta de la Subida de la Virgen que cada año se celebra coincidiendo con la festividad de Pentecostés.
Los actos dieron comienzo la noche del sábado, 3 de junio, con la celebración del traslado de la imagen de la patrona desde la ermita de la Piedad hasta el templo parroquial acompañada de los miembros de la Mayordomía al completo, autoridades locales, civiles y religiosas, así como Reina y Damas de las Fiestas, y vecinos y vecinas de la localidad.
Posteriormente, los actos se trasladaban a la explanada de la ermita de la aparición donde tenía lugar una popular verbena, que quizás por lo fresquito de la noche no tuvo una gran afluencia de público y que concluyó con una chocolatada para los allí presentes.
Ayer domingo, 4 de junio, quintanareños y quintanareñas se preparaban para venerar a la Virgen de la Piedad. Así la Banda Sinfónica Municipal dirigida por Sebastián Heras Romero, entonaba las primeras notas musicales en honor a la patrona.
Desde las Puertas del Ayuntamiento, la comitiva se trasladó hacia el Templo Parroquial para celebrar la Eucaristía que estuvo a cargo del párroco de Dosbarrios, Jesús Guzmán Pedraza y amenizada por el coro “San Cosme y San Damián”.
Ya por la tarde tenía lugar la esperada procesión con la imagen de la patrona portada en andas, a diferencia con la procesión de agosto que la patrona procesiona en carroza. Como es característico, abrían la procesión los niños y niñas que han recibido este año la Primera Comunión. Después, La Mayordoma Mayor, precedía a la imagen de la Virgen que recorrió las calles de la localidad bajo la atenta mirada de cientos de vecinos y vecinas de la población.
Por último, tras la imagen de la Virgen, que lucía el Manto del Cólera, iban las autoridades religiosas y el alcalde junto con concejales de la Corporación Municipal, cerrando la procesión la Banda Sinfónica Municipal.