CCoo la torrecica

“El desprecio del director hacia la salud de los trabajadores de la prisión de Albacete llega hasta el punto de negar las FFP2 a los profesionales que acceden al módulo confinado”

CCOO y Acaip-UGT Albacete piden el cese inmediato del director de la prisión de la Torrecica tras no confinar el taller productivo ante un positivo COVID.

Las representantes sindicales de CCOO y Acaip-UGT Albacete, Remedios de Lucas y Eva Moreno, han informado que un módulo se encuentra confinado tras dar positivo un funcionario que prestó servicios. “Es sorprendente el hecho de que el taller productivo dónde también desempeñó el servicio el funcionario contagiado se encuentre abierto y en plena producción”, han criticado.

En este sentido, han explicado que “el taller productivo está gestionado en colaboración con la empresa AJUSA, donde internos de prácticamente todos los módulos, desempeñan su labor durante una jornada de 8 horas, con una remuneración de aproximadamente 200 euros. Llama la atención el riesgo que conlleva, tanto para los trabajadores como para los propios internos, puesto que al estar en la misma situación que el módulo confinado, se puede propagar la pandemia en todos los departamentos como la pólvora”, han advertido.

“No entendemos la supeditación de intereses económicos por encima de la salud pública, máxime estando las prisiones blindadas para el acceso de personal ajeno (actividades fundamentales como apoyo de discapacidad, drogodependencia o actividades educativas). A esto se suma la desidia en la planificación por parte de la dirección del único contrato de limpieza del centro; queremos denunciar que no se están realizando las tareas de limpieza en las dependencias de la prisión desde el mes de enero (al finalizar el contrato) y al no iniciar en tiempo y forma el expediente de contratación. Nos tememos que pasen meses hasta que se adjudique a una empresa, constituyendo un auténtico peligro en plena tercera ola”.

“A este colapso organizativo se suman las actuaciones por parte de la dirección de la prisión de Albacete que, bajo la apariencia de normas preventivas de contención de la pandemia, ocultan otra realidad para restringir derechos de la escasa plantilla”.

Además, han criticado que “la dirección de la prisión ha limitado la posibilidad de comprar agua en el formato de 1,5 litros, ya que se encuentra cerrado el economato de funcionarios hasta la 10 de la mañana. Queremos dejar claro que los funcionarios carecen de agua en sus oficinas, obligándoles a beber el agua en los lavabos de los WC, ‘una situación denigrante’ y poco higiénica. Aunque hay una máquina de vending, es inaccesible para el funcionario puesto que no puede abandonar el módulo al encontrarse solo; y a un precio superior al de mercado y a costa del funcionario”.

“Salud pública se está planteando la obligatoriedad de las mascarillas FFP2 y nosotros nos encontramos en la misma situación que en el mes de mayo (una mascarilla higiénica por jornada de 24 horas); el desprecio del director hacia la salud de los trabajadores de la prisión de Albacete llega hasta el punto de negar las FFP2 a los profesionales que acceden al módulo confinado”.

En un turno de 24 horas ininterrumpidas, en el turno de noche, cuando la población penitenciaria está cerrada, hay que pedir permiso al Jefe de Servicios para ir al comedor o utilizar la máquina de vending y que, él mismo informe por escrito del motivo e indicando el tiempo empleado. Es denigrante que haya que pedir permiso para ir a cenar, cuando es un derecho básico de cualquier trabajador.

Así mismo, denuncian la opacidad en la transmisión de datos COVID a los representantes de los trabajadores; una situación que se viene produciendo desde el inicio de la pandemia, siendo necesario instar a la dirección la facilitación de datos de los positivos, como obliga la SGIP. En concreto, en esta tercera ola, nos constan extraoficialmente más funcionarios positivos COVID que los comunicados. La vulneración de los derechos a la consulta y participación de los representantes de los trabajadores es continua, como ejemplo en apenas un mes se ha solicitado la celebración de un Comité Extraordinario de Seguridad y Salud, ante la desidia e incoherencias que hemos descrito, no habiendo recibido respuesta alguna.

“Debido a la unilateralidad en la toma de decisiones que afectan a los derechos de los trabajadores, a la desidia en la gestión de los medios mínimos de lucha contra la pandemia (falta de contrato de limpieza, no confinamiento ante positivo en el taller productivo, no reparto de mascarillas…) y la utilización “torticera” de la pandemia como pretexto para realizar actuaciones que denigran a los trabajadores, desde CCOO y Acaip-UGT Albacete pedimos el cese inmediato del Director del centro y la inmediata subsanación de las deficiencias que ponemos de manifiesto, ya que en caso contrario pueden derivar en el colapso de “La Torrecica”, han concluido.

CCOO, Acaip-UGT y CSIF se concentraron contra la “brutal agresión” que sufrió un funcionario de prisiones de “La Torrecica”

 Cerca de 80 personas se movilizaron frente a la Subdelegación del Gobierno para denunciar la “falta de medios y medidas de seguridad” en la prisión

El personal de la prisión de ‘La Torrecica’ de Albacete protestó ayer ante la Subdelegación del Gobierno de Albacete para denunciar la “falta de medios y medidas de seguridad” en el centro penitenciario.

Silvia Fernández, secretaria general de CCOO-Instituciones Penitenciarias, reclamó “un plan de prevención eficaz contra las agresiones. Actualmente, el protocolo de actuación de instituciones penitenciarias, permite que un solo funcionario se vea obligado a custodiar grupos de 100 internos”.

Fernández, incidió en la urgencia de “un protocolo específico de actuación frente a las agresiones y que al menos haya dos funcionarios por módulo. Ni tenemos un plan de prevención, ni se cumple la Ley de prevención de riesgos laborales en el medio penitenciario”.

“CCOO demandamos más prevención y más medios para enfrentar esta lacra que nos cuesta más de una agresión al día.  El 90% de las agresiones, que suceden en la Administración General del Estado, las registra prisiones”, informó Fernández.

“Debido a las vacantes que faltan por cubrir y al envejecimiento de la plantilla hay más inseguridad y riesgo de altercados”.  Actualmente, en el centro penitenciario de Albacete, un tercio de la plantilla está en prácticas. CCOO denunciamos por enésima vez “la  falta de efectivos” que se lleva arrastrando desde hace años; los trabajadores están sufriendo una situación de deterioro de las condiciones laborales, remarcó Fernández.

“La endémica falta de personal, sin el personal necesario de vigilancia, junto a una plantilla envejecida, incrementan los riesgos de agresiones para el personal que presta servicio en estas condiciones tan precarias”, incidió la secretaria general de CCOO-Instituciones penitenciarias.

Para los sindicatos, la agresión que se produjo el pasado jueves, en la cárcel de Albacete, es un ejemplo de lo que viven diariamente los trabajadores de instituciones penitenciarias; sufriendo agresiones en el interior de los centros penitenciarios, incrementándose de forma alarmante, tanto su número como la gravedad de las mismas. En este sentido, exigieron medidas para poner freno a las agresiones en la prisión de Albacete y pidieron mecanismos eficaces como la automatización de los módulos, tanto de funcionarios como de internos, para casos de emergencia.

También, exigieron la equiparación salarial de aquellos funcionarios que ejerzan la misma actividad “retribuciones justas y acordes a las funciones que realizan y a las responsabilidades que asumen en la prisión de Albacete. Unas mejoras retributivas acordes a las realizadas a colectivos también del Ministerio de interior”. Entre otras reivindicaciones, los sindicatos pidieron el reconocimiento como agentes de autoridad en el ejercicio de sus funciones.

“Esta agresión, una más, vuelve a demostrar las carencias de personal, medios y organización en la prisión de Albacete, así como la peligrosidad y penosidad a la que estamos expuestos”

CCOO Albacete y Acaip-UGT denunciamos que sólo hay una persona que pueda socorrer en todo el centro a los funcionarios, que trabajan solos en un módulo o en dos módulos como este caso, el jefe de servicios, ya que es el único que porta la llave de apertura. En la era digital, trabajamos como en la medieval, no hay sistema de automatización en las puertas de acceso a los módulos en situaciones de emergencia”

“Si el jefe de servicios, no hubiera estado en el recinto, ya que están a su cargo también otros edificios como el CIS, que se encuentran alejados para una intervención de emergencia como este caso, las consecuencias podrían haber sido fatales”

Ayer jueves, a las 13,00 horas, se producia una agresión a un funcionario de prisiones en el Centro Penitenciario “La Torrecica” de Albacete. Los representantes sindicales de CCOO Albacete y Acaip-UGT han informado sobre los hechos acontecidos en la prisión.

“El interno, con antecedentes violentos, actitudes y conductas conflictivas, se encuentra en aislamiento COVID por su reciente ingreso, lo que conlleva el paseo con su compañero de celda, en un patio distinto al resto de internos del módulo de ingresos. Un único funcionario, es el encargado de ocuparse de las salidas a patio de los internos en aislamiento COVID y de vigilar al resto de internos”, han informado.

“El funcionario ha procedido a recoger a los dos internos en aislamiento que paseaban en el patio de otro módulo. En un momento que desconocemos, ya que se están investigando los hechos, uno de los internos de gran complexión y fuerza, ya que supera los 100 kilos, ha agarrado por detrás al funcionario realizándole una maniobra de estrangulamiento. Además, el interno portaba un trozo de madera como arma que había obtenido del perchero de su propia celda, provocando al funcionario lesiones que aún están por valorar” han informado.

“De estos hechos, se extrae la premeditación y alevosía del interno, ya que poseía un objeto usado como arma, actuar sorpresivamente y por detrás, lo que pudiera ser constitutivo de un presunto delito de tentativa de homicidio o asesinato en su caso”, han dicho.

“Los hechos no han sido, aún más graves, porque el funcionario ha conseguido en un momento puntual avisar por el ‘walkie talkie’ y decir cuatro palabras ‘agresión funcionario módulo 5’, puesto que el botón de emergencia es la única conexión con el exterior del módulo”, han lamentado.

“CCOO Albacete y Acaip-UGT denunciamos que sólo hay una persona que pueda socorrer en todo el centro a los funcionarios, que trabajan solos en un módulo o en dos módulos como este caso, el jefe de servicios, ya que es el único que porta la llave de apertura. En la era digital, trabajamos como en la medieval, no hay sistema de automatización en las puertas de acceso a los módulos en situaciones de emergencia. Si el jefe de servicios, casualmente no hubiera estado en el recinto, ya que están a su cargo también otros edificios como el CIS, que se encuentran alejados para una intervención de emergencia como este caso, las consecuencias podrían haber sido fatales”, han lamentado.

Así mismo, los representantes sindicales han denunciado en distintos comités de seguridad y salud, el mal funcionamiento de los ‘walkie talkies’ para que los funcionarios puedan alertar de los incidentes. “Se ha solicitado su sustitución por otros análogos a los de otros funcionarios del Ministerio del Interior, al igual que se ha solicitado la apertura de ventanillas para trato con internos por cuestiones de seguridad. A fecha de hoy se sigue igual”, han lamentado.

“Esta agresión, una más, vuelve a demostrar las carencias de personal, medios y organización, así como la peligrosidad y penosidad a la que estamos expuestos. Se trabaja en soledad, sin encargados de departamento, que a su vez se hacen cargo de varios departamentos, en este caso con internos de primer grado y aislados COVID”.

Los responsables sindicales han remarcado la necesidad de mejoras laborales y retributivas, advirtiendo que “1/3 de funcionarios de interior están en prácticas, son inexpertos, haciéndose cargo de cualquier módulo, incluso los más conflictivos, pese a la insistencia de los sindicatos de ampliar la RPT y dotar de estabilidad a la plantilla y ampliar el número de encargados, que en todo caso debería haber uno en cada módulo como en el resto de las prisiones” han reivindicado.

“Según el Ministerio del Interior, trabajar en esta prisión y en estas circunstancias supone la retribución más baja (hasta 500 euros menos que otros funcionarios con la misma oposición), por estar considerada de baja peligrosidad, pero a los hechos expuestos nos remitimos” han denunciado.

Además, han informado que “debido a los hechos acontecidos, funcionarios de segunda actividad por su edad, profesionales de mantenimiento y funcionarios en prácticas en módulos especialmente complejos, se han tenido que hacer cargo de módulos con población penitenciaria”.

Para concluir, los responsables sindicales han declarado que en el momento del cierre de esta nota de prensa desconocen el estado de salud del funcionario, que ha tenido que ser trasladado al hospital.

“Diecisiete trabajadores de la prisión han dado positivo, y nueve están en cuarentena esperando que se les haga la prueba. El acceso a las pruebas PCR es muy restringido y no se le hace a todo el personal que hace la cuarentena. De realizarse más pruebas, posiblemente los casos aumentarían”

“Desde CCOO denunciamos el elevado número de contagios que tiene la prisión. La décima parte de la plantilla está contagiada siendo el colectivo esencial que registra el mayor número de infectados por coronavirus de la provincia después de los sanitarios”

Silvia Fernández, secretaria general de prisiones FSC-CCOO, junto a Juan Fulgencio Fernández, delegado sindical de CCOO en la prisión de Albacete denuncia el elevado número de contagios por Covid-19 que tiene la prisión de La Torrecica de Albacete. “El impacto del Covid-19 en la prisión de Albacete es muy elevado. Según los datos oficiales de Albacete por cada 100 habitantes hay 1,17 casos confirmados de coronavirus, mientras que en la prisión por cada 100 habría 10 positivos” han manifestado sendos responsables sindicales de prisiones.

“Diecisiete trabajadores de la prisión han dado positivo, y nueve están en cuarentena esperando que se les haga la prueba. El acceso a las pruebas PCR es muy restringido y no se le hace a todo el personal que hace la cuarentena. De realizarse más pruebas, los casos aumentarían”.

“Consideramos que es necesario que se hagan test rápidos serológicos en la prisión para conocer el nivel real de penetración del virus y detectar con anticipación posibles brotes epidémicos. Así llevamos reclamándolo desde hace semanas”.

“El principal vector de contagio y transmisión del virus al interior de las prisiones es su personal, por eso tenemos que seguir reforzando las medidas preventivas y de protección frente al Covid-19”.

“La estructura de la prisión de Albacete impide que se pueda mantener la distancia de seguridad de 2 metros recomendada por las Autoridades Sanitarias. Para cualquier tarea el personal penitenciario tiene que tener un contacto estrecho con la población reclusa. Tampoco se están proporcionando equipos de protección individual adecuados y la dirección del centro obliga a usar mascarillas de 4 horas de duración para 40 horas de trabajo. Todas estas deficiencias son las principales causas de que seamos una de las prisiones con más casos positivos de COVID-19”.

“Otra de las demandas urgentes teniendo en cuenta el elevado nivel de impacto del virus en la prisión, es que se proteja al personal penitenciario especialmente sensible a la exposición al Covid-19. La plantilla de La Torrecica de Albacete está envejecida y cuenta con trabajadores con patologías base consideradas por el Ministerio de Sanidad como de riesgo, que continúan trabajando expuestos a este virus que es letal entre la población vulnerable, a pesar de las recomendaciones del Gobierno y Autoridades Sanitarias de quedarse en casa preferentemente hasta que se controle la epidemia”.

“CCOO quiere poner en valor la labor del personal penitenciario que además de gestionar la emergencia sanitaria en la que nos encontramos, tiene que garantizar la seguridad y reinserción de las personas privadas de libertad, en un contexto de restricciones en derechos sin precedentes en la historia de las prisiones”.