Hasta 200 personas entre el grupo vocal y orquestal y más de 800 espectadores pusieron el broche de oro a la celebración de los 20 años de Cuenca como Ciudad Patrimonio de la Humanidad
Los actos de la celebración del XX Aniversario de Cuenca como ciudad Patrimonio de la Humanidad finalizaron este sábado un broche de oro. El motivo fue la interpretación por parte del Orfeón y la Escolanía Ciudad de Cuenca de la Novena Sinfonía del compositor Ludwing van Beethoven.
La interpretación se desarrolló en el Teatro Auditorio de la capital que colgó el cartel de ocupado en las casi 800 localidades. Allí pudieron disfrutar de las voces y la orquesta que estaban compuestas por en torno a 200 personas. La encargada de llevar a cabo la interpretación fue la agrupación ‘Proyecto 20.21’, creada ad hoc para la cita e integrada por intérpretes de Cuenca.
La dirección coral corrió a cargo de Carlos Lozano mientras que la musical fue tarea de Ignacio Yepes, uno de los directores españoles más sobresalientes de su generación.
Antes del concierto se hizo un pequeño homenaje tanto a las personas que colaboraron en su día para que Cuenca consiguiera la distinción de Patrimonio de la Humanidad, así como a las empresas que han colaborado en la celebración de este XX Aniversario. “Era casi un deber moral este agradecimiento público porque gracias a esta ayuda hemos podido celebrar ciento de actividades a las que han acudido miles de personas”, ha declarado Pedro Mombiedro, gerente de la Fundación Cultura Ciudad de Cuenca.
También se entregaron dos reconocimientos. El primero de ellos fue ‘in memorian’ a Rafael Araque, unos de los responsables que impulsó candidatura de Cuenca a Ciudad Patrimonio de la Humanidad en 1988. El premio lo recogió su viuda. Mari Paz Marlo, embajadora gastronómica de Cuenca 2016, fue la segunda reconocida previo a este acto.
Sobre la Novena Sinfonía de Beethoven, Mombiedro ha destacado que la intervención “nos puso los pelos de punta, y ha sido un placer poder ver a tantos conquenses en ese esfuerzo por poner en valor nuestro patrimonio y lo que somos y queremos ser”.
Ángel Mariscal, alcalde de Cuenca, ha destacado que los más de mil espectadores “estuvieran aplaudiendo durante minutos esta interpretación de la Novena Sinfonía de Beethoven llevada a cabo por el Orfeón y la Escolanía Ciudad de Cuenca junto a una orquesta”. Este acto ha cerrado una serie de eventos que según el propio Mariscal “han mostrado al mundo que somos una ciudad que somos una ciudad Patrimonio de la Naturaleza y cultura que nunca”.
Además, ha añadido que este 2016 ha estado repleto de noticias y eventos importantes para Cuenca “más que nunca” y que durante el próximo año “se seguirá promocionando Cuenca y nuestro patrimonio histórico, natural y cultural”. “Habrá muchos eventos de primer orden que darán a la capital proyección internacional y de prestigio”, ha finalizado el primer edil conquense.
Entre los asistentes destacaron Rafael Catalá, ministro de Justicia y diputado del Congreso por la provincia de Cuenca; Julián Huete, vicepresidente de la Diputación de Cuenca, y Marta Segarra, concejal de Cultura del Ayuntamiento de Cuenca.