El Patronato Municipal de Personas con Discapacidad del Ayuntamiento de Ciudad Real organiza entre el 14 y el 18 de mayo un curso de formación gratuito de danza inclusiva en silla de ruedas. Sera impartido por Mari Carmen Melgar y José Melgar, formadores y especialistas de danza inclusiva en silla de ruedas.
Según ha explicado Matilde Hinojosa, concejala de Acción Social, este curso surge la petición por parte de dos entidades AEDEM y Ciudad Accesible de la realización de actividades de ocio para que las personas con diversidad funcional pudieran tener una actividad compartida con personas sin discapacidad. Pero a la hora de encontrar a alguien que lo impartiera, se constató que no hay una especialización para trabajar danza con personas con diversidad funcional, y se buscó un curso de formación para especializar a profesionales. Así se descubrió a Mari Carmen y José que son de Ciudad Real, aunque están realizando su trabajo en Bélgica y Francia.
Se trata de un curso dirigido a profesionales en diferentes áreas: danza, educación física, fisioterapia, psicomotricidad, terapia ocupacional, educación especial o logopedia. El curso, para el que se ofertan 15 plazas, se desarrollará en el Espacio Joven de la calle Barcelona. Las inscripciones pueden hacerse desde el 2 al 8 de mayo en el Patronato de Personas con Discapacidad, en la calle Pozo Concejo nº 6 de 8:30 a 14 horas.
Se pretende con este curso formar a los profesionales con los conocimientos pedagógicos y técnicos del baile en silla de ruedas, ofreciendo un abanico de propuestas pertinentes, diferenciadas y que se ajusten a la diversidad de los usuarios, con competencias que les permitan desarrollar una actividad de danza en un contexto inclusivo.
La danza inclusiva en silla de ruedas permite a todas las personas con y sin diversidad funcional física el acceso a la danza, ofreciendo un espacio donde puedan encontrarse, compartir y comunicar a través del movimiento. La danza inclusiva permite sacar a la luz las capacidades de las personas en situación de discapacidad, a su vez, favorece la comunicación, el contacto y la complicidad entre personas con y sin discapacidad convirtiendo la danza en un momento mágico.