El 14 de febrero es el Día Internacional de las Cardiopatías Congénitas, una patología muy desconocida, a pesar que en España nacen cada año 4.000 niños y niñas con este problema. Para visibilizarlas y mostrar a las personas que la padecen que no están solas, la Fundación ‘Menudos Corazones’ –de la que forman parte 160 familias en Castilla La Mancha- instaló una mesa en la Plaza de España de Alcázar de San Juan, intercambiando piruletas con mensaje por la cantidad simbólica de 50 céntimos. Rosa Melchor, alcaldesa de Alcázar, apoyó la iniciativa.
Niñas y niños que nacen con una cardiopatía congénita, pasan gran parte de su infancia hospitalizados y, en ocasiones, pasan por quirófano varias veces. Es el caso de Irene, una joven de 23 años que asegura que “se puede vivir con una cardiopatía”. A su corta edad ha pasado ya por tres intervenciones que le han permitido mejorar su patología y desarrollar hoy su vida con total normalidad. Irene puso en valor el trabajo que realiza la Fundación ‘Menudos Corazones’, tanto por el apoyo que ofrecen a las niñas y niños hospitalizados, para hacérselo más llevadero, como a las familias a través de apoyo psicológico o alojamiento durante las intervenciones.
“Hasta que no vives esta situación no te das cuenta de lo que implica”, asegura Raquel Peñuela, miembro de esta fundación solidaria que cuenta con 160 familias en Castilla La Mancha. La visibilización de las cardiopatías congénitas era uno de los objetivos de la campaña realizada en Alcázar, al mismo tiempo que mostrar a las personas que la padecen que “no están solas”.
Rosa Melchor, alcaldesa de Alcázar de San Juan, acompañada por los concejales Mariano Cuartero y Patricia Benito, sumaron su apoyo a esta campaña y adquirieron las piruletas decoradas con corazones con el mensaje ‘Se puede nacer, vivir y ser feliz con un corazón diferente’.
La primera edil volvió a destacar el espíritu solidario de la gente de Alcázar, así como los servicios sanitarios de la ciudad, especialmente el Hospital Mancha Centro, “que cuenta con magníficos profesionales para ayudar en este y otros tipos de patologías”. También valoró la labor de la Fundación ‘Menudos Corazones’, apuntando que este tipo de asociaciones “constituyen una importante red de apoyo para las familias que se sienten impotentes cuando su hijo o hija nace con una cardiopatía y piensan que están solos”.
