Tras un lamentable accidente de tráfico que terminó con la estatua por los suelos.
La estatua del ilustre tomellosero Francisco Martínez Ramírez, “El Obrero de Tomelloso” ya descansa en su ubicación habitual en la rotonda de las calles Don Víctor y García Pavón.
Esta mañana, en presencia del escultor Luis García Rodríguez, se ha colocado la estatua tras haber sido sometida a un proceso de restauración como consecuencia de un lamentable accidente de tráfico que terminó con la estatua por los suelos.
Carlos Cotillas, alcalde de la ciudad, y varios miembros del Equipo de Gobierno tomellosero han supervisado un proceso que finalizará mañana con la renovación del jardín que rodea el conjunto artístico.
En el mismo proceso de restauración de la pieza se ha corregido los desperfectos de la fundición que data del año 1974, asimismo las uniones de soldadura.
Las obras de acondicionamiento también han incluido la modificación de la base de bronce aumentando en unos centímetros la altura y se ha dotado de más fuerza y seguridad el anclaje de la peana con el pedestal, además de dar una pátina completa a toda la figura para que luzca en todo su esplendor. La orientación del conjunto no ha variado ya que se ha trabajado sobre la base anterior y se ha grabado el escudo de Tomelloso en la parte posterior del pedestal.