Asimismo, piden que el gobierno regional tome cartas en el asunto para frenar la oleada de LGTBIfobia alimentada por los discursos de odio de la ultraderecha.
Tristemente, esta agresión no es algo nuevo. En los últimos años, y muy especialmente durante este verano, la escalada de violencia que sufren las personas del colectivo LGTBI+ se ha incrementado drásticamente. Estos delitos de odio aumentan al calor de los nocivos discursos de la ultraderecha. Según el Ministerio de Interior, entre 2013 y 2019, han aumentado un 45%. Algunos tan atroces como el asesinato de Samuel el pasado mes de julio en A Coruña. Otros, tan sanguinarios como el que ha tenido lugar hoy mismo, en Madrid.
Ante el miedo que muchas personas LGTBI+ experimentamos por ser quienes somos, instamos a que el Gobierno de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, presidido por Emiliano García-Page (PSOE), ponga en marcha la tramitación del anteproyecto de Ley de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI en Castilla-La Mancha y se dejen de dilatar los plazos de una promesa que se cumple ya tarde. De esta forma, se podrán blindar los derechos de las personas LGTBI+ que se ven sometidas a una violencia sistémica en su día a día.
Por otro lado, insistimos en que la solución no se puede quedar en el marco jurídico. Es necesaria la formación efectiva tanto de los miembros del ámbito jurídico como de los cuerpos de la Policía Local de los municipios de Castilla-La Mancha en materia LGTBI+ para saber cómo actuar ante agresiones como las que denunciamos en este escrito y evitar dañar, aún más, la integridad de la víctima. La asistencia y el apoyo después de que se den estas terribles agresiones es algo fundamental. Es algo para lo que la Administración debe estar preparada.
Por último, debemos ser conscientes del origen de estos delitos, de esta violencia. Denunciamos y condenamos explícitamente los discursos de odio contra las personas que integran el colectivo LGTBI+ manifestados por la extrema derecha que suponen un aliciente para cometer estas agresiones. Exigimos responsabilidad política.