En torno a dos centenares de personas se movilizaron ayer para expresar su oposición al proyecto que pretende llevar a cabo el Gobierno Municipal socialista y que cambiaría radicalmente la fisionomía del conjunto urbanístico del siglo XVII y Bien de Interés Cultural
El portavoz del Grupo Municipal Popular denuncia el oscurantismo con el que está actuando el alcalde socialista pese a las reiteradas peticiones de información realizadas por concejales de la oposicion y ahora por los vecinos
El Partido Popular de Tembleque participó ayer en la concentración vecinal a la que asistieron en torno a dos centenares de personas convocada para mostrar su oposición al proyecto de solado de la Plaza Mayor de la localidad que pretende llevar a cabo el Gobierno municipal socialista a partir de septiembre y que cambiaría radicalmente la fisionomía de la misma.
Los vecinos concentrados bajo el lema “Stop al solado de la plaza, no destruyamos nuestra historia” expresaron de este modo su petición al alcalde socialista de la localidad, Jesús Fernández, para que revise el proyecto de obras que pretende llevar a cabo en la emblemática plaza, del siglo XVII y declarada Bien de Interés Cultural.
El portavoz del PP en la localidad, Luis Briones, informó a los asistentes sobre los detalles que el Grupo Popular conoce del proyecto y cuyo punto más delicado consiste en el solado mediante baldosas de la Plaza, ya que el origen de este espacio es el de coso taurino, por lo que actualmente el suelo es de tierra prensada, tal y como se diseñó en su origen.
Según el portavoz popular, “llama la atención el oscurantismo con el que el actual Equipo de Gobierno está tratando este tema y, pese a las reiteradas llamadas de los concejales de la oposición para que se informe y se pregunte al pueblo sobre este proyecto, el actual regidor se niega en rotundo excusándose en que está legitimado por las urnas para tomar esta decisión”.
Los organizadores avanzaron su intención de continuar con las movilizaciones durante los días de las fiestas patronales de la localidad con el objetivo de que el regidor cambie de opinión y consulte al pueblo acerca de la ejecución del proyecto. Una reforma que, a juicio de arqueólogos, arquitectos, urbanistas, historiadores del arte, consultados por el Grupo Municipal de Tembleque, no es una actuación correcta para un conjunto urbanístico del siglo XVII.