A media mañana se iniciaba el traslado, una medida acordada ayer por todas las administraciones sobre la gestión del aislamiento de los temporeros del asentamiento de Albacete donde se declaró un brote de Covid-19.
La Delegación Provincial de Sanidad de Albacete supervisa desde primera hora de hoy el traslado de los temporeros que permanecían confinados en la Institución Ferial de Albacete (IFAB) a causa del brote de coronavirus declarado en el asentamiento de la carretera de las Peñas.
Se trata de una de las medidas acordadas ayer en sendas reuniones en las que participó el director general de Salud Pública de la Consejería de Sanidad, Juan Camacho, tanto en la Delegación provincial de Sanidad como en la IFAB, junto a representantes del Ayuntamiento de Albacete y la Subdelegación del Gobierno en esa provincia, para evaluar la situación de los temporeros.
A media mañana se iniciaba este traslado con un amplio dispositivo sanitario, logístico y de seguridad en el que participan profesionales de la Delegación Provincial de Sanidad, SESCAM, Delegación Provincial de Educación, Ayuntamiento de Albacete, Diputación, Subdelegación del Gobierno, Policía Local, Policía Nacional, Bomberos de Albacete o Protección Civil.
Asimismo, colaboran Cruz Roja y el Ejército, en el acondicionamiento de las nuevas localizaciones, así como Médicos del Mundo o ACAIM, en tareas de apoyo y mediación.
Tanto la Junta de Comunidades como el Ayuntamiento de Albacete han cedido espacios para alojar a estos temporeros, en grupos reducidos, de entre 20-25 personas, y que deben continuar con la cuarentena, bajo la supervisión de la Consejería de Sanidad. Una vez finalizado el confinamiento en cada localización, las instalaciones utilizadas serán meticulosamente desinfectadas.
Esta medida pretende mejorar las condiciones de habitabilidad y evitar que se sigan produciendo nuevos contagios, a fin de poder dar por cerrado el brote lo antes posible. Para ello, los temporeros están siendo sometidos a una nueva PCR a su llegada a la nueva ubicación, con el fin de mantener lo más actualizada posible la situación epidemiológica de los inmigrantes confinados.
