El diputado regional por Cuenca intentó, en el Pleno celebrado el pasado jueves en Toledo, que el Gobierno de Page diera una respuesta firme y clara sobre su intención o no de que en el colegio de la localidad conquense se impartan clases a partir de septiembre, asumiendo los costes de las obras de la instalación
Los únicos argumentos esgrimidos por el consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, que fue el encargado de responder a la pregunta de Prieto, fueron insistir en que esta infraestructura fue cerrada por Cospedal, cuando en realidad quien dejaba sin clases a los niños de este pueblo fue el gobierno del socialista José Bono en el año 2003
“Atenderemos la solicitud del Ayuntamiento de Casas de los Pinos, en Cuenca”. Estas fueron las únicas y vagas palabras que Benjamín Prieto, diputado regional del Partido Popular, lograba extraer al consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, encargado de responder a la pregunta que el conquense llevaba el pasado jueves al Pleno de Las Cortes con la pretensión de que el Gobierno de Page se comprometiera de una vez, y en firme, a que las familias de este municipio van a poder llevar al colegio a sus hijos en su propio pueblo. “Somos conscientes de que la Junta ha leído las cartas que, desde el Ayuntamiento, firmadas por el anterior alcalde y el actual, además de por familias, se han dirigido a la Delegación Provincial de Cuenca, que obviamente ha atendido la solicitud. Pero de lo que también somos conscientes es de que no asegura, en ningún momento, que va a pagar los 45.000 euros que se necesitan para adecuar la instalación”.
Para Benjamín Prieto, resulta una auténtica contradicción que el Gobierno de Page abandere la reapertura de escuelas rurales y que incluya en todos los discursos de sus representantes la palabra despoblación cuando en realidad y llega el momento de tomar decisiones que ayuden a que los vecinos se queden en sus pueblos, “no es capaz de destinar una cantidad ridícula dentro de sus presupuestos a acondicionar un edificio. La Junta sabe que 45.000 euros para un pueblo tan pequeño como Casas de los Pinos es una cifra muy elevada que sus vecinos no pueden asumir”, recalcaba el diputado. “Quizás nos iría mejor a todos los conquenses si en vez de gastar del dinero público en asesores y oficinas que, dicen, trabajan para paliar la despoblación se destinaran esos recursos a solucionar problemas concretos, a atender la realidad de nuestros pueblos”, insistía Prieto.
Lo más grave de todo este asunto, a juicio del también presidente del Partido Popular en Cuenca, es que la Junta de Comunidades no tiene un solo argumento válido que justifique que en Casas de los Pinos no se impartan clases, empezando por la mentira más socorrida que están utilizando desde que todo este asunto saliera a la luz pública y que no es otra que la de que el colegio lo cerró el gobierno de Cospedal. Ya en un comunicado oficial, remitido por la Delegación de la Junta en Cuenca, se realizaba esta afirmación el pasado febrero y hubo que refrescarles la memoria tanto a la delegada del Gobierno regional en Cuenca, María Ángeles Martínez, como a la responsable de Educación, Sonia Isidro, aclarándoles que fue precisamente su colega, José Bono, en 2003 quien decidía el cierre de la escuela de Casas de los Pinos, “parece que la comunicación entre Cuenca y Toledo no funciona muy bien y sobre todo el respeto a la ciudadanía y la ética de contar a los ciudadanos la verdad. Que el único argumento que utilice el consejero Escudero para no asegurar a los niños de Casas de los Pinos que van a poder ir a su colegio el próximo septiembre es que lo cerró Cospedal, siendo mentira, es realmente insultante para todos los conquenses”, reiteraba Benjamín Prieto.
El parlamentario también se lamentaba de que este pasado Pleno, precisamente, haya sido uno de los más nefastos y que ha perjudicado gravemente a la provincia de Cuenca ya que los diputados socialistas votaron en contra de todas las medidas específicas que los populares presentaban para luchar contra la despoblación, “el Psoe considera que no es importante una fiscalización diferente para los habitantes del mundo rural, que nuestros pueblos no necesitan inversiones, que el patrimonio puede seguir cayéndose o que las infraestructuras y las comunicaciones tienen que seguir siendo tercermundistas. Eso sí, Page y Guijarro inauguran empresas prometiendo 200 puestos de trabajo, como la de Almodóvar del Pinar hace dos años, y no sólo no llegaron ni de lejos a esa cifra, sino que han ido despidiendo paulatinamente a empleados hasta el actual ERE, con el que quedarán únicamente 8 personas. ¿Así se lucha contra la despoblación? ¿Sin proyectos y mintiendo?”, insistía Prieto, “llevamos en nuestra región más de 30 años gobernados por socialistas, frente a cuatro del Partido Popular y ya va para cinco los consecutivos de Page. Algunas excusas ya no sirven porque no hay quien se las crea”, concluía.
