La noche del jueves se celebraba, como es tradicional, la Procesión de los Azotes también conocida como la del Escándalo, en la que participan todas las Cofradías de la localidad quintanareña.
En la madrugada del Viernes Santo, antes de ponerse el sol, la imagen de Jesús Nazareno se prepara para salir en andas del Templo Parroquial para recorrer singulares callejuelas en la llamada Procesión de La Campaná donde es acompañado por el sonido de las campanillas que hacen sonar los nazarenos.
Tras la Procesión de La Campaná ha tenido lugar la Procesión de Los Pasos que muestra momentos claves de la Pasión de Cristo, desde la Sentencia de Pilatos hasta su Crucifixión.
La noche del Viernes Santo se celebraba la Procesión del Silencio también conocida como la del Santo Entierro, la más solemne y respetuosa de todas las procesiones que se vienen celebrando desde hace unos días en la localidad.
La Semana Santa de Quintanar de la Orden, declarada de Interés Turístico Regional desde el año 2007, contaba desde el primer día con una gran acogida por parte de los quintanareños y quintanareñas que han salido a las calles para disfrutar de cada una de las procesiones que se celebran en la localidad.
Jueves Santo
Las calles de la localidad se llenaron de gente que no se quiso perder la procesión de los Azotes que partía las 20.30 horas desde la Plaza de la Constitución.
Diez Cofradías acompañadas de sus respectivas Bandas de Cornetas y Tambores y agrupaciones musicales, mostraban ante la ciudadanía un año más los diferentes pasos portados en andas y que un año más, han podido salir a la calle. Abriendo la procesión la Cofradía de las Siete Palabras con el paso “La Oración en el Huerto”, tras la que le seguía la Cofradía de Jesús Nazareno con el paso “La Traición a Nuestro Padre”. La Cofradía de Medinaceli con el Cristo del mismo nombre y la Cofradía de la Virgen de las Angustias con el “Cristo de la Columna” seguían el cortejo procesional; sin faltar Santa Marta y la representación del juicio ante Pilato de la Cofradía de Santa Ana; a la que proseguía el Cristo de la Humildad de la Cofradía de San Sebastián y las Tres Marías; cerrando la procesión las Cofradías de San Juan y la Virgen de la Soledad con sendas imágenes.
Viernes Santo
-La Campaná
En la madrugada del Viernes Santo tenía lugar la Procesión de “La Campaná” protagonizada por Nuestro Padre Jesús Nazareno.
Los cofrades de dicha Hermandad se reúnen en el Templo Parroquial para escuchar el Sermón de la Pasión. Desde allí y vestido Jesús aún con túnica blanca, sin cruz y las manos atadas, al no haber sido todavía sentenciado a muerte, sale en procesión acompañado por sus cofrades que van tocando campanas para despertar al pueblo al paso de Jesús por las diferentes calles. Además, también ha estado acompañado por música de Capilla a cargo de músicos de la Banda Sinfónica Municipal.
El silencio que inundaba las calles quintanareñas solo se rompía al paso del Nazareno y las campanas que anunciaban su llegada, así como por las saetas que fieles y devotos dedicaban a esta imagen y que estremecían a los vecinos que, a pesar de ser una hora temprana, salieron a la calle para presenciar esta emotiva procesión concentrándose en puntos clave del recorrido que permiten ver una preciosa imagen de Ntro. Padre Jesús Nazareno.
A su llegada a la Plaza del Ayuntamiento, les esperaba el Paso de Jesús ante Pilatos de la Cofradía del Santo Descendimiento. Allí, desde el balcón del Consistorio, Zacarías López-Barrajón daba lectura a la sentencia que condenaba a Jesús a muerte. En esos momentos miembros de la Cofradía del Nazareno cambiaban la túnica blanca de la imagen por una de color morado como la que portan sus cofrades que, en la Procesión de los Pasos con la que enlazaban a continuación, sustituyen las campanas por la Cruz de Penitencia.
-Procesión de Los Pasos
La Procesión de Los Pasos es una de las procesiones más vistosas, con una duración de más de cuatro horas, que partía a primera hora de la mañana del Templo Parroquial para recorrer diversas calles de la localidad.
La Procesión de los Pasos representa, cronológicamente, desde la sentencia de Jesús ante Pilatos hasta el momento de su crucifixión entre los dos ladrones, pasando por el camino hacia el Calvario con la cruz.
Durante el recorrido tienen lugar varios momentos destacables que permiten recrear pasajes de la Pasión. Uno de ellos es el encuentro del Nazareno con la Verónica que esperaba su llega en el Ayuntamiento. Allí, a sus puertas, el Nazareno recreaba las tres caídas que sufrió de camino al Calvario siendo en la última cuando la Santa Mujer Verónica limpiaba su rostro. Desde ese instante, la imagen de la Verónica permanece a la espera del resto de Cofradías mostrando a cada una de ellas el rostro de Jesús en el pañuelo.
- Procesión del Silencio
La noche del viernes tenía lugar la Procesión del Silencio. Se trata de una de las procesiones más respetuosas que narra cronológicamente los momentos que vivió Jesucristo desde su crucifixión hasta su muerte y su entierro en el sepulcro.
Las Cofradías, con sus respectivos pasos procesionales mostraban los momentos más significativos de los últimos momentos de la vida de Jesús. Así, abría la procesión la Cofradía de las Siete Palabras con su paso de Jesús Crucificado en el Monte Calvario junto a dos ladrones; le seguía el paso de la Santa Mujer Verónica mostrando a todos el pañuelo con el que limpió a Jesús y donde quedó grabado su rostro. La Cofradía del Cristo de la Humildad procesionaba con “La Lanzada”, el paso que muestra el momento en que un soldado atraviesa el costado de Jesús con su lanza; y le seguía en procesión la imagen del Cristo de Gracia, patrón de la localidad, fiel reflejo de Cristo muerto en la Cruz. Uno de los pasos más llamativos y el de mayores dimensiones es el del Santo Descendimiento al que le siguen las Tres Marías y el paso de Santa Marta. La imagen de la Virgen de las Angustias que representa el momento en que María recoge a su hijo ya muerto entre sus brazos, precedía a la figura de San Juan y al Santo Sepulcro, portado con profundo respeto y custodiado por la Guardia Civil. Cerrando la procesión la Virgen de la Soledad junto con las autoridades locales, civiles y religiosas, así como el presidente de la Junta de Cofradías y el párroco de la localidad.
Sábado de Gloria
Pasada la media noche, partía del Templo Parroquial la imagen de Cristo Resucitado portado en andas por los miembros de la Cofradía Nuestro Padre Jesús Nazareno y acompañado por la Agrupación Musical Virgen de las Angustias, así como de todos los estandartes con advocaciones de Cristo.
Por otro lado, y a la misma hora, salía del Convento de los Franciscanos la imagen de la Virgen Dolorosa portada en andas por miembros de su Cofradía, acompañada por los estandartes con advocaciones marianas y la Banda Sinfónica Municipal dirigida por Sebastián Heras.
El Encuentro tenía lugar en la Plaza de la Constitución y a su llegada ambas imágenes fueron bailadas por los cofrades anderos simulando el momento en que María se encuentra con su hijo Resucitado.
Posteriormente, en señal de alegría, se le quitaba a la Virgen el Manto negro de luto para que luzca de blanco por la Resurrección de Jesús. En esos momentos, la Plaza estallaba en aplausos, se lanzaron pétalos de rosa a la Virgen, unas palomas que alzaron el vuelo sobre ambas imágenes y se prendió una pólvora en las inmediaciones de la Iglesia.
Las dos imágenes junto con todos los estandartes regresaban entonces, en procesión, por las calles Grande, Princesa, Plaza Miguel Echegaray y San Agustín hasta el Templo Parroquial donde se ofrecía chocolate caliente y magdalenas elaborado todo por las Hermanas Trinitarias.