Durante la entrega de los sorteos y los regalos solidarios, la alcaldesa dijo que “es un evento que hace grande a Tomelloso”
La sala Francisco Carretero del Ayuntamiento ha acogido la entrega esta mañana de los premios sorteados durante el guateque que organiza los veranos la peña Los Canuthis, así como los regalos solidarios de 1.500 euros cada uno que este año han sido para Cáritas y la AECC. Las representantes de estas entidades, Teresa Requena y Amalia Martín se han mostrado muy agradecidas a Los Canuthis y a través de ellos a todo el pueblo de Tomelloso por su generosidad al acordarse de los más necesitados.
También inmaculada Jiménez, alcaldesa de la ciudad, ha felicitado a esta popular y simpática peña “por seguir regalando sueños” solidaridad. Según destacó, de un acto lúdico y festivo como es este Guateque tan esperado el celebrado el primer sábado de agosto, Los Canuthis han acertado al destinar una parte importante de sus ingresos a los más necesitados, un gesto que como alcaldesa le hace sentirse agradecida y muy orgullosa.
El Ayuntamiento, confirmó la alcaldesa, seguirá apoyando iniciativas como estas a la que se refirió como un evento que hace grande a Tomelloso, por lo que en breve, se van a iniciar los trabajos para que el año que viene este guateque “vuelva a ser el más grande del mundo”. En este sentido, Jiménez tendió la mano del Ayuntamiento para que el evento continúe y que esta peña siga llevando con orgullo el nombre de Tomelloso por todos los lugares que visitan.
El representante de Los Canuthis, Lorenzo Navarro, agradeció al Ayuntamiento y a todo el pueblo de Tomelloso su implicación con este evento social y solidario. Si bien reconoció que la participación ha sido menor que en otras ediciones, su carácter solidario y el apoyo del Ayuntamiento garantizan que el guateque se vaya a seguir celebrando. También quiso incidir y destacar Navarro en el hecho de que no se produjera ningún solo incidente desde las 10 de la mañana que comenzó la actividad con el encuentro de vehículos clásicos hasta las 7 de la mañana del domingo cuando los últimos participantes abandonaron los Jardines del Parque. Fue en definitiva, celebró Navarro, otra noche mágica, alegre y muy divertida.
