Se entregaron los premios a su creador, Ramón González y también a Ramón Sampedro, Tomás Casero, Fundación Cadisla y Jesús Morales en los diferentes ámbitos
En un Teatro Municipal que llenó su patio de butacas, ayer tuvo lugar uno de los actos más importantes de la Feria y Fiestas de Tomelloso (Ciudad Real) que ayer martes llegaron n a su fin. Fue la entrega de los premios Viñadores 2016 que la ciudad entrega a empresas, instituciones y particulares que destacan en los ámbitos de agricultura, acción social, empresas y cultura.
La de ayer fue una noche especial. Fue la XX Edición de la entrega de estos reconocimientos, por lo que resultó un acto brillante y solemne el protagonizado por los premiados y sus padrinos. El acto contó con la presencia de Patricia Franco, consejera de Economía, y numerosas autoridades locales, provinciales y nacionales. Sus protagonistas fueron, Ramón González, Viñador de Honor y también Ramón Sampedro, Tomás Casero, Fundación Cadisla y Jesús Morales en los diferentes ámbitos.
Inmaculada Jiménez, alcaldesa de la ciudad, agradeció la presencia de Patricia Franco para poner de manifiesto el apoyo del Gobierno regional con Tomelloso y también como madrina del viñador en el ámbito de acción social. Los Viñadores en esta ciudad, recordó, tienen una larga tradición e importancia, por lo que felicitó a todos ellos por su importante papel que desempeñan en los distintos sectores y en la sociedad de Tomelloso.
Este año ha sido una celebración especial por cumplirse esta 20 edición para lo cual se ha cambiado el escenario desde el auditorio López Torres al Teatro Municipal y se ha invitado a todos aquellos que han sido protagonista en estas distinciones durante las dos últimas décadas. La alcaldesa reconoció el honor que supone presentar y entregar la distinción de Viñador de Honor a Ramón González, una persona que fue un buen alcalde de Tomelloso y el padre de estos viñadores hace 20 años que para Jiménez, merece este reconocimiento.
Ramón González se mostró muy agradecido a la actual Corporación Municipal y a todos los que formaron parte de aquella que presidió desde 1995 a 1999. El flamante Viñador de Honor, muy aplaudido en diversas fases de su alocución, habló de Tomelloso, 
de sus logros, de sus gentes y de sus empresas. También habló de política para poner de manifiesto la importancia que tiene a nivel local al ser la más cercana al ciudadano.
Tras agradecer a la alcaldesa que se haya acordado de su persona para esta distinción, reconoció que su único mérito fue la creación de estos títulos y la suerte que ha supuesto que hayan crecido y que se entreguen año tras año a personas, instituciones y empresas de Tomelloso que tienen la excelencia como lema en su forma de trabajo.
Por su parte, la consejera de Empleo, mostró su satisfacción y agradecimiento por tener la oportunidad de participar en esta entrega de premios que reconocen una trayectoria ejemplar y que este año además reconoce la figura de su creador. Como madrina de la Fundación Cadisla, explicó que se trata de un proyecto que supone una apuesta firme y decidida por la mejora de la empleabilidad de las personas con discapacidad, un objetivo compartido por el Gobierno regional con Cadisla y otros centros especiales de empleo que realizan una labor encomiable en la inserción laboral y la formación de las personas con discapacidad. Son en total 90 en la región, recordó, y dan trabajo a más de 3.000 personas.
La consejera anunció que en lo que queda de año se pondrán en marcha los centros de atención de apoyo a los centros especiales de empleo y un registró de éstos que no existe y que se considera necesario para llevar un control de los centros que trabajan en esta importante labor.
El acto fue magníficamente presentado por Ángela Lozano. La nota musical, magistral, la pusieron Marieli Blanco, Alberto Palomino y Arturo Rodríguez, que estuvieron acompañados por los sopranos José Ángel Treviño y Alicia Hervás.
Actuaron como padrinos de los premiados, además de la consejera y la alcaldesa, Rafael Torres, José Manuel Sampedro y Bernardo Castillo.
